Milicias chi¨ªes y kurdas controlan gran parte del pa¨ªs

Milicias chi¨ªes y kurdas est¨¢n llevando a cabo una ola de secuestros, asesinatos y otros actos de intimidaci¨®n, en muchos casos como miembros de las fuerzas de seguridad iraqu¨ªes. Estos grupos armados han consolidado su control sobre sus territorios en el norte y sur de Irak y han profundizado la divisi¨®n del pa¨ªs a trav¨¦s de fronteras ¨¦tnicas y sectarias, de acuerdo con testimonios de l¨ªderes pol¨ªticos, familias de las v¨ªctimas, activistas de derechos humanos y funcionarios iraqu¨ªes.

Mientras los pol¨ªticos iraqu¨ªes discuten la nueva Constituci¨®n del pa¨ªs, las milicias y los partidos chi¨ªes y kurdos que las controlan han creado sus propias instituciones, que no responden ante ning¨²n Gobierno electo. En las dos principales ciudades del pa¨ªs despu¨¦s de Bagdad, Basora, en el sur, de mayor¨ªa chi¨ª, y Mosul, en el norte, controlada por los kurdos, los habitantes viven atemorizados en un ambiente de terror impuesto por las milicias. Muchos aseguran que el clima les recuerda los tiempos de Sadam Husein.

Los partidos y sus brazos armados act¨²an unas veces de forma independiente y otras dentro de la polic¨ªa o del Ej¨¦rcito iraqu¨ª, entrenados y equipados por EE UU y Reino Unido. Su ascenso se debe a la falta de control por parte del poder central desde Bagdad y a su ¨¦xito en las elecciones parlamentarias de enero.

Desde la formaci¨®n del Gobierno en primavera, en Basora se han producido decenas de asesinatos de antiguos miembros del Baaz -el partido de Sadam-, de pol¨ªticos sun¨ªes o de miembros de partidos chi¨ªes rivales.

Muchos de ellos han sido realizados por hombres uniformados que se trasladaban en veh¨ªculos policiales, de acuerdo con familiares de las v¨ªctimas, cuyos cuerpos acribillados a balazos se hallaron en muchos casos en un basurero de Basora.