L¨ªbano detiene a cuatro ex jefes policiales como sospechosos del asesinato de Hariri
La comisi¨®n investigadora de la ONU interroga a la antigua c¨²pula de seguridad
Cuatro generales, altos mandos de la polic¨ªa en L¨ªbano, fueron detenidos ayer en Beirut para ser interrogados sobre el asesinato, el pasado 14 de febrero, del ex primer ministro Rafik Hariri. Las detenciones fueron llevadas a cabo por la polic¨ªa a requerimiento de la Comisi¨®n Internacional de Investigaci¨®n de la ONU, que desde el pasado junio investiga el atentado terrorista que caus¨® la muerte del mandatario liban¨¦s y de otras 20 personas. El juez encargado del caso, el alem¨¢n Detlev Mehlis, podr¨ªa pedir a la justicia que procediera al procesamiento de los militares.
Los generales Yamil al Sayyed, ex director general de la Seguridad General; Raymond Azar, ex responsable de los servicios secretos del Ej¨¦rcito; Al¨ª al Haj, ex jefe de la Seguridad Interior, y Mustaf¨¢ Hamadne, actual director de la Guardia Presidencial, fueron detenidos ayer por la polic¨ªa de Beirut, como consecuencia de una orden firmada por el Ministro de Justicia, de acuerdo con las peticiones efectuadas por la Comisi¨®n Internacional de la ONU encargada de investigar el asesinato de Hariri. Tres de los militares fueron detenidos en su domicilio, mientras que el jefe de la Guardia Presidencial se present¨® voluntariamente en la sede de la Comisi¨®n.
Los cuatro detenidos fueron trasladados, en medio de un impresionante aparato de seguridad, a la sede de la Comisi¨®n de la ONU, situado en el barrio de Monteverde, en el noreste de Beirut, donde empezaron a ser interrogados por el juez alem¨¢n Detlev Mehlis. Su detenci¨®n podr¨ªa prolongarse durante tres d¨ªas, tras los cuales los investigadores deben decretar su libertad o reclamar su procesamiento y detenci¨®n ante la Justicia ordinaria, seg¨²n aseguraron ayer responsables del Gobierno liban¨¦s.
Las fuerzas de polic¨ªa tambi¨¦n trataron de arrestar al ex diputado y ex ministro Naser Qandil, pero al llegar a su casa, su mujer anunci¨® a las fuerzas de seguridad que ¨¦ste se encontraba en Damasco. Horas m¨¢s tarde, en unas declaraciones efectuadas a la prensa internacional, Qandil asegur¨® que se encontraba en la capital siria, en un viaje de negocios, pero que estaba dispuesto a volver inmediatamente a Beirut y presentarse ante la Comisi¨®n para colaborar en las investigaciones.
El arresto de los cuatro generales se produce pocos d¨ªas despu¨¦s de que el Consejo de Seguridad de la ONU se quejara de la actitud del Gobierno sirio, que entorpec¨ªa en las ¨²ltimas semanas la tarea de la Comisi¨®n de Investigaci¨®n. Damasco se negaba a contestar a las preguntas de los responsables de las pesquisas e imped¨ªa el interrogatorio de los ex mandos policiales libaneses. Varios pa¨ªses, entre ellos Estados Unidos, dirigieron serias advertencias y amenazas al r¨¦gimen sirio, si persist¨ªa en su actitud obstruccionista.
El principal sospechoso, el general Hamdane hab¨ªa sido interrogado hace dos semanas por la Comisi¨®n de la ONU en calidad de sospechoso. A pesar de los consejos de sus superiores, Hamadne se neg¨® a presentar la dimisi¨®n de su cargo, alegando que se trata de una investigaci¨®n general, en la que han sido interrogadas por ahora 240 personas.
Investigaci¨®n en Suiza
La Comisi¨®n de la ONU trabaj¨® en los ¨²ltimos d¨ªas en Suiza, donde interrog¨® a miembros de los servicios secretos sirios destinados recientemente a la Embajada y Consulado de Siria. La Comisi¨®n, formada por unas 100 personas, cuenta con el apoyo y la colaboraci¨®n de expertos policiales de la Interpol y de los servicios secretos de Suiza, a los que se les ha sumado un equipo de 13 juristas libaneses. La Comisi¨®n finalizar¨¢ sus trabajos el pr¨®ximo 15 de septiembre, seg¨²n se estableci¨® el pasado mes de abril, cuando recibi¨® el mandato de¡ã?l Consejo de Seguridad de la ONU.
"Las detenciones de Beirut suponen el principio de la justicia. Habr¨¢ m¨¢s arrestos", asegur¨® ayer Saad Hariri, diputado liban¨¦s e hijo del asesinado ex primer ministro en unas declaraciones efectuadas a una cadena de televisi¨®n ¨¢rabe, desde Par¨ªs, donde se refugi¨® por temor a sufrir un atentado similar al que cost¨® la vida de su padre.
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