Sete, ¨²ltimo fiasco y a Ducati
Gibernau, hundido por verse obligado a abandonar tambi¨¦n en Cheste, se despide de Honda
Sete Gibernau pilotar¨¢ una Ducati la pr¨®xima temporada. As¨ª lo dio a conocer la marca de Bolonia. Lo que era un secreto proclamado a voces se confirm¨® tras la ¨²ltima carrera de la temporada, calamitosa como el curso entero para el piloto espa?ol, de 33 a?os de edad. "La carrera de hoy ejemplifica de manera exacta lo que ha sido esta temporada", explic¨® hundido Gibernau, que hab¨ªa logrado la quinta pole de la temporada en Cheste. "Al t¨¦rmino del warm up, los mec¨¢nicos de Honda Racing Corporation [HRC] me han dicho que el motor perd¨ªa aceite y se ten¨ªa que cambiar", abund¨® incr¨¦dulo el piloto barcelon¨¦s, a¨²n con el forro polar azul de su ya ex patrocinador. "La moto vibraba mucho y entonces, en la tercera vuelta, ha pasado lo que todos hab¨¦is visto", reflexion¨® el espa?ol. La espesa fumata blanca que desprendi¨® el escape de la Honda azul con el n¨²mero 15 no ofrec¨ªa dudas. El motor de la moto, sin estrenar a¨²n, se le rompi¨® a Gibernau, anheloso desde hace ya bastantes pruebas de poner el fin a la temporada m¨¢s dura de su carrera.
En Qatar 2004, Rossi jur¨® vengarse. Sete no ha vuelto a ganar en las siguientes 20 carreras
Con sobrada madurez como piloto y en la mejor forma f¨ªsica de su vida, Gibernau deb¨ªa contar este a?o con el mejor material de Honda, ansiosos como est¨¢n los japoneses por reconquistar el t¨ªtulo, que no catan desde que Rossi les abandon¨® en 2003. Mal comenzaron las cosas para el piloto barcelon¨¦s ya en Jerez. Batall¨® hasta el ¨²ltimo suspiro con Rossi, que en el ¨²ltimo viraje y con una maniobra de dudosa deportividad lo ech¨® del asfalto. En el cuerpo a cuerpo con il dottore siempre gana el mismo: el risue?o y estirado piloto que, tras la carrera de Qatar 2004, donde Sete lo tild¨® de tramposo, jur¨® vengarse. As¨ª ha sido hasta ahora. Han transcurrido 20 carreras desde entonces y Sete no ha ganado nunca m¨¢s.
Si alguna virtud ha levantado siempre todos los elogios, es la destreza que Sete ha demostrado siempre sobre el agua. Tras las ca¨ªdas de Estoril y Donington Park, aqu¨¦lla se puso en seria cuarentena. El mono de cuero de Gibernau se ha arrastrado hasta por cinco circuitos distintos esta temporada: Portugal, Italia, Inglaterra, Jap¨®n y Malaisia. Los calvarios se le acumularon al espa?ol, muy cr¨ªtico con su entorno, incapaz de enderezar el ritmo. Cuando ha podido luchar con Rossi por el triunfo (Montmel¨® o Sachsenring), el resultado final no ha sorprendido a nadie. Adem¨¢s, el factor suerte no se acuerda del espa?ol. El ejemplo m¨¢s claro lo vivi¨® en Brno, donde el dep¨®sito de su Honda RC211V se qued¨® seco cuando mediaba la ¨²ltima vuelta. Tambi¨¦n en Qatar, donde se evidenci¨® que sus relaciones con Marco Melandri, su compa?ero en el equipo Gresini, estaban m¨¢s que deterioradas. La moto de Sete se fue recta a la tierra en el circuito de Losail mientras inexplicablemente batallaba con Melandri.
La ristra de malos resultados cosechados este a?o por el nieto de Paco Bult¨® le han llevado a terminar en s¨¦ptima posici¨®n, con 150 puntos, en un campeonato al que optaba. Rossi se ha anotado 367 puntos.
"Ha llegado el momento de buscar nuevos est¨ªmulos", aboga Gibernau en su primeras palabras como piloto de Ducati. "Afronto esta nueva etapa con mucha determinaci¨®n, convencido de que con Ducati formaremos un conjunto muy s¨®lido que se traducir¨¢ en triunfos". Melandri, su ya ex compa?ero, se adjudic¨® ayer su segunda victoria del a?o por delante de Nicky Hayden y Valentino Rossi.
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