Bla, bla, bla

Los del cine espa?ol se quejan much¨ªsimo. Seguramente tendr¨¢n razones para ello, pero no es f¨¢cil que el com¨²n de los mortales las podamos entender. Parecen no darse cuenta de que tienen en su contra al amplio grupo medi¨¢tico de la derecha que no duda en difamarles, acus¨¢ndoles de continuo de estar chupando del bote y de hacer malas pel¨ªculas. Cada fracaso en taquilla es celebrado por ellos como una victoria.

Tal como ha dicho Pilar Bardem en el Festival de San Sebasti¨¢n, ¨¦ste es el ¨²nico pa¨ªs del mundo en el que buena parte de la prensa aconseja no ir a ver las pel¨ªculas nacionales.

No hay colectivo profesional que aparezca tan a menudo en los papeles como el del cine espa?ol. Ahora, con el famoso documento suscrito por la autodenominada Plataforma del Cine Espa?ol, "entidad que aglutina cerca de una treintena de asociaciones profesionales", en el que se "suspende" al Gobierno por "defraudar las expectativas".

Aunque dicha plataforma parece haber dado marcha atr¨¢s, el incendio ya est¨¢ provocado: su documento circula de mano en mano. Documento en el que, por cierto, no hay ni asomo de autocr¨ªtica. La culpa siempre es de los dem¨¢s.

En San Sebasti¨¢n, alguien con buen humor ha comparado las protestas de ciertos productores (que no todos) con las de aquellos ricos del antol¨®gico dibujo de Chumy Ch¨²mez en que se manifestaban pidiendo "m¨¢s caviar para nuestros hijos", y en el diario Levante, entre otros ejemplos, se ha escrito estos d¨ªas que "quieren vivir del cine sin tener talento".

Lo coment¨¢bamos en el festival con algunos firmantes del documento mencionado: ?por qu¨¦ aparecer siempre con reclamaciones?, ?no estar¨¢n cansando al p¨²blico con tanto lloriqueo? Y nos respond¨ªan que no era as¨ª, que tambi¨¦n emiten mensajes positivos, pero que la prensa prefiere divulgar las noticias malas.

Puede ser. De hecho, las declaraciones optimistas que pronunci¨® Manuel Guti¨¦rrez Arag¨®n en un breve discurso tras recoger el Premio Nacional de Cinematograf¨ªa de manos de la ministra Carmen Calvo no fueron muy divulgadas: aseguraba el galardonado que el cine espa?ol est¨¢ viviendo uno de los mejores momentos de su historia. Pero el hombre quiz¨¢ no contaba con la r¨¦plica de la ministra, nada breve seg¨²n su costumbre, que tras calificarle a ¨¦l de cervantino, solt¨® alguna que otra perla: "Estoy segura de que si fuera posible, tecnol¨®gicamente hablando, a Miguel de Cervantes le encantar¨ªan las pel¨ªculas de Guti¨¦rrez Arag¨®n". Y claro, as¨ª no hay manera.

Los espectadores vemos el buen y el mal cine que hacen unos y otros. Y tambi¨¦n o¨ªmos cuanto dicen. ?No les parece que hablan demasiado?