La pasi¨®n 'jonda' de Tokio
Una veintena de personas editan en Jap¨®n 'Paseo flamenco', una revista especializada para los aficionados nipones
Es bien conocida la afici¨®n al flamenco que existe en Jap¨®n. Muchos artistas andaluces viajan con asiduidad y son numerosos los que se han establecido temporalmente al abrigo de las oportunidades de trabajo, la entrega de su p¨²blico y los yenes. Tambi¨¦n existen, diseminadas por todo el pa¨ªs, academias de baile dirigidas por japonesas que se han formado en Espa?a y que transmiten sus conocimientos a compatriotas que no pueden venir hasta Espa?a y permanecer aqu¨ª una larga temporada.
En gran medida, el papel de aglutinar todo el mundo flamenco en Jap¨®n recae en una revista, Paseo flamenco, que se edita desde 1984. Aunque se publica ¨ªntegramente en japon¨¦s conserva el t¨ªtulo en espa?ol y tiene una tirada de 15.000 ejemplares al mes, de los cuales la mitad se distribuye a suscriptores. Situada en el barrio de Shinjuku -el preferido de las diferentes tribus urbanas de Tokio-, en la cosmopolita zona de Takadanobaba, la redacci¨®n comparte su sede con una peque?a tienda en la que se venden objetos relacionados con la cultura flamenca -desde un musical en DVD de Carlos Saura hasta unas casta?uelas-.
"El 90% de los aficionados se sienten m¨¢s atra¨ªdos por el baile", dice Yuki Imai
Yuji Koyama escuch¨® a Paco de Luc¨ªa y qued¨® tan prendado que ahora lo considera un "dios"
La revista surgi¨® en cierta medida gracias a Paco de Luc¨ªa. Un d¨ªa su presidente y fundador, Yuji Koyama, escuch¨® la m¨²sica de este compositor y guitarrista y qued¨® tan prendado de ella que desde entonces lo considera un "dios". A partir de ah¨ª comenz¨® su afici¨®n al flamenco y al poco descubri¨® que, dada la ausencia de una publicaci¨®n como ¨¦sta, habr¨ªa un hueco "as¨ª que me dije, yo mismo voy a hacerla". La redactora jefa, Yuki Imai, se incorpor¨® m¨¢s recientemente, hace unos cinco a?os: "Quer¨ªa aprender a bailar flamenco, conoc¨ªa la revista y me hac¨ªa mucha ilusi¨®n trabajar en ella". Lo curioso es que, consider¨¢ndose ambos amantes del flamenco, no hablan nada de espa?ol, como el resto de la redacci¨®n. Tan s¨®lo alguna colaboradora como Mizuki Kobayashi, que vivi¨® y estudi¨® baile en Sevilla, habla con cierta fluidez el idioma.
Esta publicaci¨®n sirve de nexo de uni¨®n entre toda la comunidad "flamenca" residente en Jap¨®n, formada por espa?oles y nacionales, ya que no s¨®lo recoge reportajes o informaciones pr¨¢cticas sino una abundante galer¨ªa comercial de artistas, estudios, libros, DVD, tiendas, academias e incluso bares y restaurantes de comida espa?ola.
En la redacci¨®n de la revista trabajan unas 20 personas en total entre redactores, fot¨®grafos y personal administrativo. Dado que gran parte de la informaci¨®n que recogen se origina en Espa?a, cuentan con colaboradores en Sevilla, Jerez de la Frontera (C¨¢diz) y Madrid, que asisten a los principales eventos relacionados con el flamenco.
Adem¨¢s de la informaci¨®n puntual sobre festivales o artistas, entre sus contenidos y secciones habituales se encuentran el dedicado a recoger letras y partituras, con su correspondiente transcripci¨®n al alfabeto katakana -de los tres que tiene el japon¨¦s es el que se emplea para palabras y nombres extranjeros-, leyendas del flamenco, perfiles de japoneses dedicados en cuerpo y alma al flamenco, un curioso diccionario con los t¨¦rminos b¨¢sicos para entender esta m¨²sica y clases de baile.
Ni siquiera falta un espacio dedicado al humor. Frente al toque o al cante, el baile tiene m¨¢s peso en la revista de modo proporcional al inter¨¦s que despierta entre los japoneses. "El 90% de los aficionados al flamenco se sienten m¨¢s atra¨ªdos por el baile", afirma Imai. En su opini¨®n, "a las japonesas les encanta por la fuerza y la pasi¨®n que transmite, adem¨¢s las mujeres exteriorizamos los sentimientos m¨¢s que antes".
Ya sean mujeres u hombres, amantes del baile, el toque o el cante -como el cantaor Takamitsu Ishizuka Taka-, Paseo flamenco es todo un referente del flamenco en Jap¨®n y un instrumento de indudable peso para la difusi¨®n de la cultura andaluza en un pa¨ªs tan lejano, al que esta revista pretende acercar en cada n¨²mero.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.