El 8% de los alumnos de ESO reconoce que acosa a sus compa?eros de escuela

Tres de cada cien alumnos entre 12 y 16 a?os sufren acoso escolar, una forma extrema de violencia en el ¨¢mbito educativo. La mayor¨ªa de las v¨ªctimas son chicas (el 60%) y se sienten hostigadas de modo persistente y sistem¨¢tico por sus compa?eros. El 50% cree que la han tomado con ellos y el 25% que los profesores "no hacen nada". Son las conclusiones de una encuesta realizada en el ¨¢mbito nacional a instancias del Centro Reina Sof¨ªa para el estudio de la violencia. El sondeo revela que ocho de cada cien alumnos se reconocen como agresores (el 70% varones). Al margen del acoso, el 15% de los alumnos de esa franja de edad padece alg¨²n tipo epis¨®dico de violencia.

El 95% de las v¨ªctimas de acoso acusa da?os ps¨ªquicos que se manifiestan en un abanico de sentimientos y conductas que oscilan entre el nerviosismo, la tristeza, la soledad y la venganza, y se traducen en un rendimiento escolar inferior al habitual. Este matonismo se desarrolla en espacios privados o poco visibles del entorno escolar, y en las propias aulas en ausencia del profesor, ya que los agresores se amparan en la clandestinidad para atacar. El 45% explica as¨ª el acoso: "la han tomado conmigo". El 90% de las v¨ªctimas, no obstante, no calla: se lo dice al profesor, a un amigo o a sus padres. Una de cada cuatro, asegura, sin embargo, que "los profesores no hacen nada".

El sondeo, realizado por Metra-seis y promovido por el Centro Reina Sof¨ªa para el estudio de la Violencia, con sede en Valencia, es el primero que se realiza en todo el territorio despu¨¦s del impulsado por el Defensor del Pueblo en 2000.

El sondeo se ha realizado sobre una muestra de 800 alumnos de edades comprendidas entre 12 y 16 a?os procedentes de todas las clases sociales (el porcentaje mayor, un 58%, de clase media) y de un amplio espectro de centros. Sus resultados apuntan a que el bullying (acoso escolar) es un problema emergente en la sociedad espa?ola que tiene connotaciones con la violencia dom¨¦stica. Los agresores (ocho de cada 100 estudiantes reconocen que lo son) suelen ser chicos (siete de cada diez) y aseguran que las v¨ªctimas "les provocan". En este sentido, "el acoso escolar tiene un fuerte componente sexista", declara el profesor Jos¨¦ Sanmart¨ªn, director del Centro Reina Sof¨ªa. "Es evidente que la escuela tiene una asignatura pendiente: "educar en la igualdad", sostiene.

"No existe un perfil de v¨ªctimas definido, pero s¨ª aparecen algunas caracter¨ªsticas que no siempre son negativas. En ocasiones, sus mayores habilidades despiertan envidias; en otros casos, son los prejuicios de corte cultural los que influyen en su elecci¨®n. Algunas tienen un car¨¢cter retra¨ªdo, pero no todas", explica Sanmart¨ªn. Por el contrario, "el perfil del agresor es claro: carecen de empat¨ªa para ponerse en el lugar de los dem¨¢s, muestran rasgos hiperactivos e impulsivos, tienen un bajo rendimiento escolar, y un alto porcentaje asegura que le divierten las actividades de alto riesgo". Sanmart¨ªn hizo hincapi¨¦ en que "esta violencia aflora en la escuela, pero sus ra¨ªces est¨¢n en la familia y en la sociedad".

El sondeo revela que las aulas son escenario habitual de otras formas de violencia menos virulentas que el acoso, pero m¨¢s extendidas. 15 de cada 100 estudiantes admite sufrir alg¨²n episodio de violencia emocional (el 80% de los casos) o f¨ªsica (cerca del 51%), aunque es frecuente una combinaci¨®n de ambas. Se desarrolla generalmente en el patio del colegio, lo que permite intervenir al profesor. Las v¨ªctimas de esta violencia son en su mayor¨ªa chicos, al igual que los agresores.

"No hay ley del silencio", dijo Sanmart¨ªn. "El 70% de los testigos s¨ª hace algo, y el 26% habla con el profesor", a?adi¨®. Alejandro Font de Mora, consejero valenciano de Educaci¨®n, abog¨® por dotar de estrategias al profesor y potenciar las tutor¨ªas [El informe completo puede consultarse en www.elpais.es]