La tercera vida de la casa Ricart
Un marqu¨¦s y Aguas de Barcelona han ocupado 123 a?os el palacete del paseo de Sant Joan adquirido por la Generalitat
Un total de 123 a?os da para mucho y, por eso, la casa que ilustra esta p¨¢gina, construida en 1883 en la esquina del paseo de Sant Joan con la calle de la Diputaci¨®, ha tenido tiempo para vivir dos largas vidas. Durante casi cuatro d¨¦cadas fue la residencia de la familia Ricart, una dinast¨ªa de empresarios textiles, que mand¨® construir el edificio. Luego la compr¨® y ocup¨® durante 85 a?os Aguas de Barcelona, que ahora la est¨¢ acabando de desalojar. El inmueble ha sido adquirido por la Generalitat y ser¨¢ reconvertido junto con otros dos edificios anexos de Aguas para acoger dependencias del Departamento de Interior.
Levantada muy cerca de donde se construyeron las primeras manzanas del Eixample, el solar tiene una rara caracter¨ªstica que lo hace inconfundible: es uno de los pocos que han resistido el paso del tiempo sin construir en su chafl¨¢n. All¨ª hay un estanque donde nadan patos negros, que es de suponer que seguir¨¢n nadando cuando la Generalitat desembarque en el palacete.
El chafl¨¢n se salv¨® del 'totxo'; fue invernadero, cochera y ahora acoge patos en el estanque
La centenaria historia de la casa Ricart empez¨® el 13 de marzo de 1882, cuando Federico Ricart, marqu¨¦s de Santa Isabel, due?o del solar, pidi¨® permiso para levantar all¨ª un edificio. El Ayuntamiento se lo concedi¨® raudo el 13 de abril de ese a?o. Aquella era entonces una zona en expansi¨®n, a poca distancia de donde pocos a?os despu¨¦s se iba a celebrar la Exposici¨®n Universal de 1888 tras la desaparici¨®n de la denostada Ciudadela, el s¨ªmbolo por excelencia de la derrota de Catalu?a a manos de las tropas de Felipe V. Precisamente, Ricart encarg¨® las obras al maestro de obras, Josep Fontser¨¦, que tambi¨¦n es autor de algunos edificios de la Ciudadela, como el Umbr¨¢culo, la Cascada y el antiguo mercado del Born.
Los Ricart ten¨ªan su principal f¨¢brica de estampados textiles en Sant Mart¨ª de Proven?als, cerca de donde la avenida Diagonal toca el mar, en la entonces llamada carretera de Matar¨®. Can Ricart, el nombre de la colonia, se encuentra ahora en medio del 22@ y tambi¨¦n experimentar¨¢ una radical transformaci¨®n.
Juan Pedro Y¨¢niz explica, en un libro sobre la historia de Aguas publicado en 1997, que la sede social de Ricart estaba en la calle de Sant Oleguer 10, en Barcelona, a medio camino de lo que ahora es Nou de la Rambla y rambla del Raval. En esa calle hubo otra f¨¢brica Ricart, a la que se acced¨ªa por detr¨¢s desde la calle de las T¨¤pies, donde a¨²n se conserva una chimenea y se realizan unas eternas obras de un polideportivo municipal.
En las fotos antiguas de la casa del paseo de Sant Joan se observan otras curiosidades. Por ejemplo, un invernadero que m¨¢s tarde fue sustituido por una cochera para dejar el carro de los se?ores. Ahora pervive otro invernadero en el lado de la calle de la Diputaci¨®.
La casa original ten¨ªa cuatro plantas sobre rasante, en vez de las seis actuales, y estaba al pie de tranv¨ªa, que atravesaba el paseo de Sant Joan. En una parte del solar, Aguas de Barcelona levant¨® en la d¨¦cada de 1960 el edificio de oficinas de nueve plantas que tambi¨¦n ha adquirido la Generalitat.
Entre 1910 y 1920 los Ricart decidieron hacer caja. En 1913 vendieron la f¨¢brica de Sant Mart¨ª de Proven?als a Eusebi Bertrand Serra, "que la mantuvo en su sitio con el mismo nombre hasta 1925", cuando la absorbi¨®, seg¨²n narra el historiador Francesc Cabana en su libro Bancs i banquers a Catalunya.
Aguas de Barcelona, que hab¨ªa sido fundada en 1882 por la francesa Lyonnaise des Eaux, compr¨® la casa a los Ricart en 1920. Para ese a?o Jos¨¦ Gar¨ª Gimeno ya figuraba como consejero delegado de Aguas, tras pasar las acciones de los franceses a un pool de bancos, que integraba a lo m¨¢s selecto de las finanzas de la ¨¦poca: Arn¨²s Gar¨ª (29,4%); Banco de Barcelona (17,9%); Hispano Colonial (13,3%), Arn¨²s y Sindicato de Banqueros (12,4%), y el Bilbao (14,6%), seg¨²n datos de la compa?¨ªa.
Los retratos que cuelgan en la sala del Consejo de Administraci¨®n son el testimonio de que por all¨ª pasaron personajes de la empresa y las finanzas: Bertrand G¨¹ell, Ignacio Ventosa, Isidro Valls, Juan Antonio Andreu, Jos¨¦ Felipe Bertrand de Caralt y Arturo Mas-Sard¨¤, Mariano Calvi?o y el actual presidente, Ricard Fornesa, en el cargo desde 1980. Calvi?o, que presidi¨® la empresa hasta bien entrada la democracia (dej¨® la presidencia en 1979), fue en Barcelona jefe de Falange Espa?ola y de las JONS, y persona bien conectada entonces con el palacio del Pardo, la residencia del dictador Francisco Franco.
Cabana explica que la ca¨ªda o la venta de algunos estos bancos catalanes -como el de Barcelona y el Hispano Colonial-, la absorci¨®n del Arn¨²s por el Banco Central y del Arn¨²s Gar¨ª por el Banesto, cambi¨® el accionariado durante la d¨¦cada de 1940. De la compra del Arn¨²s por Banesto en 1942 vienen las participaciones de Banesto en algunas sociedades: la propia Aguas, Asland, La Seda y Carburos Met¨¢licos.
Ahora, Aguas abandona en septiembre la casa y se traslada a uno de los emblemas del nuevo sky line de Barcelona: la torre de 31 plantas construida sin columnas que dividan su espacio junto a la plaza de las Gl¨°ries, dise?ada por el arquitecto franc¨¦s Jean Nouvel, que ser¨¢ inaugurada el pr¨®ximo d¨ªa 16.
Habr¨¢n pasado 123 a?os desde que la empresa, controlada hoy por La Caixa y la francesa Suez, naci¨® para abastecer a Barcelona. Aquella empresa se ha convertido en una multinacional tras una expansi¨®n espectacular.
Y el palacete de los Ricart empieza ahora, en la primera d¨¦cada del siglo XXI, su tercera vida. Conservando algunas de sus se?as de identidad: el invernadero, el estanque y sus patos.
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