Discriminadas

Mucho se habla de las justas conquistas sociales logradas por la mujer en el ¨²ltimo medio siglo, pero es todav¨ªa enorme la brecha respecto al hombre, especialmente en los pa¨ªses menos desarrollados. As¨ª lo se?ala el ¨²ltimo informe del Fondo de las Naciones Unidas para la Poblaci¨®n (UNFPA), que subraya que la discriminaci¨®n de g¨¦nero no es s¨®lo una grave injusticia, sino una r¨¦mora muy pesada para erradicar la miseria y cumplir los objetivos establecidos por la ONU en 2000 de reducir a la mitad la pobreza en el mundo en 2015. Desgraciadamente, esa meta resulta cada vez m¨¢s dif¨ªcil de alcanzar, como qued¨® patente en la megacumbre pol¨ªtica del mes pasado en Nueva York.

Algunos datos del ¨²ltimo informe del UNFPA son elocuentes. En el mundo hay 500 millones de mujeres analfabetas, frente a 280 millones de hombres. M¨¢s de medio mill¨®n de f¨¦minas, en su casi totalidad pertenecientes a los pa¨ªses menos desarrollados, mueren cada a?o por problemas relacionados con el embarazo, la principal causa de enfermedad y mortalidad entre las que tienen de 15 a 44 a?os. Cerca de la mitad de los 40 millones de personas infectadas con el virus del sida son de sexo femenino. Una de cada tres de ellas es golpeada, forzada a mantener relaciones sexuales o ha padecido abusos. Los casos de maltratos, de los que por desgracia Espa?a registra un ¨ªndice alto, provocan tantas v¨ªctimas como el c¨¢ncer entre las mujeres de 15 a 44 a?os y m¨¢s que los accidentes de tr¨¢fico y la malaria juntos. La situaci¨®n laboral femenina es mucho peor que la masculina, y tambi¨¦n las condiciones salariales (ganan un 23% menos que los hombres en los pa¨ªses ricos y un 27% en los pobres). En definitiva, un largo rosario de discriminaciones que los expertos del UNFPA consideran que deben ser objeto de mayor atenci¨®n para ser eliminadas, especialmente en lo que concierne al derecho a garantizar una buena salud reproductiva, que es clave para el desarrollo.

Los informes de las diversas agencias de Naciones Unidas suelen apabullar por las alarmantes estad¨ªsticas sobre el hambre y la pobreza y las advertencias a los Gobiernos a revisar pol¨ªticas y corregir el rumbo antes de que sea tarde. Casi la mitad de la poblaci¨®n mundial sobrevive con algo m¨¢s de un euro al d¨ªa, pero los pa¨ªses ricos se quedan muy lejos de sus compromisos de incrementar la ayuda al desarrollo y establecer un comercio mundial m¨¢s justo.