Supersticiones

Yo hasta ahora no era supersticioso. Y eso que he estado toda la etapa lament¨¢ndome por mi mala suerte, pero lo consideraba algo ocasional sin m¨¢s, cosas que pasan (aunque bueno, no a todos les pasa, pero a m¨ª s¨ª y con cierta regularidad). Por cierto, todo esto viene a cuento porque ayer me ca¨ª, aclaro. Despu¨¦s de la ca¨ªda, termin¨¦ la etapa como pude, con un poco de dolor en la rodilla derecha. Poco despu¨¦s llegu¨¦ al autob¨²s y mientras me duchaba frotaba duro en las heridas con agua y jab¨®n; m¨¢s de lo mismo, herida sobre herida, pienso cuando descubro que me acabo de levantar cuatro puntos de sutura que me dieron en Francia har¨¢ un par de meses.

Entonces me siento a descansar con cara de pocos amigos y me dice Kolobnev, uno de mis compa?eros rusos (el otro, ya lo saben, es el l¨ªder): "?Sabes?, en Rusia consideramos al n¨²mero 13 como el de la mala suerte, y... ?has visto cu¨¢l era la etapa de hoy?".

Echo un r¨¢pido vistazo al libro de ruta. Y veo que, efectivamente, es la etapa decimotercera, Burgos-Santuario de la Bien Aparecida (Ampuero), 196 kil¨®metros. Pues en Espa?a tambi¨¦n, le digo, y va a ser que no andan muy descaminados, tanto rusos como espa?oles, porque menudo d¨ªa hemos tenido.

Si anteayer una ca¨ªda fue la gran protagonista del d¨ªa, la que (entre otros) le afect¨® a Heras (por cierto, afortunadamente, sigue con normalidad en carrera), ayer fue otra la que modific¨® toda la fase inicial de la carrera. Una ca¨ªda tremenda, de ¨¦sas que te ponen los pelos de punta (y no es para nada ninguna exageraci¨®n). No le recomiendo a nadie el espect¨¢culo; ver c¨®mo alguien se precipita de cabeza al suelo a m¨¢s de 70 km/h. no es para nada agradable. Y menos si piensas que ha sido ¨¦l, pero pod¨ªa haber sido cualquier otro, t¨² mismo. ?La causa? Un agujero inmenso en el asfalto. ?Los afectados? Baranowski, Steels y algunos cuantos m¨¢s. ?Culpables? Como dec¨ªa un ex compa?ero m¨ªo cada vez que se ca¨ªa, no busques culpables, busca soluciones, pero supongo que alguien de la organizaci¨®n supervisa los recorridos, y un bache de esos no aparece como un champi?¨®n de un d¨ªa para otro, creo yo.

Y por si fuera poco, m¨¢s tarde hubo otra ca¨ªda, la que me afect¨® a m¨ª... y a nadie m¨¢s. S¨ª s¨¦ cu¨¢ndo y d¨®nde, pero no c¨®mo. El caso es que mi ruedas se metieron en un foso a la izquierda de la carretera del que fue imposible salir sin volar por los aires. Resultado: una herida m¨¢s de guerra en la rodilla derecha y dolores varios, pero nada importante. Quiz¨¢ lo m¨¢s importante sea mi conversi¨®n, porque a partir de ahora he decidido que soy supersticioso.

Pedro Horrillo es corredor del Rabobank.