Un pueblo de fuerte car¨¢cter
Las tradiciones de Albaida del Aljarafe deben convivir con los nuevos vecinos llegados con el crecimiento urban¨ªstico
Albaida del Aljarafe naci¨® en uno de los puntos m¨¢s altos de la cornisa sevillana que da apellido al pueblo y creci¨® bajo la tutela de la torre de vigilancia medieval conocida como Mocha o de don Fabrique, aut¨¦ntico s¨ªmbolo de la villa. Hasta hace seis o siete a?os este pueblo, se manten¨ªa pr¨¢cticamente igual que en d¨¦cadas anteriores, pero el estallido de las promociones urban¨ªsticas ha hecho que el municipio haya vivido un considerable aumento de poblaci¨®n en la ¨²ltima d¨¦cada. De los 1.884 habitantes que registraba en 1995 a los 2.222 del ¨²ltimo censo. "Estoy casi seguro de que en tres a?os m¨¢s doblaremos la poblaci¨®n que ten¨ªamos hace una d¨¦cada", afirma Agust¨ªn Jim¨¦nez, arquitecto t¨¦cnico del Ayuntamiento de Albaida.
La dependencia econ¨®mica de Albaida del Aljarafe ha girado siempre en torno a las explotaciones olivareras. Al encontrarse en una zona alta, alejada de las principales arterias de comunicaci¨®n por carretera de la zona (s¨®lo se puede llegar a trav¨¦s de Olivares), la localidad vivi¨® un desarrollo industrial "pr¨¢cticamente nulo", en palabras de Jim¨¦nez. "La gente de aqu¨ª se ha dedicado tradicionalmente a la agricultura y ¨¦sta tambi¨¦n ha cambiado. Ahora, los trabajadores del campo se dedican s¨®lo a la temporada de la aceituna, en su mayor parte", contin¨²a el arquitecto. ?Y cu¨¢l es entonces el principal fil¨®n laboral de la poblaci¨®n activa? Como pasa en municipios vecinos, el rey de la econom¨ªa es el ladrillo. "S¨®lo en Albaida, hay ocho o diez empresas de construcci¨®n", se?ala Agust¨ªn Jim¨¦nez, quien tambi¨¦n recuerda que en este sector se gana bastante m¨¢s dinero que en las duras labores del olivar.
La proliferaci¨®n de nuevas viviendas ha respondido a un aumento de la demanda, no de originarios de Albaida, si no de vecinos de pueblos cercanos -como Olivares, Camas, o la misma Sevilla- que se han acercado hasta all¨ª atra¨ªdos por unas cifras m¨¢s asequibles en el coste de las viviendas. "Estamos hablando de un precio medio de 20 a 22 millones de pesetas. Pero hay que recordar que hace s¨®lo pocos a?os estaban en 10 millones", se?ala el arquitecto. Las nuevos inmuebles est¨¢n siendo ocupados en su mayor¨ªa por parejas j¨®venes "de fuera del pueblo, y por tanto con ideas distintas", dice Jim¨¦nez. Y es que, como ¨¦l recuerda, Albaida tiene una poblaci¨®n con una idiosincrasia muy marcada, en el que las tradiciones y las costumbres del pueblo juegan un papel muy importante. "Dos hermandades religiosas concentran estas tradiciones: La Soledad y La Vera Cruz. Pr¨¢cticamente mueven el pueblo y la gente se debe mucho a ellas", explica Jim¨¦nez. El celo con el que se preservan estas figuras hace temer a algunos que la plena integraci¨®n de los nuevos vecinos no sea del todo f¨¢cil.
El crecimiento de Albaida del Aljarafe, protagonizado en su mayor¨ªa por conjuntos de promociones inmobiliarias de 50 ¨® 60 viviendas pareadas o adosadas, va a estar regido por un PGOU que actualmente se est¨¢ redactando. La ampliaci¨®n del pueblo se ha trasladado a la periferia y sigue una direcci¨®n Suroeste. "Al Norte estamos limitados por la cornisa, que queremos preservar por su alto valor paisaj¨ªstico. Y por el Este, ya estamos pegados, calle con calle con nuestros vecinos de Olivares", explica el arquitecto.
Entre los nuevos proyectos que el consistorio liderado por la alcaldesa Soledad Cabez¨®n (PSOE) contempla est¨¢ la construcci¨®n de un centro de actividades culturales, "que actualmente se encuentra en fase de cimentaci¨®n", apunta Jim¨¦nez; una ampliaci¨®n del consultorio m¨¦dico; la construcci¨®n de un centro cultural y de ocio para la juventud; y la creaci¨®n de un edificio que pueda servir como gimnasio municipal, entre otras funciones.
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