La locomotora no se para
La antigua Maquinista, hoy dentro del grupo Alstom, celebra 150 a?os de su nacimiento
Los antiguos trabajadores de La Maquinista Terrestre y Mar¨ªtima cuentan que cuando los "nacionales" entraron en Barcelona, el 26 de enero de 1939, en el que ser¨ªa uno de los ¨²ltimos cap¨ªtulos de la Guerra Civil, en el m¨¢stil de la f¨¢brica de Sant Andreu ondeaba la bandera republicana. Todo un s¨ªmbolo para la lucha sindical, que vendr¨ªa despu¨¦s.
Ayer se conmemoraron 150 a?os del nacimiento de la empresa. Pero su historia hab¨ªa empezado mucho antes. Y en ella se mezclan el af¨¢n modernizador de los empresarios que la fundaron; la aplicaci¨®n de las modernas tecnolog¨ªas -sobre todo del vapor- para producir trenes, motores de barcos y estructuras de hierro; los delirios aut¨¢rquicos franquistas, y el esfuerzo de miles de trabajadores que, adem¨¢s, fueron avanzadilla en la lucha sindical contra la dictadura franquista.
La sociedad fue una de las primeras en usar el vapor y emblema de la resistencia al franquismo
La empresa la fundaron en 1855 tres socios, Valent¨ª Espar¨®, Nicolau Tous y Celdoni Ascec¨ªbar. Fue una de las primeras en utilizar el vapor, la moderna energ¨ªa que revolucion¨® la industria y los transportes ferroviario y naval en el siglo XIX. Lo del uso del vapor resulta curiososo porque su primer presidente, Valent¨ª Espar¨®, estaba casado con Dolors Bonaplata, hija de la m¨ªtica familia que utiliz¨® por primera vez el vapor en Espa?a en su antigua f¨¢brica de la calle Tallers de Barcelona. Esta f¨¢brica, que luego fue propiedad de una de las empresas que fundaron La Maquinista, se hizo c¨¦lebre al ser incendiada en 1835 en el curso de las protestas obreras contra la instalaci¨®n de las entonces modernas m¨¢quinas selfactinas (del ingl¨¦s self acting, hacerlo uno mismo), capaces de realizar el trabajo de varios obreros.
Desde 1861 funcion¨® la f¨¢brica de la Barceloneta y en 1917 se abri¨® la de Sant Andreu. De la primera salieron la cubierta de la estaci¨®n de Francia y del Born, en Barcelona; el metro y los trenes de cercan¨ªas de Renfe, puentes, y motores de grandes barcos. En la Barceloneta a¨²n queda en pie una de las puertas de entrada a la f¨¢brica junto a un bloque de viviendas que lleva su nombre. Y en la antigua planta de Sant Andreu existe hoy un gran centro comercial, tambi¨¦n con su nombre.
En 1972 el Instituto Nacional de Industria (INI), creado en 1941 por el autarca Juan Antonio Suanzes, se convirti¨® en el socio mayoritario de La Maquinista. La empresa creci¨® a golpe de inyecciones de fondos p¨²blicos hasta que las cuentas se ti?eron de rojo. El INI empez¨® a buscar socios. Primero fue Renfe la que acompa?¨® al INI en el capital y luego, en 1989, tom¨® el control Alstom. La f¨¢brica de la Barceloneta cerr¨® en 1963 y la de Sant Andreu tres d¨¦cadas despu¨¦s. En 1991 se abri¨® la planta de Santa Perp¨¨tua. La empresa tiene 1.100 trabajadores y es la encargada de construir los trenes de la futura l¨ªnea 9 del metro.
En la antigua Maquinista llegaron a trabajar m¨¢s de 3.000 personas. Ayer, uno de aquellos trabajadores, Salvador Cur¨®s, de 65 a?os, que ahora preside la Fundaci¨®n Museo Hist¨®rico Social de La Maquinista, era uno de los 1.000 invitados, entre los que se encontraba el presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, en una jornada de puertas abiertas, que el grupo Alstom celebr¨® en motivo de los 150 a?os de La Maquinista. "Es como volverse a casar despu¨¦s de un divorcio", explicaba Cur¨®s, al que prejubilaron con 52 a?os, tras 34 en la f¨¢brica, a una edad en "la que a¨²n te ves capaz de hacer muchas cosas". Cur¨®s reivindica ayudas para llevar adelante un proyecto muse¨ªstico que no quiere preservar "cosas", sino el esp¨ªritu que hab¨ªa entonces entre los trabajadores.
El secretario general de UGT en Catalu?a, Josep Maria ?lvarez, entr¨® a trabajar en la f¨¢brica de Sant Andreu en 1975. "Aqu¨ª es donde se libraron las primeras luchas contra la dictadura", se?ala ?lvarez. En 1965, Pere Duran Farell, que presid¨ªa la empresa, "fue el primero en negociar con una representaci¨®n sindical que no era el sindicato vertical, el ¨²nico permitido por el r¨¦gimen fascista de Franco", recuerda ?lvarez. Duran Farell lleg¨® a acuerdos con las Comisiones Obreras de Marcelino Camacho, que por entonces a¨²n trabajaba en la Perkins y pasaba temporadas en la c¨¢rcel debido a su actividad sindical. "Duran Farell me lo cont¨® y estaba muy orgulloso de esta faceta de su vida, pero eso le cost¨® la presidencia", resume ?lvarez.
Ayer todos reconocieron a la vieja Maquinista su contribuci¨®n al desarrollo social y econ¨®mico de Espa?a. Maragall tambi¨¦n rindi¨® homenaje a los que lucharon contra Franco porque "los que llevaban la voz cantante eran unos pocos estudiantes y muchos trabajadores de la industria de Barcelona, sobre todo de La Maquinista, que salieron a la calle para defender la libertad sindical". El presidente de Alstom en Espa?a, Antonio Oporto, record¨® a los "trabajadores que han contribuido al desarrollo social y econ¨®mico de Espa?a". Al presidente del comit¨¦ de empresa, Llu¨ªs ?lvarez, le toc¨® la parte reivindicativa y pidi¨® "un impulso para el museo de La Maquinista, para que, despu¨¦s de 12 a?os, deje de ser un proyecto y se convierta en una realidad".
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