Caza del hombre en Londres

La de ayer fue la mayor operaci¨®n de busca y captura desarrollada en el Reino Unido en los ¨²ltimos a?os, seg¨²n Scotland Yard. En el curso de la misma se realizaron varios registros. Un ambiente de tensi¨®n y miedo contenido invad¨ªa la capital brit¨¢nica.

El objetivo es encontrar cuanto antes a los cuatro presuntos responsables de los atentados fallidos del jueves contra tres estaciones de metro y un autob¨²s. La polic¨ªa difundi¨® ayer sus fotograf¨ªas, tomadas por c¨¢maras de v¨ªdeo de seguridad, e hizo un llamamiento a la colaboraci¨®n ciudadana.

El jefe de Scotland Yard, sir Ian Blair, asegur¨® que "el tiroteo" en la estaci¨®n de Stockwell estaba relacionado con la "operaci¨®n antiterrorista en marcha" y que los agentes dispararon contra un hombre "que desaf¨ªo a los polic¨ªas y se neg¨® a seguir sus ¨®rdenes". Un testigo, Mark Whitby, relat¨® a la cadena de televisi¨®n p¨²blica BBC que el hombre fue tiroteado cuando se encontraba en el suelo. La cadena Sky News se?al¨® que el fallecido no era uno de los cuatro sospechosos buscados por la polic¨ªa.

Varias asociaciones de musulmanes del Reino Unido expresaron ayer su temor de que las fuerzas de seguridad sigan una pol¨ªtica de disparar primero. A ¨²ltima hora de la tarde, Scotland Yard anunci¨® la detenci¨®n de una persona en la misma zona de Stockwell "en relaci¨®n con la investigaci¨®n", mientras quedaba en libertad un sospechoso detenido en Leeds el pasado 12 de julio.

La situaci¨®n no era anoche precisamente tranquilizadora para los habitantes de Londres: cuatro hombres -presuntos responsables de la colocaci¨®n el jueves de cuatro bombas en el sistema p¨²blico de transportes, y que quiz¨¢ estaban dispuestos a morir en los atentados- se hallaban escondidos en alg¨²n lugar, mientras las cadenas de televisi¨®n hablaban desde la ma?ana de tiroteos, alarmas de bombas y registros. Tampoco se sabe si el detenido en Stockwell pertenece al grupo de los cuatro o qu¨¦ relaci¨®n tiene con los atentados.

Previamente la polic¨ªa hab¨ªa detenido en Birmingham a otro individuo, que fue liberado poco despu¨¦s. Lo mismo sucedi¨® con el ¨²nico detenido hasta ahora por los atentados del 7-J, un hombre de 29 a?os capturado el Leeds el pasado 12 de julio y que anoche qued¨® en libertad sin cargos.

El grupo que reivindic¨® el 7-J, las Brigadas de Abu Hafs al Masri, se atribuy¨® ayer, a trav¨¦s de Internet, el ataque fallido del jueves.

"Me gustar¨ªa reiterar mi llamamiento a la calma a los ciudadanos, que deben ser conscientes de que van a circular muchos rumores sobre lo que ocurre. La situaci¨®n est¨¢ bajo control y la investigaci¨®n avanza", afirm¨® el jefe policial Ian Blair, que describi¨® la operaci¨®n en curso "como el mayor desaf¨ªo al que se ha enfrentado la polic¨ªa metropolitana".

Durante su comparecencia ni el comisionado Blair ni su jefe de operaciones especiales, Andy Hayman, quisieron responder a preguntas de la prensa y se limitaron a leer declaraciones, a difundir im¨¢genes y facilitar las descripciones de los cuatro hombres "a los que la polic¨ªa quiere interrogar cuanto antes en relaci¨®n con los atentados del jueves". "Cualquiera que tenga informaci¨®n sobre d¨®nde se encuentran estos hombres debe llamar inmediatamente a la polic¨ªa. Los ciudadanos no deben acercarse a ellos. Si alguien cree que conoce la identidad de estos hombres o posee cualquier informaci¨®n sobre ellos y sobre sus movimientos, debe llamar a la l¨ªnea antiterrorista confidencial", dijo Hayman.

A¨²n quedan muchas preguntas por responder sobre los fallidos atentados del jueves contra las estaciones de Warren Street (centro), Oval (sur) y Shepherd's Bush (oeste) y un autob¨²s de la l¨ªnea 26 en Hackney, calcados a los ataques suicidas que el 7-J costaron la vida a 52 personas, adem¨¢s de los cuatro suicidas, y que han sumido a los brit¨¢nicos en una sensaci¨®n de amenaza constante.

Muchas preguntas

?Forman parte los autores del mismo comando? ?Se trata de la misma oleada de ataques planeada desde el principio o son imitadores independientes? ?Eran suicidas o intentaron dejar las bolsas con los explosivos y huir? ?Por qu¨¦ fallaron los explosivos? Ante los controles policiales de Stockwell, donde la polic¨ªa abati¨® ayer a un hombre , un estudiante se hac¨ªa otra pregunta: "?Habr¨¢ m¨¢s ataques?".

El jefe de operaciones especiales de Scotland Yard se limit¨® a asegurar que "los artefactos estaban compuestos por explosivos caseros" -varios diarios se?alaron, adem¨¢s, que conten¨ªan tuercas y clavos para provocar los mayores da?os posibles- y que "existen similitudes con los ataques del 7 de julio dado que en ambos los objetivos eran tres estaciones del metro y un autob¨²s". Como aseguraba el experto en asuntos de Interior de la BBC, Neil Bennett, "es obvio que saben mucho m¨¢s de lo que est¨¢n diciendo".

La muerte de un hombre en la estaci¨®n de Stockwell, una zona popular del sur de Londres de poblaci¨®n mayoritariamente negra, sacudi¨® la capital en torno a las diez de la ma?ana. Var?ios testigos se?alaron que un grupo de agentes de paisano persiguieron a un sospechoso, un hombre joven de aspecto paquistan¨ª, desde la calle hasta el and¨¦n en medio de escenas de p¨¢nico y gritos hasta que le dispararon cinco tiros cuando se acercaba al metro. "Un hombre llevaba una pistola negra en la mano, los polic¨ªas le tiraron al suelo, se subieron sobre ¨¦l y le dispararon cinco veces. Nunca hab¨ªa visto nada as¨ª en mi vida", relat¨® a la BBC Mark Whitby. Otros testigos hablaron de disparos a corta distancia.

"Si uno tiene enfrente a alguien que podr¨ªa detonar explosivos, si se le permite seguir en estado consciente, es l¨®gica una pol¨ªtica de tirar a matar", manifest¨® el alcalde de Londres, Ken Livingstone.

El Consejo de los Musulmanes Brit¨¢nicos (MBC) pidi¨® explicaciones a la polic¨ªa. "Tiene que haber muy buenas razones para que la polic¨ªa dispare cinco veces a un hombre y necesitan explicar bien esas razones", dijo Inayat Bunglawala, un portavoz del MBC, a la agencia Press Association. "Estamos recibiendo llamadas de musulmanes preocupados por una pol¨ªtica de tirar a matar", agreg¨®.

Sobre los registros realizados en diferentes puntos de Londres, la polic¨ªa apenas difundi¨® informaci¨®n. Los testigos hablaron de agentes armados y con chalecos antibalas gritando a los vecinos que no se asomasen en el barrio de Kilburn, al oeste de Londres, relatos que aumentaban la situaci¨®n de estado de sitio que se viv¨ªa en la capital.