Nueva terminal antes de final de a?o

El accidente mortal ha puesto en escena una vieja pol¨¦mica. Mientras que el aeropuerto considera que tiene derecho a existir y a conservar las 85 hect¨¢reas de instalaciones, los municipios est¨¢n convencidos de que su propio crecimiento es leg¨ªtimo. Pese que no hay espacio para los dos, el aeroclub aprob¨® en 2001 un plan director ante "la serie de insuficiencias en sus instalaciones que imposibilitan la gesti¨®n de la demanda". El plan permiti¨® la creaci¨®n de una nueva zona de 19 hangares y un aparcamiento. El verano pasado, Aropuertos Espa?oles y Navegaci¨®n A¨¦rea (AENA), dependiente del Ministerio de Fomento, adjudic¨® por 3,5 millones de euros las obras para construir una nueva terminal y una torre de control que est¨¢ previsto que se acabe a finales de a?o.

Mientras, las gr¨²as se amontonan a poco m¨¢s de un kil¨®metro. Badia no puede crecer y no llega ni al kil¨®metro cuadrado de superficie. Pero sus vecinos, Barber¨¤ y Sant Quirze del Vall¨¨s, a¨²n tienen terreno para construir. Sant Quirze, una poblaci¨®n con poca actividad econ¨®mica y b¨¢sicamente residencial, tiene 14 kil¨®metros cuadrados y 18.000 habitantes. Nueve a?os atr¨¢s, en 1996, su poblaci¨®n apenas superaba los 10.000 habitantes. En 2003 se construyeron 334 viviendas y el a?o anterior 418.

Barber¨¤ tiene 8,3 kil¨®metros cuadrados de superficie y 27.000 habitantes. Su ritmo de crecimiento no es tan intenso, aunque en 2003 se construyeron 244 viviendas y el a?o anterior 256. Los tres alcaldes aseguran que el "irresponsable" es el aeropuerto y le se?alan con dedo acusador porque, a su juicio, se pone en peligro las vidas de sus ciudadanos. El aeroclub contesta que son ellos los irresponsables por dejar construir tan cerca del aeropuerto.

Carles Mart¨ª fue m¨¢s all¨¢ y acus¨® al "Ayuntamiento de inducir a la desobediencia a los promotores". "No s¨®lo por dejar que haya gr¨²as sin el correspondiente permiso", a?ade, "sino tambi¨¦n porque las tendr¨ªan que pintar de rojo y blanco, y ponerles luces de se?alizaci¨®n, y yo veo muy pocas con estas caracter¨ªsticas". "No es sensato", continu¨®, "que construyan a menos de un kil¨®metro de la zona de despegue y aterrizaje".

Mart¨ª ratific¨® que su entidad se querellar¨¢ contra el promotor y el Ayuntamiento e invit¨® a los que hayan comprado un piso "a menos de un kil¨®metro de la zona de despegue y aterrizaje del aeropuerto a que denuncien al constructor y al Ayuntamiento".

Las 25 empresas que operan en el aeropuerto de Sabadell han dirigido una carta a AENA, Aviaci¨®n Civil, la Delegaci¨®n del Gobierno y el Departamento de Interior en la que exigen que se reabra de forma inmediata al aeropuerto y amenazan con demandas de da?os y perjuicios si se desoyen sus requerimientos. Tambi¨¦n van a crear una asociaci¨®n para defender el aeropuerto, ya que en su opini¨®n AENA, que es la propietaria, "por alguna raz¨®n no lo ha hecho".

Por otro lado, respondiendo a las propuestas de traslado de algunas de las actividades a otros aeropuertos, Mart¨ª consider¨® "inviable" trasladarlo a m¨¢s de 70 kil¨®metros de Barcelona. Y a las opciones de la Anoia y el Bages sugeridas anteriormente, propus¨® otra alternativa: "Asfaltar y reabrir los aeropuertos de Calaf y Manresa".

Una de las grandes quejas de los alcaldes y vecinos de las poblaciones cercanas la motivan las escuelas de piloto. Pero, en opini¨®n de Mart¨ªn, los vuelos menos peligrosos son los de los aprendices. "En todos los accidentes los pilotos ten¨ªan una amplia experiencia, no eran alumnos".

Para poder convertirse en piloto se requiere volar 45 horas y pasar en un aula 120 horas. En los vuelos, en el 60% de las ocasiones se va acompa?ado de un tutor. Adem¨¢s, asegura el presidente del aeroclub de Sabadell, las "10 o 15 primeras horas de pr¨¢cticas se dedican a formaci¨®n y el resto de navegaci¨®n y procedimientos de emergencias".

Las inmediaciones del aeropuerto de Sabadell, inaugurado en 1934, han experimentado un gran crecimiento urban¨ªstico en los ¨²ltimos a?os. Los bloques de pisos y las naves industriales se han adue?ado de los alrededores, y las pistas han quedado en medio de un paisaje urbano e industrial.