Ayudando a volar al quebrantahuesos
Cazorla acoge un campo de voluntariado ambiental para recuperar esta especie
El quebrantahuesos dej¨® de sobrevolar Andaluc¨ªa en los a?os ochenta. Desde entonces han sido muchos los intentos por recuperar el vuelo majestuoso de esta especie en v¨ªas de extinci¨®n, que llega a medir hasta tres metros con las alas desplegadas. Naci¨® as¨ª el programa de reintroducci¨®n del quebrantahuesos, impulsado por la Consejer¨ªa de Medio Ambiente y la fundaci¨®n Gypaetus, una entidad sin ¨¢nimo de lucro que trabaja por la conservaci¨®n de especies amenazadas.
Esta fundaci¨®n es la promotora de un campo de voluntariado ambiental que, desde el pasado viernes y hasta el 28 de este mes, acoge en Cazorla (Ja¨¦n) a una treintena de j¨®venes llegados de todo el pa¨ªs con un objetivo com¨²n: ayudar a que el quebrantahuesos levante muy pronto el vuelo.
"Estamos poniendo nuestro granito de arena y concienciando a la gente sobre la necesidad de proteger nuestra fauna", indic¨® Antonio Carrasco, el coordinador de esta actividad que tiene su sede en el centro de cr¨ªa Guadalent¨ªn, ubicado en la Nava de San Pedro, uno de los picos de la Sierra de Cazorla, a casi 2.000 metros de altitud. Este centro es el segundo en el programa europeo de cr¨ªa en cautividad. Desde su apertura en 1996, con la llegada de los dos primeros quebrantahuesos j¨®venes, el n¨²mero de ejemplares ha ido aumentando hasta los 25 de la actualidad.
Juan C¨¦sar, un bi¨®logo de Palma del R¨ªo (C¨®rdoba), es otro de los coordinadores de este campo de trabajo en el que los j¨®venes toman parte activa limpiando y construyendo jaulas, plantando arbolado o divulgando el proyecto de reintroducci¨®n entre los visitantes del Parque Natural de Cazorla, Segura y Las Villas.
Acaban de instalar dos puntos de informaci¨®n en el centro de interpretaci¨®n de la Torre del Vinagre y en el paraje de Arroyo Fr¨ªo, advirtiendo sobre las amenazas con las que tiene que enfrentarse esta especie como los tendidos el¨¦ctricos. Los voluntarios pretenden se?alizar los cables para evitar la colisi¨®n de las aves, pero existen otros peligros como los cebos envenenados, que han sido la causa de que la suelta de los primeros ejemplares criados en Guadalent¨ªn se haya pospuesto al pr¨®ximo a?o. Los responsables del proyecto creen que las amenazas existen por la escasa concienciaci¨®n de cazadores y ganaderos. "Tenemos que buscar el equilibrio para que estos sectores puedan desarrollar su actividad sin perjudicar a la fauna", explic¨® C¨¦sar.
La mayor¨ªa de los voluntarios son estudiantes de Biolog¨ªa o Ciencias Ambientales y amantes de la naturaleza. Ese es el caso de Mario, Francisco, Mari Carmen o Santiago, los monitores de esta actividad que ha tra¨ªdo hasta Cazorla a j¨®venes de Navarra, Murcia, Madrid y de casi todas las provincias andaluzas.
A finales de 1998 lleg¨® a Cazorla la primera pareja reproductora. Eran el macho Joseph, descendiente de la pareja del zoo de Dresde (Alemania), y la hembra Zumeta, que lleg¨® del zoo de la Garenne (Suiza). El 27 de febrero de 2002 naci¨® el pollo llamado Andaluc¨ªa, el primero reproducido en cautividad en Espa?a. En el siguiente ciclo tambi¨¦n se obtuvo descendencia, Joker, y en el ciclo 2003-2004 se consigui¨® un tercer pollo, Colega, una hembra liberada en los Alpes italianos. Ahora s¨®lo falta que remonten el vuelo.
Campo de Voluntariado Ambiental en el Centro de Cr¨ªa Guadalent¨ªn de Cazorla. Para concertar visitas, en los tel¨¦fonos 647 73 40 06 y 637 13 63 37.
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