Hasta aqu¨ª hemos llegado

El diputado de la foto, al que sujetan para que no golpee a su adversario pol¨ªtico, todav¨ªa est¨¢ esperando que su v¨ªctima le pida disculpas. Y no se las pide, incre¨ªblemente. El agredido no se ha dado cuenta de que este hombre es un se?orito de los de toda la vida; un individuo de los de no sabe usted con qui¨¦n est¨¢ hablando; un sujeto de los de eso no me lo dice usted en la calle. Lleva el fenotipo y el genotipo a pecho descubierto, de manera que es evidente que se trata tambi¨¦n de un dem¨®crata de los de hasta cierto punto. Yo soy dem¨®crata hasta que me tocan los cojones, de modo que si no me sujetan le doy a este rojo de mierda dos hostias que lo mato. Y luego os quej¨¢is de que haya Pinochets y Francos y Videlas. Si es que f¨ªjense ustedes hasta qu¨¦ extremo de exasperaci¨®n me ha llevado este imb¨¦cil que he estado a punto de mancharme las manos con la sangre de sus narices, porque est¨¢ claro que le habr¨ªa roto las narices.

Y aqu¨ª llevo m¨¢s de un mes esperando que me pida perd¨®n el desgraciado. Las fotos no mienten, y de la lectura de esta foto se deduce que el agresor era yo. De modo que est¨¢ claro qui¨¦n es el que debe pedir perd¨®n y entregar su acta de diputado: ¨¦l. ?Que me he acalorado? De acuerdo, me he acalorado, pero es que uno es espa?ol y tiene sangre en las venas. Bastante hemos aguantado con el desmantelamiento de Espa?a, con las bodas de los maricas, con el Gobierno paritario, que llevamos un a?o de provocaciones sin pegar a nadie, sin salir a la calle, excepto el d¨ªa aquel de los obispos. Pero salimos en plan nenaza, sin tanques ni pistolas. ?Creen que nos lo agradecen? En vez de eso, nos queman los bosques impunemente, porque sabemos qui¨¦n estuvo detr¨¢s del incendio de Guadalajara y de las 11 muertes que provoc¨®. Por eso no quieren comisiones de investigaci¨®n, porque saben que les tenemos pillados, como con el 11-M. Por favor, si le ol¨ªan las manos a Zapatero a gasolina. Y a¨²n pretenden, mientras se reparten Espa?a, Espa?a, Espa?a, e incendian nuestros bosques, bosques, bosques, que los espa?oles de bien nos quedemos sentados. Si algo me toca a m¨ª los cojones es la gente radical como Zapatero. Para radical aqu¨ª estoy yo. Ya me ha salido el espa?ol que llevo dentro, me cago en todo. Bastante tiempo llevo reprimi¨¦ndolo para guardar las formas. Hasta aqu¨ª hemos llegado. F¨ªjate en mi cara, chaval, en mi pecho, en mi fenotipo, en mi actitud camorrista, pendenciera, matona. Soy de la raza de los Pujalte, de los Aznar, de los Zaplana, de los Acebes, y con esa raza, pocas bromas. Preg¨²ntaselo a Rajoy, que, siendo de los nuestros, no se atreve a saltarse una l¨ªnea del gui¨®n.

Se acab¨® el templar gaitas. Os atrev¨¦is a ganarnos las elecciones cuando era evidente que nos tocaba gobernar a nosotros dos o tres legislaturas m¨¢s, y encima os pas¨¢is el d¨ªa provocando. Una cosa es aceptar el veredicto de las urnas (vaya expresi¨®n de maricones, por cierto, la de veredicto de las urnas) y otra que os tengamos respeto. Como no me pidas disculpas por haber estado a punto de pegarte, la pr¨®xima vez que nos crucemos en un pasillo del Congreso te voy a dar yo veredicto de las urnas hasta en el carn¨¦ de identidad, payaso, que eres un payaso.