Excavar por diversi¨®n

Treinta j¨®venes de entre 18 y 26 a?os han optado por pasar sus vacaciones lejos de playas y fiestas. Estos chicos han sido los responsables de la mejora de parte de la zona arqueol¨®gica de la ciudad romana de It¨¢lica en Santiponce (Sevilla). Hoy regresan a casa despu¨¦s de dos semanas de aprendizaje y diversi¨®n.

Estos j¨®venes voluntarios han colaborado desde el 18 de julio en un campo de trabajo que se ha dedicado a la limpieza superficial de la zona sur del anfiteatro. El objetivo es el hallazgo de los l¨ªmites de la construcci¨®n.

?ste es el quinto a?o en el que It¨¢lica recibe a un grupo de voluntarios. Hace un a?o, se excav¨® la parte lateral de la tercera grada. En esta quincena, se ha trabajado para terminar lo que quedaba desde el verano pasado y se han realizado tareas nuevas como el remate de los sillares de la parte interior del anfiteatro. "Entre visitas y eventos, el periodo se reduce a 10 d¨ªas de trabajo real", aclara Juan Manuel Cano, uno de los dos arque¨®logos que dirige el grupo.

El campamento ha acogido a espa?oles y a extranjeros de muchas nacionalidades: turca, italiana, francesa, serbia, estadounidense y alemana. "He venido a Sevilla porque quer¨ªa conocer esta ciudad", dice en ingl¨¦s Milica, una chica serbia de 19 a?os.

Antonio Pelicano, uno de los monitores, opina que entre las razones por las que vienen los j¨®venes prima una: quieren conocer nuevas culturas. "Viene gente interesada por la Historia del Arte pero, por lo general, hay muchas ganas de encontrarse con gente diferente". Tienen motivos distintos, pero todos los expresan en la misma lengua. "Aqu¨ª se habla siempre en ingl¨¦s", explica Pelicano.

La mayor¨ªa de los j¨®venes que participan en estos campos de trabajo no tiene nociones espec¨ªficas de arqueolog¨ªa. Una de las chicas que ha colaborado en It¨¢lica es francesa y ha estudiado Matem¨¢ticas. Para gente como ella, en estos campamentos se organizan talleres de tratamiento de cer¨¢mica, reconocimiento de piezas o preparaci¨®n de herramientas de restauraci¨®n. Otros participantes s¨ª tienen conocimientos sobre Historia Antigua y pueden sacar otro rendimiento al trabajo.

Marta es una estudiante de Arqueolog¨ªa que acaba de terminar su primer curso. "No s¨¦ si en el futuro podr¨¦ hacer lo que me gusta. Por ahora, es interesante trabajar sobre lo que he estudiado durante el a?o", afirma.

Los voluntarios suelen quedar satisfechos. "Lo hemos pasado muy bien, a pesar de la temperatura", declara una chica de Pamplona con la aprobaci¨®n de sus compa?eras. El problema principal al que se enfrentan es el calor. Las lipotimias son comunes, sobre todo, entre los chicos del norte. "Siempre tenemos preparada agua fr¨ªa por si ocurre algo. Si se desmayan, los atendemos en la sombra y los llevamos al m¨¦dico", explica el monitor.

Muchos de estos j¨®venes repiten. "Cada a?o tenemos a gente de veranos anteriores. ?ste ha sido el ¨²nico en el que son todos nuevos", confiesa Pel¨ªcano. Adem¨¢s de las labores de restauraci¨®n, por las tardes se han realizado talleres de sexualidad, teatro joven, revelado de fotos y percusi¨®n, deportes y actividades de animaci¨®n como din¨¢micas de grupo, salidas nocturnas, cine, fiestas de disfraces y excursiones.

Lo mejor de estos campos son los resultados. "Hay zonas que antes no se pod¨ªan visitar y que ahora, gracias a estas labores, est¨¢n abiertas al p¨²blico", afirma orgulloso Juan Manuel Cano.