Refino limitado

El Katrina y el Rita han puesto en jaque el sistema de refino de Estados Unidos. Dos semanas despu¨¦s de que el segundo hurac¨¢n tocara tierra, el 87% de la producci¨®n de petr¨®leo estaba suspendida, as¨ª como el 69% de la de gas natural. Los ciclones destruyeron 108 plataformas petroleras y gas¨ªsticas en la costa del Golfo de M¨¦xico, y causaron da?os graves a otras 53. Pero el principal cuello de botella se encuentra en tierra, en las plantas que procesan la materia prima que les llega del mar para convertirla en gasolina.

En Estados Unidos no se construyen nuevas refiner¨ªas desde hace tres d¨¦cadas. De las 325 instalaciones que hab¨ªa en 1981 se ha pasado a 148, 25 de las cuales se encuentran en Tejas. La situaci¨®n puede cambiar si el Senado ratifica la medida aprobada el viernes por el Congreso para construir nuevas plantas de tratamiento de crudo.

La vuelta a la vida de las refiner¨ªa en Tejas, Luisiana y Misisipi est¨¢ siendo lenta y los analistas aseguran que no recuperar¨¢n la normalidad hasta bien entrado el oto?o. En los tres estados afectados por los tifones se concentran 46 plantas -las 25 de Tejas; 17 en Luisiana y 4 en Misisipi-, con una capacidad para producir ocho millones de barriles diarios, sobre un total nacional de 18 millones, seg¨²n la Agencia de Informaci¨®n de la Energ¨ªa (EIA, en sus siglas en ingl¨¦s). Se calcula que las plantas afectadas producen hoy un 20% menos que antes del desastre (3,5 millones de barriles).

La cosa podr¨ªa haber sido peor, se?ala Daniel Rice, gestor del fondo BlackRock Global Resources, aunque advierte de que el da?o "est¨¢ siendo significativo en la estructura de producci¨®n". La industria de refino ya estaba operando al m¨¢ximo de su capacidad antes del azote de los huracanes y cualquier incidente en una de las plantas creaba nerviosismo en el mercado. Por eso, el presidente de EE UU, George W. Bush, no se cansa de repetir que el pa¨ªs "necesita capacidad adicional de refinado" y apoy¨¢ndose en una l¨®gica muy simplista explica que "a m¨¢s suministro, menor presi¨®n en el precio".

"La relaci¨®n entre suministro y demanda es muy fr¨¢gil", apostill¨® Bush, que con su reacci¨®n se hace eco de la preocupaci¨®n de los ciudadanos por la subida del precio de las gasolinas y por las facturas que tendr¨¢n que pagar en invierno para calentar sus hogares. Hace dos a?os, la gasolina sin plomo apenas superaba los 1,5 d¨®lares el gal¨®n (1,24 euros por 3,8 litros). Ahora, se paga a m¨¢s de 3,10 d¨®lares (2,56 euros). Estos precios podr¨ªan cambiar los h¨¢bitos de consumo y disparar la inflaci¨®n.

Uno de los motivos que han argumentado las petroleras para no construir nuevas plantas en las ¨²ltimas d¨¦cadas es que el precio de las gasolinas no daba el margen de beneficios suficiente para financiar nuevos proyectos, muy costosos y que requieren largos plazos de construcci¨®n. La otra excusa que se ha utilizado es la burocracia, que como explic¨® el propio Bush "desanima" a construir nuevas plantas.

Los miembros republicanos del Congreso ya se han movilizado para dise?ar una nueva legislaci¨®n que facilite el proceso. Pero el problema de refino no es ¨²nico de EE UU. El comisario europeo de Energ¨ªa, Andris Piebalgs, urgi¨® tras el azote del Rita a las petroleras a que inviertan m¨¢s en las refiner¨ªas e intenten evitar los cuellos de botella en la producci¨®n de combustible, para ayudar a combatir los altos precios en la manguera. "Es muy importante que las compa?¨ªas del sector se comporten de la manera m¨¢s responsable posible a la vista de las circunstancias", dijo.

La decisi¨®n de la Casa Blanca y de la Agencia Internacional de la Energ¨ªa de movilizar sus reservas estrat¨¦gicas ayuda a contener el alza en el precio del petr¨®leo, pero topa con el obst¨¢culo de las refiner¨ªas. El secretario general de la OPEP, Adnan Shihab-Eldin, se pronuncia en los mismos t¨¦rminos que el comisario y espera que los huracanes sirvan para concienciar al sector de que debe modernizar sus refiner¨ªas.

Es m¨¢s, sugiri¨® que los aumentos de producci¨®n de crudo no sirven de nada sin nuevas refiner¨ªas. Ali Naimi, ministro saud¨ª de petr¨®leo, advierte de que el precio de las gasolinas seguir¨¢ alto mientras no haya nuevas plantas de procesamiento. "Son tiempos turbulentos para el mercado del petr¨®leo porque la infraestructura es demasiado fina y se puede permitir un margen de error menor", remach¨® el saud¨ª.