Culebrina

Ya no hay serpientes de verano, y no s¨¦ a qu¨¦ achacarlo. ?Al fin de la inocencia? Por las mismas razones tal vez, este peri¨®dico prohibi¨® las inocentadas de Navidad, que ahora quedan, cuando se hacen, un poco de derechas.

En el antiguo r¨¦gimen hab¨ªa de todo eso. Serpientes de verano, bromas y monigotes colgando el d¨ªa 28 de diciembre, veraneos y misas de gallo como Dios manda. La democracia ha disuelto el costumbrismo, aunque no lograra acabar con la mala entra?a franquista. Y as¨ª seguimos: trag¨¢ndonos los sapos y culebras de un PP entra?adamente franquista, pero sin una mala serpiente veraniega que llevarnos a los ojos.

Claro que las serpientes period¨ªsticas de verano se soltaban en tiempos en que uno dir¨ªa que hab¨ªa menos noticias relevantes. Ahora, con el auge de la libertad de expresi¨®n, el parlamentarismo y la diseminaci¨®n -seg¨²n algunos, artificial- de la homosexualidad, el peri¨®dico viene cada d¨ªa, hasta en vacaciones, con un titular trascendente, estremecedor, revelador, por lo que la antigua costumbre veraniega de inflar las noticias, invent¨¢rselas o darles un bombo exagerado se ha hecho innecesaria.

Como no me resigno a prescindir de ellas, he hecho un poco de labor de campo respecto a dichas serpientes, y algo he encontrado. Por ejemplo: a principios del verano le dieron, con muchos inviernos de retraso, el Premio Nacional de Cinematograf¨ªa a Manuel Guti¨¦rrez Arag¨®n. La noticia fue glosada en los medios, con mayor o menor entusiasmo seg¨²n los gustos, hasta que alg¨²n columnista de esa extrema derecha disfrazada de neo-con que uno se topa en los peri¨®dicos nost¨¢lgicos del aznarismo y en las radios apost¨®licas dictamin¨® que ese premio era el pago que el Gobierno de Zapatero le daba a Guti¨¦rrez Arag¨®n por su contribuci¨®n filmada a la pel¨ªcula colectiva Hay motivo, en la que 30 cineastas espa?oles denunciaron en cortos de tres minutos las mentiras, ilegalidades y atropellos del Gobierno de Aznar antes y despu¨¦s del 11-M. Por mucho que fuese demostrablemente falsa (el cineasta "no" particip¨® de ninguna manera en dicha pel¨ªcula), una vez soltada, la afirmaci¨®n sigui¨® reptando por columnas y emisoras, y ni siquiera les hizo rectificar Manuel Hidalgo, quien, escribiendo en las mismas p¨¢ginas de El Mundo, se burl¨® con gracia de que uno de los propagandistas de la falsedad, un tal Gistau, diese como fuente de su informaci¨®n un chat de Internet.

Los meses de julio y agosto tambi¨¦n han tenido sus sierpes informativas. Esperanza Aguirre reparti¨® radios y televisiones a sus amigos y correligionarios como quien reparte peladillas, y ya que estamos en el s¨ªmil navide?o, dir¨¦ aqu¨ª -ven lo reacio que soy a desprenderme de los viejos h¨¢bitos- que la noticia m¨¢s serpentina de todo el verano bien podr¨ªa ser igualmente la inocentada del pr¨®ximo 28-D: Ruiz-Gallard¨®n ha hecho tantas, tan estruendosas, tan molestas y (por lo visto en ciertas calles) tan fallidas obras "al mismo tiempo" s¨®lo por nuestro bien.

El alcalde estar¨¢ todo a la izquierda de su partido que se quiera, pero esas recientes declaraciones period¨ªsticas saben al m¨¢s rancio nacional-catolicismo: nos pide sufrir en este valle de l¨¢grimas (secas) que es Madrid para disfrutar en la Otra Vida (eternamente futura) de un para¨ªso de t¨²neles, macro-estaciones, aparcamientos, intercambiadores, terminales y tal vez -en plan azafata- de unas seductoras y complacientes hur¨ªes. Y as¨ª, entre el manzanato del anterior califa municipal y los reiterados gallardazos del actual visir, prosigue nuestra penitencial traves¨ªa del desierto.

Ayer compr¨¦ el peri¨®dico con la misma agitaci¨®n de todos los d¨ªas. ?Habr¨¢ hoy algo disparatado y chocante, un monstruo del lago Ness, que al fin y al cabo es el padre de todas las serpientes informativas del mundo occidental? Antes de abrirlo, not¨¦ que el ejemplar ven¨ªa, para ser un d¨ªa de agosto, extra?amente abultado, en cierto modo como lo est¨¢n las boas despu¨¦s de tragarse entero un roedor. Fui pasando las p¨¢ginas ansiosamente, pero en ninguna secci¨®n saltaba la liebre. Hasta que di con el gazapo: un suplemento de 32 p¨¢ginas sobre la Liga, que empieza. El fin de las vacaciones. Lagarto, lagarto.