"Una mezcla de los caracteres vasco y catal¨¢n ser¨ªa ideal en pol¨ªtica"
Gorka Kn?rr (Tarragona, 1950) ha arrinconado durante a?os la m¨²sica para dedicarse de lleno a la pol¨ªtica, pero el ex secretario general de Eusko Alkartasuna, ex eurodiputado y ex miembro de la Mesa del Parlamento vasco, es ahora un simple militante de base con ganas de cantar. En oto?o publicar¨¢ su octavo disco, Ponts de l?anima-Arimaren Zubiak, el primero en el que canta en catal¨¢n desde el inicio de su carrera musical en 1971.
Pregunta. ?C¨®mo ha combinado m¨²sica y pol¨ªtica?
Respuesta. A veces la m¨²sica ha tenido una presencia de primera fila, otras de segunda, e incluso la guitarra ha estado en un rinc¨®n. Ahora tengo el esp¨ªritu m¨¢s libre y puedo dedicar m¨¢s tiempo a m¨ª mismo. Me encuentro otra vez motivado para cantar, para actuar, para componer.
"Hay determinadas situaciones de mi vida pol¨ªtica de las que he pasado p¨¢gina y, por lo tanto, me siento m¨¢s libre"
"Ahora lo que me obsesiona es el proceso de paz. Con todas las dificultades, un tiempo nuevo est¨¢ abierto"
"Cantar en catal¨¢n es una satisfacci¨®n personal y una deuda con mi tierra. Es un disco que le deb¨ªa a mi madre"
P. Sin responsabilidad en cargos p¨²blicos vuelve a ser tiempo para la m¨²sica
R. Siempre hay un tiempo para la m¨²sica. Aunque viva la pol¨ªtica a veces de manera visceral, pero sobre todo existencial, hay determinadas situaciones de mi vida pol¨ªtica de las que he pasado p¨¢gina y, por lo tanto, me siento m¨¢s libre.
P. Por vez primera ha grabado en catal¨¢n.
R. Es un disco que me deb¨ªa a m¨ª mismo y a mi madre, catalana, de quien he recibido la herencia cultural de Catalu?a. He sentido que de la misma manera que he pulido mi catal¨¢n durante a?os y que me he acercado a la cultura y a la pol¨ªtica catalana, no era l¨®gico que no me atreviera a cantar en catal¨¢n. Es una satisfacci¨®n personal y una deuda con mi tierra. El disco tiene seis canciones en catal¨¢n, cinco en euskera y un poema Mohamed Sidati, el representante para Europa del Frente Polisario, que recito en castellano. Desde mi etapa de europarlamentario he estado muy involucrado en el tema saharaui y he querido prestar un granito de arena en este momento tan complicado.
P. Algunas de las canciones que ha versionado tienen cerca de 30 a?os
R. S¨ª, pero son canciones de plena vigencia como D? un temps, d? un pa¨ªs. He combinado la canci¨®n comprometida de Raimon con Suzanne, de Cohen, o Palabras de amor, de Serrat. He balanceado mi propia m¨²sica con esa poes¨ªa fant¨¢stica y surrealista, que nos enfrenta con la realidad y nos hace encontrar un equilibrio en el caos que vivimos.
P. ?Encuentra en la cultura catalana algo que echa de menos en el Pa¨ªs Vasco?
R. En Catalu?a me encuentro conmigo mismo. Durante muchos a?os me dec¨ªan aqu¨ª "eres el Llu¨ªs Llach de la canci¨®n en euskera", con esa tendencia que ten¨ªa a la canci¨®n melanc¨®lica. Hab¨ªa cantado en alguna ocasi¨®n en catal¨¢n, pero no hab¨ªa grabado. Tengo el sentimiento de ser alguien dividido en dos, es mi parte Borr¨¢s . Afortunadamente, he tenido muchas relaciones familiares con Catalu?a, que se han revivido con la pol¨ªtica.
P. ?Y c¨®mo ve el momento pol¨ªtico en Catalu?a?
R. Ah, yo soy militante de Ezquerra [Republicana de Catalunya (ERC)]. No es que lo diga yo; lo han dicho sus m¨¢ximos dirigentes, que me consideran uno m¨¢s de la casa. Yo comparto sus anhelos. No se est¨¢ valorando bien la sabidur¨ªa con la que se est¨¢n comportando. Pero por encima de las dificultades, yo creo que los partidos catalanes encontrar¨¢n un acuerdo. El gran problema que tienen es que el partido socialista no est¨¢ a la altura de los acontecimientos. Es m¨¢s un problema interno de los socialistas que de los dem¨¢s.
P. ?C¨®mo es esa sabidur¨ªa?
R. Aqu¨ª para lo malo y para lo bueno somos m¨¢s directos y viscerales. Una combinaci¨®n de los caracteres de vascos y catalanes ser¨ªa una forma ideal de hacer pol¨ªtica. A m¨ª me dec¨ªan en el partido, cuando intentaba acercar posiciones, que hac¨ªamos asambleas a la catalana. A los vascos nos falta tomarnos las cosas con un poco m¨¢s de calma. Hay cosas de algunos catalanes que no me gustan, como la ambig¨¹edad de la etapa pujolista. Entre la ambig¨¹edad y el griter¨ªo, el t¨¦rmino medio ser¨ªa lo ideal.
P. ?Y su situaci¨®n personal
[est¨¢ imputado por no haber disuelto el grupo heredero de Batasuna en el Parlamento vasco]?
R. Estoy esperanzado. Me gener¨® much¨ªsima tensi¨®n en un momento dado. La gente tiende a olvidar que viv¨ªamos en el aznarato y val¨ªa todo, con el aplauso de algunos que ahora, felizmente, est¨¢n enfrentados al PP. Fue una ¨¦poca muy dura personalmente. Cuando eres el blanco de tanta cr¨ªtica injusta, cuando te sientes poco acompa?ado ...
P. ?Por su propio partido?
R. S¨ª, es lo m¨¢s doloroso, pero es p¨¢gina pasada. Tambi¨¦n me parece doloroso que gente que deb¨ªa haberse rebelado democr¨¢ticamente no lo hiciera. Ahora lo que me obsesiona es el proceso de paz. Con todas las dificultades, un tiempo nuevo est¨¢ abierto.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.