Multitudes en las alturas

Bebo Vald¨¦s no da un paso sin que alguien se acerque para fotografiarse con ¨¦l o pedirle un aut¨®grafo. Desde parejas hasta familias de veraneantes. Los atiende con una sonrisa. A Carlinhos Brown lo conoce todo el personal del hotel donde se aloja. Es la cuarta vez que viene. La primera, en 1997, cuando nadie hab¨ªa o¨ªdo hablar de ¨¦l. De madrugada estaba en la recepci¨®n, con unos amigos y los que quisieron sumarse, tocando la guitarra y canturreando temas de su pr¨®ximo disco.

Las entradas se hab¨ªan agotado d¨ªas antes y un rosario de veh¨ªculos se dibujaba alrededor del pantano de Lanuza. A las diez de la noche, Carlinhos Brown se acerc¨® al borde del escenario para lanzar al agua unos p¨¦talos. Y arranc¨® como una estampida de b¨²falos alborotando a los 5.000 presentes -m¨¢s cientos que se desperdigaban por la ladera fuera del recinto-. Lleva cinco percusionistas apabullantes, cinco j¨®venes del Candeal, juntos desde chicos, que prefirieron los tambores a las pistolas. Brown es todo un fen¨®meno social en Espa?a: en poco mas de dos meses, 45 conciertos, cinco carnavales y hasta un preg¨®n. Provoc¨® que miles de gargantas corearan el nombre de Bebo. S¨®lo fueron dos canciones. Con esa forma de tocar el piano que evoca la memoria de un tiempo que ya pas¨®. Carlinhos se qued¨® prendado de una nota inesperada y, con devoci¨®n infantil, le pidi¨® al maestro Vald¨¦s o¨ªrla de nuevo. Momentos irrepetibles.

El d¨ªa anterior se present¨® Madredeus. El fr¨ªo se erigi¨® en una dificultad para un grupo cuya m¨²sica es de una precisi¨®n exquisita y para prestarle atenci¨®n sentado a la intemperie. La cantante -nunca se hab¨ªa movido tanto- se frotaba las manos heladas. Ser¨¢ verano, pero al borde del pantano la temperatura no superaba los 13 grados. El trabajo actual del quinteto lisboeta se plantea como un tributo a la guitarra cl¨¢sica. Una obra de delicada orfebrer¨ªa siempre con la voz soberana de Teresa Salgueiro. Pirineos Sur ha ofrecido adem¨¢s conciertos como el coproducido con La Mar de M¨²sicas del Zawinul Syndicate y la Armenian Navy Band. La XIV edici¨®n de este festival de m¨²sicas populares, que ha superado los 45.000 espectadores, ha tenido como eje central, bajo el t¨ªtulo de En las fronteras de Am¨¦rica del Norte, una muestra de grupos estadounidenses como Los Lobos o Calexico y a cantantes como la canadiense Lhasa o la mexicana Astrid Hadad. En el verano de 2006, cumplir¨¢ 15 a?os. El maravilloso reto contin¨²a.