Almer¨ªa y Murcia concentran los mayores poblados chabolistas de inmigrantes

Miles de inmigrantes viven en asentamientos ilegales como el que la madrugada del lunes ardi¨® en N¨ªjar (Almer¨ªa), y que estaba ocupado por 200 subsaharianos. Ni la Administraci¨®n central, ni las auton¨®micas, ni las locales tienen un censo de estos lugares, muchas veces construidos con cartones, pl¨¢sticos y maderos, y en los que los extranjeros hacen fuegos para cocinar y calentarse. Almer¨ªa y Murcia son las provincias en las que m¨¢s abundan esas infraviviendas, muchas veces construidas por los propios inmigrantes para estar cerca de las explotaciones agr¨ªcolas en las que trabajan.

- Dispersi¨®n en Almer¨ªa. Se conocen los lugares, los municipios, anejos o pedan¨ªas en los que se suelen asentar comunidades de inmigrantes. Pero ninguna administraci¨®n sabe el n¨²mero de personas que se hacinan en cortijos derruidos o reconstruidos del campo almeriense.

La poblaci¨®n inmigrante en El Ejido que vive en chabolas o cortijos es mayoritariamente marroqu¨ª y se distribuye por los t¨¦rminos de Cuatro Vientos, Tarambana, alrededores de Santa Mar¨ªa del ?guila y Las Norias, y Tierras de Almer¨ªa. En el caso de Roquetas de Mar, la nacionalidad predominante es la senegalesa o guineana, y se afinca en Cortijos de Mar¨ªn, informa Mar¨ªa Jos¨¦ L¨®pez D¨ªaz. V¨ªcar y La Mojonera se reparten la poblaci¨®n extranjera entre sus diseminados cortijos, si bien los braceros viven en mayor n¨²mero en este ¨²ltimo municipio, cuyo n¨²cleo urbano est¨¢ m¨¢s cerca de los invernaderos. Tambi¨¦n se registran peque?as comunidades de inmigrantes en la barriada almeriense de El Alqui¨¢n. Ya en N¨ªjar, los extranjeros se reparten entre Campohermoso, San Isidro, Atochares, Venta Gaspar, Pueblo Blanco y las afueras de N¨ªjar.

- Subsaharianos en Huelva. El ¨²nico asentamiento chabolista de la provincia de Huelva habitado se encuentra en Lepe, informa Luc¨ªa Vallellano. En ese campamento residen unas 40 personas de origen subsahariano. Se trata de inmigrantes que se han acogido este a?o al proceso de regularizaci¨®n abierto por el Gobierno central y que se hallan a la espera de una respuesta de la Administraci¨®n.

- Chabolas en Murcia. Los focos de chabolas improvisadas se encuentran principalmente en el Campo de Cartagena y en el Valle del Guadalent¨ªn, mientras que otros municipios, como por ejemplo los situados en el Altiplano murciano, acogen a importantes n¨²cleos de extranjeros que, pese a residir en viviendas, no tienen las m¨ªnimas condiciones de habitabilidad. Seg¨²n el director general de Inmigraci¨®n del Gobierno de Murcia, Basilio G¨®mez, "cientos de extranjeros conviven en las cercan¨ªas de los invernaderos y en casas abandonadas, y lo hacen as¨ª porque desgraciadamente en esas condiciones no encuentran diferencias con sus pa¨ªses de origen", informa Tono Calleja.

Si bien el Ejecutivo murciano asegura que tan s¨®lo ser¨ªan "unos cientos" los inmigrantes que viven en chabolas, las organizaciones no gubernamentales elevan la cifra a miles, ya que adem¨¢s de en el Campo de Cartagena, los extranjeros habitan infraviviendas en el Valle del Guadalent¨ªn, que incluye municipios tan poblados como Lorca o Alhama de Murcia. Estas localidades cuentan con un elevado n¨²mero de inmigrantes chabolistas, la mayor parte de ellos procedentes del continente africano.

- Bajo el puente en Valencia. El asentamiento m¨¢s destacado en Valencia se encuentra en el antiguo lecho del r¨ªo Turia. En lugar de chabolas, un grupo cambiante de entre 30 y 60 personas, en su mayor¨ªa subsaharianas, acampa regularmente bajo el puente de Campanar.

En zonas agr¨ªcolas suelen formarse peque?os poblados estacionales ligados a los ciclos de las cosechas, fundamentalmente la de naranja en Castell¨®n y Valencia y frutas y hortalizas en la vega baja alicantina, informa Jaime Prats. En el caso de la temporada de c¨ªtricos -entre noviembre y abril-, en las poblaciones de Nules, Vall d'Ux¨®, Moncofar y Almenara es frecuente ver furgonetas y caravanas saturadas de temporeros que acampan los meses de m¨¢s trabajo, as¨ª como en alquer¨ªas abandonadas.

- Naves vac¨ªas en Barcelona. En Barcelona existen peque?os campamentos de gitanos rumanos y galaico-portugueses que, antes de que lleguen las piquetas, se instalan con sus caravanas en f¨¢bricas abandonadas o en infraestructuras en desuso, como las naves de Renfe que deben acoger la nueva estaci¨®n del AVE de la Sagrera, informa Clara Blanchar. Actualmente el fen¨®meno de los asentamientos de caravanas se concentra en el barrio del Poblenou.

- Poblados en Madrid. Fuentes policiales apuntan dos focos de concentraci¨®n de extranjeros en infraviviendas. Una es el poblado marginal de El Salobral, en el distrito de Villaverde de Madrid, donde conviven poblaci¨®n gitana espa?ola y de origen rumano, informa Oriol G¨¹ell. La segunda es la Ca?ada Real Galiana, que se extiende por varios municipios al este de la Capital. En este asentamiento ilegal -a lo largo de 15 kil¨®metros viven 40.000 personas- conviven perfiles sociales muy dispares. Algunas fuentes policiales y de organizaciones sociales apuntan que pueden haberse instalado varios cientos de inmigrantes rumanos y marroqu¨ªes, aunque no hay confirmaci¨®n oficial.

- Barracones en Ceuta. Persisten algunas bolsas de inmigrantes magreb¨ªes, muy reducidas, en barracones abandonados cerca del puerto, donde se han producido algunos incendios, provocados por hogueras que los inmigrantes encienden para cocinar o calentarse, informa Roc¨ªo Abad.