'Mogambo' y el color caqui
John Ford dirigi¨® Mogambo en 1953. Sus protagonistas eran Ava Gardner, Grace Kelly y Clark Gable. Los tres est¨¢n muertos. De Gardner se sabe que sus ¨²ltimas palabras fueron "Estoy muy cansada". De Kelly, que sufri¨® un accidente que dej¨® hu¨¦rfano a todo un principado. De Gable, que se cas¨® cinco veces sin que, aunque parezca incre¨ªble, nadie le detuviera por imprudencia temeraria. La pel¨ªcula se rod¨® en Kenia y Uganda y narra las peripecias de un grupo formado por un cazador profesional, una ex corista, un antrop¨®logo fascinado por los primates y su esposa, indecisa entre la estabilidad convencional del matrimonio y el salvaje hechizo del adulterio. Gable organiza el safari para que el cient¨ªfico pueda ver de cerca a los gorilas. Medio siglo m¨¢s tarde, esta industria no s¨®lo sigue vigente, sino que se ha multiplicado. Hay m¨¢s restricciones a la hora de apretar el gatillo, eso s¨ª, pero el tiro a la fiera sigue potenciando eso que, con un t¨¦rmino elitista, denonimanos turismo de calidad.
Gable y Gardner parecen divertirse, demostrando hasta qu¨¦ punto pod¨ªan llegar a ser seductores y granujas
Marcos Ord¨®?ez, que en su libro Ava Gardner en Espa?a demuestra saber m¨¢s de Ava Gardner que la propia actriz, escribe: "La frescura que exhala Mogambo no se corresponde con los tormentos de su rodaje". Por lo visto, las peleas fueron constantes y la elecci¨®n de un escenario natural supuso trabajar bajo temperaturas infernales. En la pantalla, sin embargo, el calor apenas se nota. Pese al tiempo transcurrido desde su estreno, la pel¨ªcula conserva su frescura, lo cual confirma que la ficci¨®n puede ser la parte m¨¢s perdurable de la realidad. En las escenas en las que coinciden, Gable y Gardner parecen divertirse demostrando hasta qu¨¦ punto pod¨ªan llegar a ser seductores y granujas (dicen que ¨¦l empez¨® en el cine cuando fue a reparar el tel¨¦fono de una actriz mucho mayor que ¨¦l y se qued¨® a dormir en busca de otras aver¨ªas). Sus di¨¢logos resisten gracias a una estimulante mezcla de vitalidad y escepticismo. Gable le pregunta a Gardner: "?Le apetece una copa? Lo siento, no hay hielo". Y ella responde: "Me alegro. El hielo, a m¨ª, se me sube a la cabeza".
De esta sana relaci¨®n entre ambos actores, el maestro Guillermo Cabrera Infante escribi¨® en su libro Cine o sardina: "Ava fue casta en el cast de Mogambo. Mientras Grace Kelly (...) lleg¨® a seducir a Gable al bronco ruido feroz de los gorilas, que como se sabe est¨¢n en el camino de toda extinci¨®n por el pobre apetito sexual de las gorilas". Menos en un escena, Gable luce unos interesantes modelitos a lo Miguel de la Cuadra Salcedo. La empresa Coronel Tapioca deber¨ªa utilizar esa imagen para promocionar sus productos. Sombreros, pantalones largos y cortos, todo de un perfecto color caqui. Cuando Kelly aparece, tambi¨¦n lleva un elegante conjunto caqui, demostrando que la moda aventurera es bisexual hasta que no se demuestre lo contrario y que incluso la puede llevar una futura princesa tr¨¢gicamente fallecida. Del color caqui se sabe que antes de ser un color era una tela que pod¨ªa ser amarillo de ocre o verde gris, que se usaba para confeccionar uniformes militares en la India. Posteriormente, la cosa se qued¨® en caqui, que es el color del caqui fet¨¦n o caqui caqui, palabra de origen urdu que significa color de polvo. Del polvo no hace falta que les cuente nada: en Mogambo lo encontrar¨¢n en part¨ªculas suspendidas y en sentido figurado, eso s¨ª, m¨¢s el¨ªptico que expl¨ªcito. Al terminar la pel¨ªcula, tambi¨¦n se dar¨¢n cuenta de que lo de que polvo somos y en polvo nos convertimos vale para todo menos para las obras maestras.
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