Jim¨¦nez sigue desterrado

Estudiantes tiene un jugador fantasma. Calienta con la cabeza gacha, sin intensidad, mientras escucha c¨®mo los c¨¢nticos de la grada, ¨¦sas canciones que antes le animaban, se han transformado en desprecio: "Jim¨¦nez pasa la mopa", le ped¨ªa ayer La Demencia, la afici¨®n del Estudiantes, durante el partido que su equipo perdi¨® contra el Akasvayu. Carlos Jim¨¦nez quiere fichar por el Madrid. Y su castigo es el destierro al ¨²ltimo asiento del banquillo, no jugar ni un solo minuto, como ayer o la pasada jornada frente al Bar?a.

Estudiantes vive tiempos de zozobra. Juan Antonio Orenga, el entrenador, ha decidido prescindir de su mejor jugador, de Jim¨¦nez, porque cree que no est¨¢ centrado, que no se entrena bien, que le puede su deseo de fichar por el Madrid. El jugador reconoce que no siempre "puede estar por encima de las circunstancias". Cuando hay tiempo muerto es el ¨²ltimo en unirse al grupo, el m¨¢s alejado de la pizarra del entrenador. Sabe que no va a jugar.

Mientras Jim¨¦nez busca su sitio, su equipo lucha por no hundirse en la tormenta desatada por sus deseos de cambiar de acera. Estudiantes es un equipo confundido. Triste. Juega a la espera de que alguien decida tomar las riendas y mandar. Unos esperan a Su¨¢rez y Sergio Rodr¨ªguez (autores ayer de las acciones m¨¢s espectaculares de su equipo), pero son j¨®venes y su momento todav¨ªa no ha llegado. Otros esperan a Azofra, el mito de Magari?os, pero puede que su momento ya haya pasado. En medio, el equipo s¨®lo ofrece garra, alocados contraataques y pasi¨®n. Actitud. Demasiado poco cuando en frente est¨¢ el Akasvayu Girona, el equipo de las estrellas, un conjunto al que le sobran cent¨ªmetros y mu?ecas precisas, vertiginoso en la transici¨®n, acertado en el triple y con un banquillo que m¨¢s bien parece el armario de una modelo. No tiene fondo.

Al Estudiantes, que ha perdido los cuatro partidos que ha disputado en lo que va de Liga, le faltan a?os en el banquillo.