Estrella en declive

El Partido Republicano ha tenido su martes negro con la elecci¨®n de gobernadores en Virginia y Nueva Jersey, batidos por los aspirantes dem¨®cratas, y el anticipo de California, con la derrota sin paliativos de las iniciativas de Arnold Schwarzenegger. El consuelo para Bush es la reelecci¨®n en Nueva York del alcalde Michael Bloomberg. Las votaciones anticipan serias dificultades en las elecciones del a?o pr¨®ximo al Congreso para el partido gobernante, que ahora controla las dos c¨¢maras y se resiente del desplome de la popularidad del presidente.

California muestra cu¨¢nto han cambiado las cosas en poco tiempo para el gobernador Schwarzenegger, puesto hace dos a?os en loor de multitudes al tim¨®n de la octava econom¨ªa del mundo. Arnold ha sido vapuleado por los electores en las propuestas que hab¨ªa sometido a consulta en refer¨¦ndum para enmendar la plana al Parlamento californiano, dominado por los dem¨®cratas, y reformar la vida pol¨ªtica del mayor Estado de la Uni¨®n. Con el agravante de que Schwarzenegger consideraba esta votaci¨®n la plataforma de lanzamiento para su reelecci¨®n el a?o pr¨®ximo.

En un Estado donde la eficacia privada contrasta con la esclerosis y el dispendio p¨²blicos, algunas de las propuestas del gobernador (reducir el gasto, exigir m¨¢s tiempo de prueba a los maestros o fiscalizar el uso de las cuotas sindicales) han chocado con la enemiga frontal de los sindicatos p¨²blicos m¨¢s afectados, que han gastado grandes sumas en propaganda televisiva. Pero el error fundamental de Schwarzenegger ha sido su deslizamiento, en la California con alma dem¨®crata, desde un conservadurismo abierto a la alineaci¨®n con Bush y los fundamentos m¨¢s rancios del republicanismo.

Esta vez no se trataba de "unirse a Arnold" como hace dos a?os. Schwarzenegger, que no ha acabado del todo su viaje de astro de Hollywood a responsable directo del m¨¢s importante Estado de EE UU, ha pedido ahora a los californianos elegir bando. Y en California el bando republicano, el suyo, es mucho menos importante que el sentimiento conjunto de dem¨®cratas e independientes. As¨ª, una consulta convocada para cimentar su poder ha acabado encogi¨¦ndolo.