El astronauta y los internautas

Un verdadero choque de generaciones se produjo ayer en Valencia. Por un lado, Neil Armstrong -el primer ser humano que pis¨® la Luna en 1969, a bordo de una nave, el Apolo 11-, equipado con un peque?o ordenador sin pantalla. Por otro lado, los participantes en la Campus Party, chicos y chicas de menos de 25 a?os que navegan por Internet a una velocidad de 1,8 gigabytes.

Los campuseros, que no hab¨ªan nacido cuando Armstrong pronunci¨® el 21 de julio de 1969 su conocida frase para celebrar la llegada a la Luna, "un peque?o paso para el hombre y un gran salto para la humanidad", se mostraron entusiasmados con la posibilidad de charlar con uno de los mitos del siglo XX. Debido a la escasez de plazas en la conferencia, que se desarroll¨® en el Museo de las Ciencias Pr¨ªncipe Felipe, la organizaci¨®n tuvo que convocar un concurso para seleccionar a los que realizasen las preguntas m¨¢s interesantes

El primer hombre que pis¨® la Luna aboga porque se reanuden los vuelos tripulados

Armstrong, tras finalizar su conferencia sobre Vuelos espaciales y necesidades energ¨¦ticas de la Tierra, no dud¨® en responder a todas las preguntas. Muchas de las que se plantearon a trav¨¦s de videoconferencia desde la Feria de Valencia, donde se desarrolla la Campus Party, que re¨²ne a 5.500 internautas, se interesaron m¨¢s por la experiencia del ser humano como astronauta que en el contenido de la conferencia.

Una de ellas le pidi¨® que rememorara sus sensaciones cuando hace 36 a?os la nave que pilotaba orbit¨® por la parte no visible de la Luna. "?Lo mejor de la cara oculta de la Luna? Disfrutar del silencio", respondi¨® el astronauta en tono c¨®mico al relatar c¨®mo se interrump¨ªa la comunicaci¨®n con la base en la Tierra cuando estaban al otro lado del sat¨¦lite y el espacio lo ocupaba todo.

El ex astronauta se mostr¨® durante el intercambio de preguntas y respuestas como un hombre cercano y afable. A partir de otra de las preguntas, explic¨® c¨®mo vio la Tierra desde la Luna. "Desde el Mar de la Tranquilidad [la zona donde se produjo el alunizaje], la Tierra era un colgante turquesa sobre un cielo de terciopelo negro".

Al hablar de la posibilidad de que el hombre llegue a Marte, Armstrong se mostr¨® entusiasta. "Me encantar¨ªa viajar a Marte, y as¨ª conocer a la gente que vive all¨ª", brome¨®.

Durante la charla, Armstrong abog¨® por la reanudaci¨®n de los viajes tripulados a la Luna, "porque lo desconocido todav¨ªa es mucho m¨¢s que lo conocido".

Adem¨¢s, record¨® que "la Luna tiene la energ¨ªa necesaria para las necesidades de la Tierra", en referencia al gas helio 3. Algunos cient¨ªficos sostienen que ese gas puede solucionar la escasez de recursos energ¨¦ticos terrestres durante los pr¨®ximos siglos. "Es seguro y no contaminante", a?adi¨®. Una de las respuestas que m¨¢s sorprendi¨® a los participantes fue la que rest¨® importancia al hecho de haber sido el primer hombre que pis¨® la Luna. "Yo era el piloto, a m¨ª me importaba m¨¢s el alunizaje que pasearme por la Luna", explic¨®. Sobre el transbordador Discovery, lanzado con ¨¦xito ayer, Armstrong coment¨®: "Las misiones tripuladas son siempre peligrosas, pero aportan m¨¢s y mejores datos que las sondas no tripuladas".

Antes de la conferencia, Neil Armstrong disfrut¨® de una visita al Museo de las Ciencias Pr¨ªncipe Felipe, donde firm¨® aut¨®grafos y se hizo fotograf¨ªas con los muchos curiosos que se le acercaban. Acompa?ado por el presidente de la Generalitat valenciana, Francisco Camps, descubri¨® una placa conmemorativa de la visita al museo.

Los afortunados campuseros que pudieron asistir a la conferencia disfrutaron de las lecciones y el buen humor del hombre de la Luna, aquel se?or del que sus padres tanto les hab¨ªan hablado.