Eric Clapton resucita el 'blues' de Cream

Ha sido la reaparici¨®n m¨¢s inesperada. Cream funcion¨® de 1966 a 1968 y tuvo fama de grupo conflictivo. Eran tres personalidades fuertes: el baterista Ginger Baker, el bajista Jack Bruce, el guitarrista Eric Clapton. Fue este ¨²ltimo quien ech¨® el cierre y el que ahora les ha reunido. Tras publicar en CD y DVD sus conciertos el pasado mayo en Londres, el grupo arras¨® a finales de octubre en Nueva York. De momento, Cream ha rechazado ofertas para girar.

Durante la mayor parte de su carrera como solista, Clapton pareci¨® querer huir de Cream, cuya especialidad eran las extensas improvisaciones sobre cl¨¢sicos del blues, que ¨¦l recordaba como excesos, y las idiosincr¨¢sicas canciones propias. Pero fue el propio Eric quien propuso reformar el tr¨ªo, que s¨®lo se hab¨ªa juntado para tocar tres temas en 1993, con motivo de su ingreso en el Rock and Roll Hall of Fame. Seg¨²n ¨¦l, "en estos 37 a?os mucha gente me pregunt¨® por Cream. Era casi la cuesti¨®n inevitable. De repente, vi que era posible: a diferencia de tantos grupos, todos estamos vivos y somos compatibles. As¨ª que me dije: ?por qu¨¦ no?".

Jack Bruce asegura que pronto comprobaron que hab¨ªa qu¨ªmica: "Intentamos usar id¨¦nticos instrumentos que entonces y vimos que sonaba falso. Somos los mismos pero con m¨¢s bagaje musical". Ginger Baker no se sorprende: "Eric est¨¢ consagrado al blues, mientras que Jack y yo somos esencialmente m¨²sicos de jazz. Y no hay gran distancia entre el jazz y el blues, al menos como lo tocamos nosotros. Adem¨¢s, nunca dimos saltos por el escenario: no tuvimos que pasar por el gimnasio". Cerraron cuatro fechas para mayo en el Royal Albert Hall londinense. Hubo que acomodar el repertorio: una canci¨®n tan juvenilmente exuberante como I feel free no proced¨ªa; s¨ª se tocaron Badge o Pressed rat and warthog, nunca antes interpretadas en vivo. Clapton lleg¨® a tener dudas: "Aqu¨ª s¨®lo somos tres, lo que supone que debo hacer el doble de trabajo que en un concierto con mi banda. Tambi¨¦n hab¨ªamos olvidado las entradas, las claves para resolver un solo. Pero en los ensayos todo se arregl¨®: hay como un sexto sentido que te avisa de lo que van a hacer los otros dos".

Jugaban, eso s¨ª, en campo propio. Al menos, Clapton, que gustaba de protagonizar largas temporadas en el Royal Albert Hall, cambiando de repertorio y acompa?antes. Sus dos compa?eros han tenido carreras m¨¢s modestas pero, a pesar de que sus caras reflejan los estragos del tiempo, no han perdido poder¨ªo instrumental ni -en el caso de Bruce- cuerdas vocales. De los cuatros d¨ªas de mayo en el recinto londinense, Warner Music ha extra¨ªdo un doble DVD -tambi¨¦n habr¨¢ una edici¨®n en triple vinilo- y un doble CD, ambos con el mismo t¨ªtulo: Cream, Royal Albert Hall, London may 2-3-5-6, 05. Como ellos suelen alardear de que cada tema cambia seg¨²n el d¨ªa, los lanzamientos incluyen entre uno y tres temas extra, presentando versiones dobles aptas para comparaciones. Han pasado la prueba, piensa Clapton.

Les sorprendi¨® ver que una buena parte del p¨²blico era lo bastante joven para no haber nacido cuando Cream se despidieron, a finales de 1968. Tambi¨¦n ha cambiado el perfil social de su p¨²blico: como revelan las c¨¢maras del DVD, lo que era m¨²sica exclusiva de estudiantes y hippies atrae ahora a numerosos famosos de diferentes campos y a profesionales confortables. No es extra?o que los tres conciertos en el Madison Square Garden neoyorquino, celebrados entre el 24 y el 26 de octubre, hayan batido r¨¦cords: 56.151 espectadores y unos ingresos superiores a los 11 millones de d¨®lares.