La insurgencia mata a siete soldados de EE UU en Irak
Varios testigos afirman que un bombardeo estadounidense caus¨® la muerte de 40 civiles
Siete soldados estadounidenses murieron ayer en los alrededores de Bagdad en tres ataques de la insurgencia. Octubre, con 92 muertos, ha sido el peor mes desde enero para las tropas norteamericanas. La violencia se manifiesta en todo el pa¨ªs: en el sur, en Basora, ciudad chi¨ª bajo control brit¨¢nico, un coche bomba caus¨® la muerte de al menos 20 personas. Y varios testigos aseguraron que un bombardeo estadounidense provoc¨® al menos 40 v¨ªctimas civiles.
Cuatro de los soldados perecieron al estallar una bomba al paso de su convoy en la ciudad de Yusufiya, a 30 kil¨®metros al sur de Bagdad, situada en el denominado tri¨¢ngulo de la muerte, una zona agr¨ªcola que se extiende desde Bagdad hasta el inicio de las regiones chi¨ªes del sur. Otros dos militares murieron en un atentado similar cerca de Balad, en el norte de Bagdad. Un s¨¦ptimo falleci¨® en la tarde de ayer en Al Ameria.
El atentado de Basora, en la que perdieron la vida al menos 20 personas, ocurri¨® delante de un nuevo centro comercial en el que la gente hac¨ªa sus compras para la fiesta del final del Ramad¨¢n. Hubo adem¨¢s 45 heridos.
Al oeste de Irak -donde los marines han combatido durante meses a la insurgencia en un intento de bloquear sus rutas de aprovisionamiento desde Siria-, la aviaci¨®n estadounidense lanz¨® ayer una bomba de precisi¨®n contra una vivienda situada en el distrito de Al Beda, en la aldea de Al Obeidi, pr¨®xima a Karabila. Seg¨²n el comunicado norteamericano, en ese ataque pereci¨® un importante jefe operativo de la Al Qaeda en Irak de nacionalidad saud¨ª.
No es ¨¦sa la versi¨®n de los habitantes de Karabila ni de las fuentes hospitalarias. El doctor Ammar al Marsoumi, del hospital de Qaim, la ciudad m¨¢s pr¨®xima a Karabila, explic¨® a Reuters que al menos 40 personas murieron y otras 20 hab¨ªan resultado heridas en el bombardeo, la mayor¨ªa mujeres y ni?os, y que no hab¨ªa muestras de que entre las v¨ªctimas hubiera insurgentes. Otro m¨¦dico, Ahmed al Ani, elev¨® la cifra a 42 muertos. El jefe tribal Muhammad al Karbouli dijo: "Aqu¨ª no hay insurgentes, s¨®lo familias pobres".
Un portavoz militar norteamericano asegur¨® desde Bagdad que el ataque de precisi¨®n estaba dise?ado para evitar da?os colaterales. "Creemos que hemos matado a un jefe terrorista, pero a¨²n no lo podemos confirmar", dijo el coronel David Lapan. Preguntado por la posibilidad de un error, respondi¨®: "La muerte de civiles no ha podido ser verificada y las fuentes hospitalarias mienten a menudo".
Esta guerra de informaciones fue frecuente en los meses previos a la ofensiva contra Faluya en noviembre de 2004. En ese caso, las im¨¢genes de las televisiones ¨¢rabes con reporteros en el lugar de los hechos parec¨ªan confirmar que los errores eran habituales. La informaci¨®n para atacar una vivienda procede de las redes de espionaje local. La zona de Qaim y el valle del ?ufrates, que desciende hacia el sureste desde la frontera siria es, seg¨²n EE UU, la primera v¨ªa de penetraci¨®n en Irak de los voluntarios extranjeros que despu¨¦s hacen detonar sus coches bomba en Bagdad y otras ciudades.
"Los americanos comenzaron a bombardear cerca de Al Beda despu¨¦s de media noche hasta la madrugada", dijo a Reuters un jefe de polic¨ªa que no quiso dar su nombre por propia seguridad. El jefe de polic¨ªa no sab¨ªa el n¨²mero de muertos ni si ¨¦stos eran civiles, pero asegur¨® que el ataque no fue de precisi¨®n; de una sola bomba y nada m¨¢s.
La Comisi¨®n de Ulemas de Irak, la m¨¢s importante instituci¨®n religiosa sun¨ª del pa¨ªs, se apresur¨® ayer a condenar el bombardeo de Al Beda. "Repudiamos el terrorismo que practican las tropas de ocupaci¨®n americanas".
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