Londres planea crear tribunales secretos para los sospechosos de terrorismo

El Gobierno brit¨¢nico estudia la creaci¨®n de tribunales antiterroristas secretos con poder para determinar cu¨¢nto tiempo debe permanecer en prisi¨®n un sospechoso sin haber sido acusado de cargo alguno ni haber comparecido ante la justicia. Tales jueces estar¨ªan facultados para estudiar el contenido de cintas con escuchas telef¨®nicas. En el proyecto del Gobierno se prev¨¦ adem¨¢s la figura de unos "abogados defensores especiales" que podr¨ªan acceder a las pruebas, pero a condici¨®n de que no se las desvelen a sus defendidos.

El proyecto fue adelantado ayer por el diario The Guardian varios d¨ªas despu¨¦s de que el primer ministro, Tony Blair, hiciese p¨²blico el paquete de 12 medidas contra el terrorismo que pretende consultar en los pr¨®ximos meses con el resto de partidos pol¨ªticos.

Fuentes del Ministerio del Interior brit¨¢nico, seg¨²n el peri¨®dico, confirmaron que el Ejecutivo se plantea nombrar jueces especiales para casos de terrorismo, con la misi¨®n de conducir un proceso previo, al estilo de los grandes jurados de EE UU, con el objetivo de determinar si existen suficientes pruebas y evidencias para encausar al sospechoso. Estos magistrados tendr¨ªan acceso a "pruebas sensibles" aportadas por los servicios de espionaje, incluidas las cintas con escuchas telef¨®nicas de l¨ªneas interceptadas, algo que los tribunales ordinarios no admiten como prueba en Reino Unido.

El plan, seg¨²n el peri¨®dico brit¨¢nico, tambi¨¦n prev¨¦ la designaci¨®n de abogados especiales como representantes legales de los detenidos por presuntos actos de terrorismo. Estos letrados tendr¨ªan acceso a las "pruebas sensibles", a condici¨®n de no poder desvelar su contenido. El propio diario criticaba ayer en su an¨¢lisis editorial la vaguedad y falta de concreci¨®n en las propuestas de Blair. "?sta no es la forma de lograr el consenso en un tema tan importante", se?alaba el rotativo.

Las cr¨ªticas han llegado desde los propios esca?os laboristas. John Denham, miembro del comit¨¦ de Exteriores, declar¨® que algunas de las propuestas presentadas en la ¨²ltima semana parecen "a medio cocinar" y concebidas bajo presi¨®n.

En relaci¨®n a los atentados del 7 de julio, en los que murieron 56 personas, a¨²n no se ha producido ni una sola detenci¨®n. Sin embargo, Scotland Yard ya ha detenido a 39 personas vinculadas con los atentados fallidos del 21 de julio. De ellas, 15 permanecen en prisi¨®n y 14 fueron liberadas antes de que transcurriera el plazo m¨¢ximo de dos semanas.

Los responsables policiales brit¨¢nicos llevan mucho tiempo solicitando al Gobierno que prorrogue ese periodo m¨¢ximo de detenci¨®n de 14 d¨ªas hasta los tres meses. De haber estado en funcionamiento los tribunales especiales cuya creaci¨®n sopesa ahora el Gobierno, algunas de las 14 personas liberadas por Scotland Yard seguir¨ªan previsiblemente en prisi¨®n.

Roger Smith, director de la organizaci¨®n Justicia, formada por prestigiosos juristas, declar¨® ayer que entra?a un enorme peligro el uso de las "detenciones preventivas" y la pr¨¢ctica de mantener a una persona en prisi¨®n sin desvelar de qu¨¦ se le acusa. "?C¨®mo puede una persona defenderse de las alegaciones presentadas contra ¨¦l si no conoce de qu¨¦ alegaciones se trata?", se pregunta Smith.

En los ¨²ltimos d¨ªas tambi¨¦n se ha recibido con incredulidad, tanto en los diarios progresistas como en los conservadores, la idea filtrada por el fiscal general de Reino Unido, Peter Goldsmith, de que estudia acusar a tres predicadores radicales musulmanes de delitos de traici¨®n. La legislaci¨®n en la que se ampara Goldsmith se aprob¨® en el a?o 1351, poco despu¨¦s del inicio de la Guerra de los Cien A?os contra Francia. La ¨²ltima vez que se aplic¨® fue en 1946 y acarre¨® una condena a muerte para William Joyce, acusado de colaborar con los nazis.

Hasta los m¨¢s incondicionales defensores de las medidas propuestas por Blair, como el diario The Daily Telegraph, sostienen que llamar traidores a los terroristas no es la soluci¨®n. Tanto en la izquierda como en la derecha se critica a Blair por buscar titulares populistas que se avienen a la perfecci¨®n con el apetito que la sociedad brit¨¢nica parece tener de soluciones contundentes contra el terrorismo.