Ruido

Est¨¢ demostrado que el ruido, sobre todo si es continuo y mantenido, es pernicioso para la estabilidad de la mente de las personas. En los ¨²ltimos tiempos hay demasiado ruido. Yo no pertenezco a ninguna asociaci¨®n contra el ruido, pero tambi¨¦n a m¨ª me aturde, me confunde e incluso termina por acumular algo de agresividad en mi proceder (creo que es un proceso l¨®gico). En los ¨²ltimos tiempos el ruido m¨¢s frecuente es el pol¨ªtico; hab¨ªa un se?or que hac¨ªa mucho ruido diciendo siempre "?v¨¢yase, v¨¢yase...!" cuando quer¨ªa decir "?qu¨ªtate t¨² para ponerme yo!", y lo consigui¨®. A partir de entonces sigui¨® haciendo ruido en su empe?o, "?v¨¢yase, v¨¢yase...!", pero entonces se lo dec¨ªa a los que no ten¨ªan papeles en nuestro pa¨ªs. Ese se?or no lo hac¨ªa con cari?o, era ruido de lo m¨¢s desagradable y la gente se cans¨® y se tuvo que ir. Luego ha seguido haciendo ruido pero lo hace en otro idioma, que a¨²n suena peor.

Desde entonces, ese ruido se hizo uno con el que ahora llaman "ruido de sotanas" que es el desagradable ruido que hacen ahora los obispos y su asociaci¨®n "la Conferencia Episcopal" y se juntaron con otros amigos tambi¨¦n muy ruidosos, los padres cat¨®licos y algunos otros. El problema es que es un ruido muy desagradable el que forman y yo recuerdo que cuando era chico me dec¨ªan suavemente, dulcemente, sin estridencias, que la fe cristina quedaba fundamentada en el amor a Dios y al pr¨®jimo como a uno mismo. No s¨¦ si a la gente le gusta el ruido y se f¨ªa de quien lo hace "por su bien" pero no lo hacen con cari?o, son feos y desagradables. As¨ª, adem¨¢s de turbarnos a todos, no s¨¦ a qui¨¦n quieren convencer.