"No vengo a dar una lecci¨®n a los espa?oles"

De una peque?a trama de Luna de Avellaneda, Juan Jos¨¦ Campanella (1959, Buenos Aires, Argentina) ha sacado una serie de 13 cap¨ªtulos. En Vientos de agua se cruzan dos narraciones: la de Andr¨¦s (interpretado por Ernesto Alterio y su padre, H¨¦ctor), que en los a?os treinta deja la mina en Asturias para empezar una nueva vida en Argentina, y la de su hijo, Ernesto (Eduardo Blanco), que busca fortuna en Espa?a tras la crisis del corralito en 2001. Con estas historias de emigrantes, el director de El hijo de la novia no viene "a dar una lecci¨®n" a los espa?oles de ahora, a los que reciben a los de afuera. S¨®lo reflexiona sobre lo que es "ser el extra?o". Vientos de agua es la "aventura m¨¢s ambiciosa" que Tele 5 emprende en el terreno de la ficci¨®n, seg¨²n Alberto Carullo, director de antena de la cadena. Y adem¨¢s de los Alterio, en ella se han embarcado actores como Silvia Abascal, B¨¢rbara Goenaga, Rub¨¦n Ochandiano, Joan Dalmau o Marta Etura. Y realizadores como Bruno Estagnaro (Pizza, birra, faso) o Eduardo Mignogna (La fuga). Terminada la primera fase del rodaje en escenarios naturales de Asturias, el equipo contin¨²a este verano las grabaciones en Buenos Aires.

Pregunta. Dice que pretende abordar la emigraci¨®n "en toda su complejidad".

Respuesta. No vengo a dar una lecci¨®n a los espa?oles. S¨®lo quiero recordar lo que es ser el extra?o. Viv¨ª mucho tiempo en Nueva York, donde nadie es totalmente del lugar. S¨¦ lo que es no pertenecer emocionalmente a un lugar.

P. Y para este rodaje regresa a Asturias, la tierra de su abuelo. ?Ha descubierto algo sobre su pasado?

R. A mi abuelo siempre lo vi como un dandi porte?o que iba a jugar al billar y a las carreras de caballos. Ahora, saber que daba de pastar a las vacas, que se march¨® por hambre, que lleg¨® a Buenos Aires calzando madre?as... Estoy conoci¨¦ndole de nuevo.

P. ?Unas emigraciones se reconocen en otras?

R. Aqu¨¦llas implicaban la decisi¨®n heroica de cambiar tu vida y no ver nunca m¨¢s a los tuyos. Realmente se volv¨ªa a nacer. Ahora, en nuestros pa¨ªses, la gente emigra para mantener un nivel de clase media.

P. Algunos comparan el montaje de Vientos de agua con el de la segunda parte de El padrino.

R. Quiz¨¢s lo recuerde por los saltos del presente al pasado. Pero aqu¨ª el tratamiento es distinto, hay un constante ir y venir entre los dos tiempos, que llegan a estar intercalados en una misma escena. Y para alguien que ama el cine compararse con El padrino es de una soberbia tremenda, y no lo voy a hacer.

P. Usted ha trabajado para grandes series de Estados Unidos, como Ley y orden o El guardi¨¢n. ?Pesa mucho el volumen del presupuesto?

R. Objetivamente esto es mucho m¨¢s grande. Ley y orden es una serie policiaca, contempor¨¢nea, donde no se manejan masas de extras ni elementos hist¨®ricos... Aqu¨ª no somos moco de pavo. Adem¨¢s, las t¨¦cnicas digitales de producci¨®n han democratizado el cine.

P. Con t¨ªtulos como El hijo de la novia o El mismo amor, la misma lluvia en su filmograf¨ªa, ?qu¨¦ posibilidades tiene de resultar melanc¨®lico el tono de Vientos de agua?

R. Soy un tipo melanc¨®lico, m¨¢s que nost¨¢lgico, y ese condimento lo va a tener.

Aunque cada cap¨ªtulo toca cuerdas muy distintas. Tambi¨¦n tiene momentos de mucho humor, creo.