Las palabras justas

D¨¢maso Casado lleva cuatro a?os al frente de la UGT de Euskadi predicando las virtudes de la negociaci¨®n colectiva. Naci¨® en Otero de Guardo (Palencia) y, como su tierra de origen, es un hombre sobrio. No abusa de las palabras y procura decir siempre las justas. En cierta forma, se sabe oposici¨®n al Gobierno vasco, a las patronales y a los sindicatos nacionalistas. Aun as¨ª apuesta por el pacto y el di¨¢logo en la pol¨ªtica sindical y reitera que la UGT, siendo el cuarto sindicato, es el que ha firmado convenios que afectan a m¨¢s trabajadores.

La nataci¨®n, el campo y los paseos de monta?a son las tres aficiones que le mantienen mental y f¨ªsicamente listo para la pelea sindical. Tiene 51 a?os y milita desde los 23 en el sindicato. En l¨ªnea con su predecesor en el cargo, Carlos Trevilla, se ha comprometido activamente, en ocasiones en solitario, en contra del terrorismo y en favor de la libertad, que considera amenazada tambi¨¦n en el ¨¢mbito sindical.

Casado y con tres hijos, prefiere dejar su vida privada al margen de su actividad en el sindicato. Es esencialmente reservado y antes de ser secretario general fue durante ocho a?os responsable de organizaci¨®n. Conoce la central al dedillo y ha participado en la constituci¨®n o direcci¨®n de hasta cuatro federaciones. Est¨¢ en excedencia por cargo sindical en la empresa SGT Tecnos, SA, dedicada a la calidad, seguridad y prevenci¨®n, pero en su vida profesional ha pasado por el campo, la miner¨ªa, la construcci¨®n, la metalurgia y el sector servicios.