Eva Lootz traza su ruta art¨ªstica migratoria en una galer¨ªa donostiarra
La creadora presenta una instalaci¨®n sobre la rutas de la esclavitud y el tr¨¢fico sexual
Eva Lootz (Austria, 1940), Premio Nacional de Artes Pl¨¢sticas en 1994, sostiene que su trabajo es sobre todo pl¨¢stico, pero la exposici¨®n que presenta desde ayer en la galer¨ªa Altxerri de San Sebasti¨¢n, ofrece tambi¨¦n abundantes elementos para la reflexi¨®n sobre temas como la emigraci¨®n o el tr¨¢fico sexual. Porque la artista, que exhibe una treintena de dibujos, crea en la sala su singular ruta de Migraciones con una instalaci¨®n.
"Mi obra nunca es discursiva", afirma esta vienesa afincada en Madrid desde los a?os sesenta. "Si quisiera s¨®lo transmitir mensajes escribir¨ªa ensayos", sentencia. "Pero es cierto que quiz¨¢ ¨¦sta sea una de las exposiciones donde m¨¢s expl¨ªcitamente aparece un discurso integrado en la pl¨¢stica ".
Eva Lootz ha partido de su serie de estampas digitales Migraciones para crear, m¨¢s que una instalaci¨®n, una completa escenograf¨ªa con la que el espectador viaja por medio mundo de la mano de distintos flujos migratorios. Sobre mapas procesados el a?o pasado en Calcograf¨ªa Nacional, la artista ha dibujado las rutas de la esclavitud, la emigraci¨®n o el tr¨¢fico sexual con flechas, pinturas de camuflaje o incluso textos que abundan en el tema: "De la miseria y la desesperaci¨®n se nutren los pa¨ªses m¨¢s ricos, que alimentan un flujo interminable de mujeres y ni?os que son cedidos a redes que las compran y las venden a su antojo", escribe por ejemplo.
Pero los mapas son s¨®lo un elemento, porque a Eva Lootz le gusta hacer del espacio una pieza, un espacio "envolvente". Por eso ha dibujado sobre las paredes la silueta de una suela de zapato. Por eso presenta tambi¨¦n ya en el suelo una zapatilla de hierro y plomo y una bolsa, que remiten a los viajes, adem¨¢s de un contenedor agujereado que rellena con arena para representar la idea de p¨¦rdida.
Lootz, que en 2004 dise?¨® una pol¨¦mica iluminaci¨®n navide?a para Madrid, es emigrante pero asegura que no hay nada de autobiogr¨¢fico en la instalaci¨®n que presenta en Altxerri. Si reconoce en cambio alusiones a su pasado en La postguerra, constituida por la imagen de un avi¨®n, un cortin¨®n y una mesa de madera con tres sillas. Ante el asiento de los dos adultos Lootz coloca sendos platos con perdigones; ante el de la peque?a, otro con algodones. Lootz, formada en cinematograf¨ªa, ha llegado a la instalaci¨®n y el arte audiovisual desde la escultura. En Altxerri presenta una treintena de bocetos de ideas para posibles piezas.
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