Mala imagen

Les escribo indignado por el trato recibido y la pobre imagen que ofrece l'Oceanografic que oferta unas visitas en horario nocturno (de 20 a 24 horas) que se hacen llamar Las noches de l'Oceanografic. El la p¨¢gina web de la Ciudad de las Artes y las Ciencias, se da un n¨²mero de tel¨¦fono donde se pueden comprar las entradas mediante tarjeta de cr¨¦dito. Parece una buena opci¨®n pues parece razonable pensar que la adquisici¨®n de entradas por este medio permite una acceso m¨¢s r¨¢pido al recinto ya que como indica la se?orita que atiende el tel¨¦fono "solo hay que pasar a recogerlas y as¨ª evita colas".

Pues bien, cual es mi sorpresa que al llegar a las puertas del recinto, de las cinco cajas disponibles tan solo hay una abierta, que tiene que atender tanto a los que compran las entradas in situ como a los que s¨®lo tienen que pasar a recogerlas.

La cola, en esos momentos, es considerable, por lo que decido ir al punto de informaci¨®n situado a la entrada del complejo para notificar la situaci¨®n. La respuesta del empleado: "No es de mi responsabilidad, ese no es mi departamento".

Trato de dirigirme a la se?orita que est¨¢ en la caja para que llame a alg¨²n compa?ero o en su caso al responsable de secci¨®n, ya que cada vez los ¨¢nimos est¨¢n m¨¢s exaltados entre la gente que est¨¢ haciendo cola durante m¨¢s de cuarenta minutos. Todo lo que consigo es hablar con el guarda de seguridad, que asiente, muy t¨ªpico.

Tras m¨¢s de cuarenta minutos esperando, llega el encargado de secci¨®n y la ¨²nica explicaci¨®n que me da es: "Antes hab¨ªa otra chica m¨¢s atendiendo, pero se ha ido sin yo saberlo". Si ese es su trabajo, ?no cree que deber¨ªa estar m¨¢s atento del personal que est¨¢ a su cargo?, ?no cree que deber¨ªa hacer algo cuando de las cinco ventanas de atenci¨®n al p¨²blico solo hay una abierta? Merece la pena verlo, pero son detalles como ¨¦stos los que luego comenta la gente al regreso de sus vacaciones. Estoy seguro que esto no ocurre en otras ciudades.