La 'moviola' del jazz
El Festival de Jazz donostiarra rinde homenaje a sus fundadores y a las figuras clave de su trayectoria
Cuenta Imanol Olaizola que el 17 de noviembre de 1964, cuando los miembros de la comisi¨®n de m¨²sica del Centro de Atracci¨®n y Turismo de San Sebasti¨¢n (CAT) propusieron la creaci¨®n del Festival de Jazz en sesi¨®n plenaria, les tomaron por locos. "Se organiz¨® una gran pol¨¦mica. Hubo incluso campa?as de prensa en contra. Y lleg¨® a escribirse que la iniciativa era propia de un loco que le recordaba a otro que quiso vender su coche para comprar gasolina. Apostar por el proyecto fue realmente una aventura".
A Olaizola se le escap¨® ayer m¨¢s de una sonrisa mientras recordaba esta an¨¦cdota, en el Museo Chillida-Leku de Hernani, tras participar en el homenaje que el Jazzaldia tribut¨® a una veintena de personas que han sido clave en su trayectoria: desde el ex director del CAT Rafael Aguirre Franco, al periodista Luis ?ngel Garc¨ªa, la que fuera secretaria del certamen hasta 1986, Charo L¨®pez, o el l¨ªder de la orquesta de Mondrag¨®n Javier Gurruchaga, entre otros. En el acto se ech¨® especialmente en falta a una persona, al comerciante Mariano Larrandia, el visionario y genial insensato que a mediados de los sesenta lleg¨® al CAT con la cantinela de que ser¨ªa interesante crear un festival de jazz, al estilo del que ya exist¨ªa en Niza.
"Nuestras actividades han venido un poco de lo que ocurr¨ªa en la Costa Azul", reconoce Aguirre Franco. "El Festival de Cannes, que naci¨® en 1946, estuvo en el origen del Zinemaldia. "Luego Mariano nos habl¨® del festival de jazz de Niza, nos trasladamos a verlo, y pensamos que era transportable a San Sebasti¨¢n. El CAT ten¨ªa entonces bastante independencia de actuaci¨®n y lo asumimos en nuestro presupuesto".
El Jazzaldia arranc¨® en 1966 con modestia y humildad en la plaza de la Trinidad -era el ¨²nico espacio gratuito disponible-. Ten¨ªa 400.000 pesetas de presupuesto (2.400 euros) y las emple¨® para contratar a Mickey Baker y a tres grupos aficionados. "Luego, poco a poco, fueron viniendo m¨¢s profesionales", contin¨²a Aguirre Franco. "Pero no podemos olvidar una cosa. El festival ten¨ªa un concurso de aficionados al que ven¨ªan grupos de alt¨ªsimo nivel". Sting, por ejemplo, actu¨® en San Sebasti¨¢n cuando era todo un desconocido.
En cuarenta a?os, la copia, el Jazzaldia, ha superado al festival original de Niza. Su eco es mayor, su programaci¨®n m¨¢s rotunda y ambiciosa, dicen los expertos, y la respuesta del p¨²blico dif¨ªcilmente mejorable. La organizaci¨®n, que espera superar los 90.000 espectadores en su cuarenta cumplea?os, ha dispuesto este a?o de 1,33 millones de euros. Con ese presupuesto ha programado 75 conciertos, 47 de ellos gratuitos, en recintos cerrados y al aire libre...
Miguel Mart¨ªn, actual director del festival -ha estado en el Jazzaldia 25 a?os en dos etapas-, es uno de los grandes art¨ªfices de este ¨¦xito, pero ayer quiso ceder el protagonismo a otros durante el acto de homenaje. "Hace cuarenta a?os el jazz no estaba nada arraigado en la ciudad", destac¨®. Pero la "valent¨ªa" de los inicios y la "dedicaci¨®n y la "ilusi¨®n" posteriores " han dado sus frutos". "Yo he aprendido de ellos", reconoci¨®. "Recuerdo mis primeras jornadas. Todo era aprender, de jazz y de muchas m¨¢s cosas".
En estos a?os, el festival ha recibido a figuras como Ella Fitzgerald, Oscar Peterson, Dizzy Gillespie, Herbie Hancock, Charles Mingus, Chick Corea, B.B. King, Miles Davis, Ray Charles, Van Morrison, Keith Jarret, Diana Krall, James Brown...., ha explorado las posiblidades de grandes recintos como el vel¨®dromo de Anoeta para volver a la Trinidad y ha hecho incluso un camino de ida y vuelta a manos p¨²blicas. Porque entre 1989 y 1991 el Ayuntamiento encarg¨® la organizaci¨®n del festival a la promotora Tibur¨®n Concerts, que dio cabida a estilos musicales que no ten¨ªan relaci¨®n con el jazz, provocando una pol¨¦mica.
"En 1992 nos toc¨® encargarle a Miguel Mart¨ªn la tarea m¨¢s dif¨ªcil", subray¨® el alcalde donostiarra, Od¨®n Elorza, gran aficionado al jazz. "La de recuperar el esp¨ªritu y la identidad del festival, ese que no teme a la lluvia, ese que no hay que encerrar en el vel¨®dromo o en un polideportivo, ese que se la juega todos los d¨ªas, que est¨¢ en la calle, que hace espect¨¢culos de nivel A...". Ese que ha sido y es, como record¨® Gurruchaga, l¨ªder de la Orquesta Mondrag¨®n, "una estupenda academia" para abrir los ojos a todos los que quieren ser m¨²sicos. ?l, que colabor¨® con el festival en los 70, recibi¨® una placa de agradecimiento, como todos los homenajeados, y pudo disfrutar del concierto que ofreci¨® el pianista Kenny Barron al aire libre, entre las esculturas de Chillida.
En la recta final
El Festival Internacional de Jazz donostiarra afronta ya la recta final de su 40 edici¨®n con un programa cargado de grandes nombres. Kenny Barron, que ayer hizo las delicias de varios cientos de personas en el Chillida-Leku, actuar¨¢ hoy de nuevo en el auditorio Kursaal (18.30). Pero esta vez, en una formaci¨®n de d¨²o junto a Mulgrew Miller.
Horas despu¨¦s, en la plaza de la Trinidad (21.00), la Dave Holland Big Band y la Mingus Big Band, agrupaci¨®n que dirige Sue, la mujer del fallecido Charles Mingus, se subir¨¢n al escenario de la plaza de la Trinidad. Para entonces Zbigniew Lewandowski (19.00) y Perico Sambeat (19.00) habr¨¢n actuado ya en las terrazas del Kursaal. Les ir¨¢n sucediendo a lo largo de la velada en estos espacios The Urban Art Quartet&Natalia Calder¨®n (21.00); The heckler (23.00); Trio Exklusiv (21.00); Djavan (00.30) y Hampshire (23.00).
Para ma?ana, su jornada de clausura, el Festival de Jazz se reserva tambi¨¦n nombres de gran tir¨®n. Van Morrison, el Le¨®n de Belfast, un viejo conocido del certamen, ofrecer¨¢ dos conciertos en el auditorio Kursaal (16.30 y 18.30).
En la plaza de la Trinidad, el Cuarteto del cubano Bebo Vald¨¦s (21.00) har¨¢ de telonero de lujo de Gilberto Gil, figura indiscutible de la m¨²sica brasile?a, que compagina su carrera art¨ªstica con la de ministro de Cultura en el Gobierno del presidente Lula Da Silva.
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