Dos veces en la misma piedra
Hace dos a?os aproximadamente, el Gobierno del PP hizo uso del privilegio procesal contemplado en el art¨ªculo 161.2 de la Constituci¨®n para impugnar ante el Tribunal Constitucional la aprobaci¨®n por el Gobierno vasco del Proyecto de Reforma del Estatuto, intentando impedir de esta manera que el proyecto pudiera ser debatido y aprobado en el Parlamento. Posteriormente, una vez que el Tribunal Constitucional hubiera decidido que tal impugnaci¨®n era procesalmente impertinente y que el proyecto de reforma fuera aprobado por el Parlamento vasco, el PP, ya en la oposici¨®n, propuso que el texto aprobado en el Parlamento vasco no se debatiera en el Congreso de los Diputados, sino que se remitiera directamente al Tribunal Constitucional, para que fuera este ¨®rgano constitucional el que adoptara la decisi¨®n sobre el mismo. A lo largo de todo el proceso, el PP fundament¨® su conducta en que, de no actuarse de esa manera, se pon¨ªa en peligro la unidad de Espa?a.
El Proyecto de Reforma del Estatuto de Gernika fue debatido en el pleno del Congreso de los Diputados y fue desactivado pol¨ªticamente de una manera impecablemente democr¨¢tica, sin que la unidad de Espa?a y su integridad territorial sufriera el m¨¢s m¨ªnimo menoscabo.
Pero, como el hombre es el ¨²nico animal que tropieza dos veces en la misma piedra, nos encontramos de nuevo ante la cantinela insufrible de la ruptura de la unidad de Espa?a y de la amenaza respecto de su integridad territorial por parte de la direcci¨®n del PP, como consecuencia de la aprobaci¨®n por el Parlamento de Catalu?a del Proyecto de Reforma del Estatuto de Sau. Y de forma similar a como se hizo en el caso vasco, tambi¨¦n ahora la direcci¨®n del PP ha exigido que no se le d¨¦ al proyecto de reforma catal¨¢n la tramitaci¨®n parlamentaria prevista, sino que se rechace expresamente su ingreso en las Cortes Generales, por entender que es el Tribunal Constitucional el que tiene que pronunciarse en primera instancia sobre el mismo. Y ha empezado a correr el rumor de que los diputados del Grupo Parlamentario Popular pueden ausentarse del debate en el Congreso.
No acabo de entender ad¨®nde piensa llegar la direcci¨®n del PP por esta v¨ªa. Una manifestaci¨®n de voluntad de un Parlamento aut¨®nomo adoptada por casi unanimidad no puede ser rechazada por las Cortes Generales sin tomarla siquiera en consideraci¨®n. La reforma propuesta por el Parlamento de Catalu?a tiene que ser debatida seriamente, esto es, tiene que ser debatida con la finalidad de que se pueda llegar a un acuerdo. Y ello exige dar razones de por qu¨¦ no se acepta la reforma que se propone. Razones que no tienen por qu¨¦ ser de naturaleza exclusivamente constitucional. No basta con que el texto que se propone no sea anticonstitucional. Tiene que ser un buen texto, que dise?e una buena f¨®rmula de gobierno.
La discrepancia con el texto aprobado por el Parlamento de Catalu?a puede ser amplia, pero tiene que ser razonada y tiene que pasar la prueba del examen contradictorio en el seno de la Comisi¨®n Constitucional del Congreso de los Diputados con la delegaci¨®n del Parlamento de Catalu?a. Ning¨²n partido pol¨ªtico puede eximirse de pasar por esa prueba. Se ha respetado hasta el momento de manera escrupulosa el procedimiento previsto en la Constituci¨®n y el Estatuto de Autonom¨ªa de Catalu?a para poner en marcha la reforma de este ¨²ltimo y tiene que seguir siendo respetado. Por todos. Tambi¨¦n por el PP. No puede escudarse en el riesgo de la ruptura de la unidad de Espa?a para eximirse del cumplimiento de una obligaci¨®n.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.