El Gobierno estudia reconocer a Catalu?a como "entidad nacional"

Como profesor de Derecho Constitucional, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero prefiere el t¨¦rmino "pueblo" al de "naci¨®n". Nadie duda de que Francia, Estados Unidos y Alemania son naciones y, sin embargo, en ninguna de sus constituciones se las define as¨ª. "Nosotros, el pueblo de los Estados Unidos", comienza la Constituci¨®n americana de 1787. "El gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo", dice la Constituci¨®n francesa de 1958.

La Constituci¨®n espa?ola, afirman fuentes de La Moncloa que han hecho un estudio comparado, tiene pocos parangones cuando dice fundamentarse en "la indisoluble unidad de la Naci¨®n espa?ola, patria com¨²n e indivisible de todos los espa?oles".

Aunque hay discrepancias entre los expertos, las fuentes consultadas admiten que la Constituci¨®n es tan contundente en el empleo del t¨¦rmino naci¨®n aplicado a Espa?a que resulta dif¨ªcil hacerlo compatible con su aplicaci¨®n a parte del territorio.

El presidente asegur¨® ayer que tiene "ocho f¨®rmulas distintas" para compatibilizar el sentimiento de la mayor¨ªa de los catalanes de que Catalu?a es una naci¨®n con el sentimiento de la mayor¨ªa de los espa?oles de que no hay m¨¢s naci¨®n que Espa?a.

Zapatero reconoci¨® luego que quiz¨¢ la cifra de ocho sea exagerada, y algunos de sus colaboradores admiten que a¨²n es pronto para tener una soluci¨®n que, en todo caso, debe ser consensuada.

No obstante, entre las f¨®rmulas estudiadas est¨¢ definir a Catalu?a como "pa¨ªs", que es el t¨¦rmino usado habitualmente por los catalanes para referirse a su comunidad y que, seg¨²n el diccionario de la Real Academia, significa "naci¨®n", pero tambi¨¦n "regi¨®n, provincia o territorio". O denominarla "comunidad nacional", f¨®rmula que propuso el presidente del Consejo de Estado, Francisco Rubio Llorente, con un sentido m¨¢s cultural que pol¨ªtico.

La f¨®rmula de Ar¨¢n

Pero la soluci¨®n podr¨ªa estar en la propia propuesta de reforma del Estatuto aprobada por el Parlamento catal¨¢n. El texto remitido al Congreso asegura en su pre¨¢mbulo que "los ciudadanos de Catalu?a y sus instituciones pol¨ªticas reconocen [el Valle de] Ar¨¢n como una realidad nacional con entidad propia". El art¨ªculo 11 del texto recuerda que Ar¨¢n cuenta con un idioma propio, el aran¨¦s u occitano, y con una "singularidad cultural, hist¨®rica y geogr¨¢fica", que se compromete a proteger mediante un "r¨¦gimen jur¨ªdico especial".

Sin embargo, el Estatuto no reconoce al Valle de Ar¨¢n el car¨¢cter de naci¨®n, que reserva para Catalu?a, ni tampoco admite que Catalu?a sea una comunidad plurinacional, algo que s¨ª predica del Estado espa?ol. Es decir, seg¨²n el Estatuto, se puede ser una "realidad nacional con entidad propia", incluso con idioma, sin por ello ser una naci¨®n.