El faro de Eduardo Sanz
El pintor presenta el centro de arte que instalar¨¢ en el faro de Cabo Mayor, de Santander , con su colecci¨®n de obras sobre las costas espa?olas y de otros artistas. "No quiero un pante¨®n. Es un sitio maravilloso para hacer un lugar popular".
El pintor Eduardo Sanz (Santander, 1928) est¨¢ a punto de cumplir un sue?o de la infancia y de artista: meter en un faro de su ciudad natal su colecci¨®n de obras relacionadas con las costas espa?olas y convertir el lugar en un centro de arte. "No quiero un pante¨®n sino un centro vivo y popular en un sitio maravilloso", declara. Tras la firma del acuerdo entre el artista y la Autoridad Portuaria para la creaci¨®n del Centro de Arte Faro de Cabo Mayor, el proyecto, con el plan museogr¨¢fico, las salas de exposiciones y el centro de documentaci¨®n, se presenta este mes de agosto en el Palacete del Embarcadero, con el fondo de la bah¨ªa santanderina.
En esta presentaci¨®n p¨²blica, Eduardo Sanz ha colocado un cuadro de faro junto a otros de su mujer, Isabel Villar, y de su hijo, Sergio Sanz, con el mismo motivo, y algunas "curiosidades" de recortables y objetos. El centro de arte, con un presupuesto de 720.000 euros, tiene un programa de salas de exposiciones temporales, talleres y seminarios, en un faro automatizado que deja libres, tras su reforma, las viviendas de los fareros y otras dependencias. "Ser¨¢ un proyecto sencillo, que mantiene la estructura actual del edificio y sus alrededores. Espero que se pueda inaugurar el pr¨®ximo verano".
"El cuadro es como una mancha. El mar no es color de pintura, es blanco y negro. Es m¨¢s abstracto, aunque parezca hiperrealista"
El centro de arte contendr¨¢ la colecci¨®n del artista sobre los faros espa?oles, una "aventura" que comenz¨® en marzo de 1979 con un recorrido por las costas durante los a?os siguientes, desde el mar y desde tierra, para documentar con pinturas, dibujos y fotograf¨ªas 40 faros, entre los que figuran los nueve de Cantabria. El pintor confirma que la cesi¨®n durante 10 a?os (para asegurarse el desarrollo del proyecto) incluye unas 200 pinturas de los faros y unas 900 obras del material paralelo, como grafitos, acuarelas, dibujos, apuntes y grabados. Adem¨¢s de esta colecci¨®n monogr¨¢fica, el pintor aporta obras de otros amigos y artistas que ha comprado o por intercambios, entre los que figuran Eduardo ?rculo, Alfredo Alca¨ªn, Guillermo P¨¦rez Villalta, Eduardo Arroyo, Dis Berl¨ªn, Joaqu¨ªn Peinado, Andr¨¦s R¨¢bago (El Roto), Isabel Villar y Sergio Sanz.
A los 14 a?os, Eduardo Sanz pint¨® por primera vez la se?al de la isla de Mouro, y desde entonces su mirada art¨ªstica se detuvo en el mar y en los faros. En los ¨²ltimos a?os, intenta que su obra se muestre en alg¨²n espacio mar¨ªtimo de su ciudad. Ahora va a ocupar uno de los faros que vive desde la infancia, el de Cabo Mayor, inaugurado el 15 de agosto de 1839 en el llamado Atalay¨®n de Cabo Mayor, desde el que se hac¨ªan se?ales por banderas de d¨ªa y con grandes fogatas de noche. Tiene una base circular de 14 metros de di¨¢metro y siete metros de altura, y la torre, decorada con ocho arcos, tiene un primer cuerpo octogonal y el resto cil¨ªndrico.
"Mi fijaci¨®n por el mar es por vivir en Madrid. De vivir en Santander estar¨ªa pescando o navegando. Es algo nost¨¢gico, que te falta, que viene desde los sentimientos. Cuando estudiaba en Bellas Artes de Madrid, al salir me iba al Prado a intentar entender a Vel¨¢zquez y despu¨¦s segu¨ªa hasta el estanque del Retiro. Me faltaba el olor a mar y todav¨ªa sigo impregnado de mar".
El mar ocupa varias p¨¢ginas de las memorias de Eduardo Sanz, que ha publicado Ediciones Valnera (www.ediciones-valnera.com) en dos vol¨²menes y en la colecci¨®n Memorias con Arte. Un tomo biogr¨¢fico, Madera de tamarindo, con fotos personales y reproducciones de su obra art¨ªstica, y otro dedicado a los faros, Derrotero, con la descripci¨®n de sus viajes por las costas espa?olas, sus cuadros y apuntes. En esta misma colecci¨®n han aparecido las biograf¨ªas art¨ªsticas de los pintores tambi¨¦n c¨¢ntabros Fernando Calder¨®n y Jos¨¦ Ram¨®n S¨¢nchez. En octubre se publicar¨¢ la del arquitecto y humorista gr¨¢fico Jos¨¦ Mar¨ªa P¨¦rez, Peridis, y los editores han animado al cineasta Mario Camus y al arquitecto Juan Navarro Baldeweg a que escriban sus memorias.
Eduardo Sanz indica que durante un a?o ha escrito unas "memorias desde los 75 a?os", m¨¢s centradas en la infancia en Santander (donde todav¨ªa reside algunos meses al a?o), y la juventud, con sus estudios de arte en Madrid, sus primeros viajes a Par¨ªs e Italia, las exposiciones y los cambios en su obra, vinculada desde un inicial informalismo a las abstracciones y geometr¨ªas. Aparecen sus ra¨ªces en los barrios de Puerto Chico y Miranda, la familia, la guerra, el colegio, los amigos, trabajos, los barcos, viajes y cambios de rumbo, con cuadros de vidrios y espejos y series de ventanas, capillas, se?ales, faros y hora solar, que se han visto en la antol¨®gica de 1973 del Museo de Arte Contempor¨¢neo de Madrid, el C¨ªrculo de Bellas Artes o la galer¨ªa Juan Gris. "Concibo el cuadro como una mancha, como un mar, lienzos verticales donde aparecen cielo, mar y tierra. El mar no es color de pintura, es blanco y negro. La gente ha mirado el mar, no lo ha visto, no ha entrado en la visi¨®n, es m¨¢s abstracto aunque parezca hiperrealista, aunque no es mi intenci¨®n. Me aparto de las marinas, que son muy nost¨¢lgicas y cursis".
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