La LOE y eso
La noticia: "La ministra de Educaci¨®n presenta la LOE, el nuevo proyecto de Ley de Reforma Educativa".
La fecha: mi¨¦rcoles 30 de marzo de 2005.
La protagonista del d¨ªa ha sido la ministra de Educaci¨®n, que se llama Mar¨ªa Jes¨²s San Segundo. Por cierto, ?c¨®mo se llamar¨¢ su padre? ?San Minuto? Perdonen el chiste f¨¢cil. Pero es que San Segundo es un santo m¨¢s curioso. Debe ser el patr¨®n de los precoces: "T¨®mate una viagra y r¨¦zale tres padres nuestros a San Segundo".
Pues la ministra de Educaci¨®n ha presentado el nuevo proyecto de Ley de Reforma Educativa. Esta ley se llama LOE, que sustituye a la LOGSE y suprime a la LOCE. ?Ha quedado claro? Cuando la anunciaba la ministra San Segundo, parec¨ªa Ozores: "La LOE no es la LOCE, es forforcias... ?No, hija, no!".
Si ves a un t¨ªo con la carpeta forrada de fotos de Imperio Argentina en ropa interior, es un repetidor
Lo que yo no entiendo es por qu¨¦ tantos cambios. Antes hab¨ªa la EGB, y luego BUP. Y el que no val¨ªa, p¨¢ FP. Que, al final, son los listos, porque todos son carpinteros, ebanistas, fontaneros... y se est¨¢n forrando. "Ponme el parqu¨¦". "?El parqu¨¦?". Hay un colectivo de parquetistas que han venido al programa en Rolls-Royce, ?eh? Y, en cambio, los otros: "?Qu¨¦ sabes hacer?". "Nada, pero tengo el COU". "Pues te COUges la escoba y me barres esto un poquito".
Desde que empez¨® la ESO, no paran de cambiar cosas. Yo creo que es por el nombre. Ponerle de nombre "ESO" es que ya no le tienes cari?o. Tendr¨ªan que cambiarlo y ponerle un nombre m¨¢s sencillo, no s¨¦: COLE. "?Qu¨¦ estudias?". "Cuarto de COLE". "?Y ESO?". "Eso es mi hermana y trabaja en una mercer¨ªa".
Una de las medidas pol¨¦micas es que podr¨¢s pasar curso incluso con tres asignaturas suspendidas. ?Esto qu¨¦ es, ministra? Est¨¢ claro que se quieren cargar la entra?able figura del repetidor. Joder, en Espa?a un respeto al repetidor. No lo entiendo. Si una clase sin repetidor es como Nicki Lauda. Le falta algo. A la clase le falta el l¨ªder natural. El que pone las chinchetas en la silla del profe, el que te invita al primer cigarro...
El repetidor de mi clase ya estaba tan pasado, que a la hora del patio, jugaba al domin¨® y en vez de Fortuna nos pasaba calique?os. Estaba casado y ten¨ªa tres hijos: "Yo vengo para pasar el rato", dec¨ªa. Un t¨ªo mayor. Un t¨ªo sospechoso tambi¨¦n, all¨ª entre tantos ni?os. "Se?or Guti¨¦rrez, salga de la clase".
Los repetidores de la clase siempre son muy f¨¢ciles de reconocer. Si ves un t¨ªo con la carpeta forrada de fotos de Imperio Argentina en ropa interior, es un repetidor. O si, cuando pasan lista en clase de p¨¢rvulos, responde como Carmen de Mairena -"presente, chato"-, es un repetidor.
Y normalmente son repetidores orgullosos de serlo. Como dice mi amigo El Sevilla: "Yo repet¨ª cuatro veces BUP porque el curso me gustaba mucho".
Lo peor de los repetidores era cuando hab¨ªa clase de gimnasia y el profesor dec¨ªa: "Este ejercicio es por parejas". Y todo el mundo se escaqueaba alej¨¢ndose del repetidor. ?Por qu¨¦? Porque estaba m¨¢s desarrollado. "Ten¨¦is que hacer la carretilla". Y siempre me tocaba a m¨ª coger las piernas peludas de un t¨ªo de dos metros diez. No sab¨ªas si estabas corriendo con alumnos o bailando con lobos.
Con esta reforma, el repetidor va a llegar al final de c¨®mo se llame con 20 asignaturas. No s¨¦, igual tiene que volver a la casilla de salida. (No me he mirado la ley porque no he tenido tiempo).
Al final, los repetidores ser¨¢n una especie en extinci¨®n como los linces ib¨¦ricos: "Ha nacido en el Coto de Do?ana el primer repetidor en cautividad. Ha pesado tres kilos, y le han quedado las natus y las socis para septiembre. Los cuidadores ya le han dado su primer cuaderno Santillana".
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