Una venganza podr¨ªa estar detr¨¢s de la muerte del ciclista de Tres Cantos
El atropello fortuito queda descartado, ya que la v¨ªctima no ten¨ªa las lesiones caracter¨ªsticas
Poca luz existe sobre el homicidio del vecino de Tres Cantos Francisco Quintana Calvo, de 38 a?os, hallado muerto y calcinado el pasado domingo en El Molar. La Guardia Civil descart¨® ayer pr¨¢cticamente que la v¨ªctima fuera atropellada, ya que las lesiones que presentaba el cad¨¢ver no eran las propias de un arrollamiento. Las pesquisas se centran ahora en una posible venganza en el entorno cercano de Quintana, seg¨²n fuentes de la investigaci¨®n. Los agentes de Homicidios est¨¢n interrogando a familiares y amigos para descubrir si ten¨ªa alg¨²n enemigo.
El cad¨¢ver de Quintana fue hallado a las siete de la tarde del pasado domingo por una vecina de El Molar en el paraje Rascambres, en un camino vecinal junto a una zona de huertas. En un primer momento, la forense encargada del caso descart¨® que se tratara de un hombre de mediana edad como Quintana. Sobre el terreno calcul¨® que el fallecido tendr¨ªa unos 20 a?os.
El levantamiento del cad¨¢ver se produjo a las dos de la madrugada del lunes. Fue trasladado al Instituto Anat¨®mico Forense, en la capital, donde esa misma ma?ana le fue practicada la autopsia. Como los dedos de la v¨ªctima hab¨ªan quedado afectados por el fuego, el laboratorio de Criminal¨ªstica de la Direcci¨®n General de la Guardia Civil tuvo que reconstruir el ¨ªndice de la mano derecha para intentar obtener la huella del fallecido. El proceso de regeneraci¨®n dur¨® 24 horas, seg¨²n el instituto armado.
Radiograf¨ªa dental
La Guardia Civil solicit¨® diversas pruebas a la familia de Quintana para cotejarlas con el cad¨¢ver hallado en El Molar. Entre ellas estaba el ADN y una radiograf¨ªa dental. Los allegados al desaparecido entregaron la radiograf¨ªa la ma?ana del martes, lo que permiti¨® a la forense y a los especialistas de la Guardia Civil a deducir que el cad¨¢ver podr¨ªa pertenecer al ciclista desaparecido. La confirmaci¨®n lleg¨® el mediod¨ªa del mi¨¦rcoles, cuando los agentes de Criminal¨ªstica comprobaron que la necrodactilar regenerada del desconocido coincid¨ªa al 100% con la huella de Quintana guardada en los archivos del DNI.
A partir de ah¨ª, comienza el trabajo de campo de los investigadores del grupo de Homicidios de Tres Cantos. ?stos han empezado a interrogar a los familiares, amigos y a los compa?eros de trabajo de Quintana. ?ste era un consultor de tecnolog¨ªa de la informaci¨®n en la empresa Oracle Ib¨¦rica, en Las Rozas.
Los guardias civiles tambi¨¦n registraron las pertenencias personales del fallecido en su domicilio y est¨¢n pendientes de inspeccionar el ordenador personal de la v¨ªctima, por si puede arrojar alguna luz sobre un posible chantaje.
Los an¨¢lisis del cad¨¢ver han permitido sacar a la luz que el cuerpo fue quemado con gasolina. De ah¨ª que la Guardia Civil tambi¨¦n est¨¦ investigando en las gasolineras pr¨®ximas a Tres Cantos por si alguna persona fue entre la noche del jueves y la tarde del domingo a comprar este combustible con alguna botella o garrafa. Fundamentales ser¨¢n las grabaciones de las c¨¢maras de las estaciones de servicio.
Diversas fuentes de la investigaci¨®n coinciden en la dificultad de reconstruir las ¨²ltimas horas de la vida de Quintana. ?ste llam¨® desde su tel¨¦fono m¨®vil a su esposa, Myriam, sobre las siete de la tarde desde la zona de Soto de Vi?uelas, en Tres Cantos, seg¨²n recogi¨® la antena repetidora de esta zona. A partir de ese momento, nadie sabe qu¨¦ pas¨®.
Otro punto que podr¨ªa aportar bastantes detalles ser¨ªa el hallazgo de la bicicleta. Desde que se produjo la desaparici¨®n del ciclista y trascendi¨® a la prensa, la Guardia Civil ha recibido varias llamadas de personas que dec¨ªan haber encontrado bicicletas de monta?a abandonadas en medio del campo. Una de las que m¨¢s fuerza parece tener es la de una vecina de San Sebasti¨¢n de los Reyes, cuyo hijo se top¨® la tarde del jueves con una bicicleta en un descampado junto a la tienda de muebles Ikea. La mujer acudi¨® al d¨ªa siguiente a la comisar¨ªa de Alcobendas para ponerlo en conocimiento del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa.
Fotos de la bicicleta
Otra llamada similar fue recibida el domingo desde Colmenar Viejo, pero tampoco correspond¨ªa con la que pose¨ªa Quintana. La Guardia Civil tiene fotos de la bicicleta del vecino de Tres Cantos, lo que facilitar¨¢ su reconocimiento certero en caso de que fuera localizada.
Los agentes del instituto armado hallaron la ma?ana del mi¨¦rcoles partes del casco del fallecido en la zona de Soto de Vi?uelas, junto a la estaci¨®n depuradora de aguas residuales de Tres Cantos. Entre ellos estaban la visera y la correa.
La hip¨®tesis del atropello ha quedado en principio descartada ya que el cad¨¢ver no sufre las lesiones habituales de un accidente de este tipo. Tan s¨®lo presenta tres extra?os hematomas sim¨¦tricos y redondos en la zona lumbar, posiblemente causados por la presi¨®n de la v¨ªctima contra alg¨²n saliente.
La venganza parece tomar m¨¢s peso en las investigaciones. El m¨®vil del robo est¨¢ descartado, ya que Quintana s¨®lo llevaba el tel¨¦fono m¨®vil y la bicicleta. Si alguien le hubiese atacado, no se habr¨ªa tomado las molestias de desnudarlo e incinerarlo a 15 kil¨®metros de d¨®nde se le perdi¨® la pista, seg¨²n la Guardia Civil.
Dos cad¨¢veres incinerados en la misma zona
La zona de Soto de Vi?uelas, un enorme bosque de Tres Cantos, se ha convertido en un lugar de mucho trabajo para los investigadores de la Guardia Civil y del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa. Dos cad¨¢veres han sido all¨ª calcinados con una diferencia de un mes y medio. Los especialistas creen que se trata de casos no relacionados, pese a la relativa cercan¨ªa de los hechos.
El primer cad¨¢ver fue localizado el pasado 1 de agosto en la valla de Soto de Vi?uelas, junto al tanatorio de La Paz de Alcobendas. Se trataba de un constructor de Getafe, domiciliado en La Moraleja, que fue localizado por unos ciclistas en un camino vecinal. La v¨ªctima estaba a¨²n en llamas cuando los deportistas dieron la voz de alarma. Estaba vestida. Su veh¨ªculo fue hallado en un restaurante de la autov¨ªa de Burgos (A-1).
El fallecido hab¨ªa llamado a media ma?ana a su esposa y le dijo que fuera preparando algo para comer. Ten¨ªa previsto terminar pronto los negocios que le hab¨ªan llevado hacia la zona norte de la regi¨®n.
El cad¨¢ver del constructor no presentaba signos externos de violencia, pero la autopsia determin¨® que pudo morir por asfixia, tras ser introducido en alg¨²n l¨ªquido, posiblemente agua. De hecho, los investigadores del Grupo V de Homicidios de la Jefatura Superior de Polic¨ªa de Madrid est¨¢n estudiando la vida de este constructor. Quiz¨¢ pudo ser v¨ªctima de un robo, ya que antes de morir hab¨ªa comunicado a su familia que iba a sacar dinero de una oficina bancaria de Alcobendas.
Sin embargo, hay varios puntos discrepantes con el homicidio de Francisco Quintana, ya que en el caso del constructor de Getafe estaba vestido. El ciclista fue localizado a unos 15 kil¨®metros del lugar donde estaba practicando su deporte. No se ha hallado ning¨²n objeto personal, salvo algunas partes del casco protector.
La familia ten¨ªa previsto incinerar a Quintana, pero la forense del caso se ha opuesto a esta medida por si fuera necesario exhumar el cuerpo m¨¢s adelante. Por tanto, ser¨¢ enterrado el pr¨®ximo fin de semana en el tanatorio cementerio de La Paz, en Alcobendas. El d¨ªa exacto depender¨¢ de los permisos que d¨¦ la titular del juzgado n¨²mero 8 de Alcobendas, que instruye el caso.
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