Una 'locomotora' con muchas fugas

La incertidumbre de los ¨²ltimos meses va dejando lugar poco a poco al aumento de las se?ales que indican que la econom¨ªa alemana empieza a recuperarse. Sin embargo, todos los expertos advierten de que sigue habiendo indicadores negativos y est¨¢ por ver qu¨¦ consecuencias puede tener el precio del petr¨®leo y el hurac¨¢n Katrina sobre la t¨ªmida recuperaci¨®n.

Las exportaciones son las impulsoras de un crecimiento del 0,6% del PIB al aumentar un 5,9%, hasta los 382.300 millones de euros

Despu¨¦s de un primer trimestre de inesperado crecimiento, con un 0,8% con respecto al ¨²ltimo de 2004, entre abril y junio la econom¨ªa alemana no se movi¨®. En comparaci¨®n con el segundo trimestre de 2004, sin embargo, el producto interior bruto (PIB) se expandi¨® -depurado de los efectos de haber tenido dos d¨ªas laborales m¨¢s- un 0,6%. Impulsoras del crecimiento son, sobre todo, las exportaciones, que en el primer semestre del a?o batieron el r¨¦cord del mismo periodo de 2004. El super¨¢vit comercial ascendi¨® a 84.800 millones de euros, seg¨²n la Oficina Federal de Estad¨ªsticas. Esto a pesar de un aumento de las importaciones del 7,2% a causa del aumento del precio del petr¨®leo y las materias primas. Las exportaciones aumentaron un 5,9% para alcanzar los 382.300 millones de euros.

La lacra del desempleo

"Estas cifras reflejan con gran claridad que la econom¨ªa alemana gana en competitividad", declar¨® el analista del Deutsche Bank Stefan Bielmeier al diario Frankfurter Allgemeine Zeitung. Sin embargo, con ser el motor de la econom¨ªa alemana, las exportaciones no influyen en la creaci¨®n de puestos de trabajo, cuya escasez es, junto al bajo consumo, uno de los problemas centrales de Alemania. Con un 11,4% de paro, en Alemania se encontraban en agosto sin empleo 4,728 millones de personas. Los deseados efectos de la reforma laboral del canciller socialdem¨®crata Gerhard Schr?der se hacen esperar. Los economistas aseguran que, por mucho que se reforme el mercado laboral, no habr¨¢ un descenso significativo del desempleo mientras la econom¨ªa alemana no crezca.

Algunos indicadores aseguran que comienza a hacerlo. Los pedidos a la industria aumentaron en julio un 3,7% con respecto a junio, en contra de las expectativas de los analistas. Tambi¨¦n aument¨® en julio la producci¨®n, un 1,2%, despu¨¦s del 1,6% en junio. Otro motivo para el optimismo fue el ¨ªndice de coyuntura que elabora el Centro de Investigaci¨®n Econ¨®mica Europea (ZEW) de Mannheim que, al dispararse inesperadamente 13 puntos, dio cuenta de una notable mejora de las expectativas hasta niveles superiores a la media hist¨®rica del ¨ªndice.

No acompa?¨®, sin embargo, el ¨ªndice Ifo, que mide la confianza de los empresarios. Despu¨¦s de dos meses consecutivos de alzas, en agosto el Ifo cay¨® debido a que la mayor¨ªa de los 7.000 empresarios entrevistados por el instituto muniqu¨¦s valoraron su situaci¨®n actual negativamente. Las expectativas para el futuro mejoraron, sin embargo. Para el tercer trimestre de 2005, el Instituto Alem¨¢n de Investigaci¨®n Econ¨®mica DIW de Berl¨ªn public¨® unas previsiones de crecimiento del 0,5%.

Pero falta la chispa que encienda de una vez por todas la llama del consumo privado, que supone un 60% del PIB alem¨¢n. El miedo a perder el puesto de trabajo, acompa?ado de la reducci¨®n real de los salarios que se ha producido en los ¨²ltimos a?os, hacen que los alemanes gasten poco. A esta tendencia, que dura ya m¨¢s de tres a?os, se suma el aumento de los precios del petr¨®leo, que consumen el poco margen que pod¨ªa quedar.

El petr¨®leo tambi¨¦n dispara los precios. La inflaci¨®n aument¨® en agosto un 1,9% con respecto al mismo mes de 2004. Sin los combustibles el ¨ªndice hubiese quedado en el 1,3%, seg¨²n inform¨® esta semana la Oficina de Estad¨ªstica. El alza de los precios del crudo, agravada por las consecuencias del hurac¨¢n Katrina en Estados Unidos, tendr¨¢ sin duda consecuencias negativas tambi¨¦n sobre la econom¨ªa alemana. El Instituto de Econom¨ªa Mundial de Kiel (norte de Alemania) revis¨® por ello a la baja su pron¨®stico de crecimiento para este a?o, del 1,3% al 1,1%. El Gobierno parte de un crecimiento del 1%, pero estos pron¨®sticos se basan sobre un precio de entre 40 y 50 d¨®lares por barril de crudo, lejos de los 70 d¨®lares que ya se han alcanzado.

Hipoteca energ¨¦tica

Las consecuencias negativas para la econom¨ªa se mantendr¨¢n, sin embargo, dentro de unos l¨ªmites moderados, aseguran algunos analistas. En comparaci¨®n con las crisis de los a?os setenta, "hoy tenemos una situaci¨®n de partida completamente distinta", explica la analista del Dekabank Sandra Ebner. "La dependencia de la energ¨ªa de las econom¨ªas occidentales ha disminuido desde los a?os setenta", explica Folker Dries en un art¨ªculo en la prensa. Dries ve el fen¨®meno compensado por otros factores: "El dinero barato que los bancos centrales vierten sobre el mercado desde hace a?os y el percibido aumento del patrimonio posibilitado en muchos pa¨ªses por enormes alzas en el precio de la vivienda hacen el precio del crudo menos doloroso para el consumidor".

El petr¨®leo no hace m¨¢s f¨¢cil la situaci¨®n para Alemania, que soporta una deuda de casi un bill¨®n y medio de euros. El presupuesto de 2006, presentado en julio, no muestra una clara voluntad de reducirla. M¨¢s bien todo lo contrario: en ¨¦l se espera un d¨¦ficit para 2006 del 3,4%. En cuanto al a?o en curso, la cifra presentada por el ministro de Finanzas, Hans Eichel, de 3,7% fue revisada al alza por Eurostat, tras estudiar las cuentas, hasta el 3,9% o 4%. El comisario europeo de Asuntos Econ¨®micos, Joaqu¨ªn Almunia, ya prometi¨® medidas severas por el incumplimiento alem¨¢n del Pacto de Estabilidad y Crecimiento por cuarto a?o consecutivo.