"Nos confiscaron hasta un burro y una mula"
UGT defiende la decisi¨®n del Congreso de compensarle por la incautaci¨®n de su patrimonio, que incluye m¨¢s de mil inmuebles
"Hay documentos que reflejan que nos confiscaron hasta un burro y una mula", asegura Javier Druet, responsable de Patrimonio de la Uni¨®n General de Trabajadores (UGT), el sindicato fundado por Pablo Iglesias -que constituy¨® tambi¨¦n el partido socialista- en 1888. La UGT explica que, al comienzo de la Guerra Civil, era propietario de m¨¢s de 1.100 inmuebles en toda Espa?a. Tambi¨¦n era titular de m¨¢s de 3.000 cuentas corrientes en bancos y cajas de ahorros, valoradas en 1986 en cerca de 1.500 millones de pesetas (nueve millones de euros). Pero la joya de la corona eran unos edificios situados en la zona de Azca, en Madrid, convertido en el centro financiero de la capital. La UGT valora los solares en unos 242 millones de euros.
El sindicato reconoce que utiliz¨® el derecho sobre su patrimonio para avalar un cr¨¦dito con el ICO
Ahora, el sindicato podr¨¢ ser compensado por los bienes que les requisaron. El pasado jueves, el Congreso de los Diputados aprob¨® un real decreto que permite al Gobierno devolver a los sindicatos UGT y CNT unos 155 millones de euros como compensaci¨®n de los bienes incautados. Trabajo valora en 151,3 millones el patrimonio a devolver a UGT y en 3,7 millones de euros el de CNT.
Entre los bienes confiscados figuran muebles, maquinaria, imprentas y cabeceras de peri¨®dicos y revistas. Uno de estos peri¨®dicos era el Claridad, que dej¨® de imprimirse en marzo de 1939. Sus imprentas fueron requisadas. "En aquellas m¨¢quinas tambi¨¦n se imprim¨ªa El Socialista y hasta hace poco han servido para imprimir las p¨¢ginas del Bolet¨ªn Oficial del Estado (BOE)", recuerdan desde UGT.
El decreto aprobado por el Congreso la semana pasada, sin embargo, ha contado con la oposici¨®n de
Comisiones Obreras (CC OO), organizaci¨®n constituida en los a?os sesenta, que ha criticado el proceso por "oscurantista" y porque considera la medida como una "subvenci¨®n encubierta". El sindicato que lidera Jos¨¦ Mar¨ªa Fidalgo asegura que el Gobierno "no puede devolver bienes que no puede acreditar que fueron incautados". El d¨ªa previo de la aprobaci¨®n de la norma, CC OO present¨® un documento del Ministerio de Trabajo en el que reconoc¨ªa problemas para justificar la incautaci¨®n de los bienes. Fidalgo ha anunciado que emprender¨¢ acciones legales.
La UGT reconoce que utiliz¨® el derecho sobre su patrimonio hist¨®rico, que entonces ya ten¨ªa reconocido, para avalar un cr¨¦dito con el Instituto de Cr¨¦dito Oficial (ICO) de 64,3 millones de euros. El objetivo era hacer frente a la crisis de la cooperativa de viviendas IGS-PSV entre 1993 y 1994. Con este pr¨¦stamo, el sindicato financi¨® la construcci¨®n de 12.000 viviendas que la cooperativa ten¨ªa comprometidas. Actualmente, con los intereses devengados, la deuda ha engordado hasta cerca de 150 millones de euros.
El pr¨®ximo mi¨¦rcoles se produce el vencimiento del cr¨¦dito con el ICO. La UGT deber¨¢ cancelar la deuda o renovarla, como ha ocurrido en m¨¢s de diez ocasiones desde 1995. El PP se opuso a la aprobaci¨®n de la norma porque la vincula al cr¨¦dito de UGT con el ICO. Seg¨²n el portavoz popular, Vicente Mart¨ªnez Pujalte, "las cantidades coinciden sospechosamente".
M¨¢s all¨¢ de las razones esgrimidas por unos y otros, lo cierto es que el Gobierno franquista se incaut¨® de bienes de los sindicatos. Para explicar el fen¨®meno hay que remontarse al 13 de septiembre de 1936, cuando la Junta de Defensa Nacional, el ¨®rgano administrativo creado por los sublevados de la Rep¨²blica, aprob¨® un decreto por el que se proced¨ªa a incautarse de bienes de organizaciones pol¨ªticas y sindicales. Tres a?os m¨¢s tarde, el 9 de febrero de 1939, el Gobierno de Franco requis¨® el patrimonio de las organizaciones y personas que defend¨ªan la legalidad republicana. El instrumento era la Comisi¨®n de Incautaci¨®n de Bienes Sindicales Marxistas, que despojaba de sus bienes a cualquier entidad contraria el r¨¦gimen franquista. Tambi¨¦n se requis¨® todo el fondo documental del sindicato, que ahora descansa entre el archivo de la Guerra Civil de Salamanca y las dependencias del Ministerio de Trabajo.
En 1982, el sindicato crea un archivo para reclamar todos los bienes que le fueron arrebatados: el Archivo Largo Caballero. Cuatro a?os m¨¢s tarde, el Gobierno socialista de Felipe Gonz¨¢lez aprueba una ley para la restituci¨®n del patrimonio hist¨®rico sindical. A partir de esta norma se aprueban cuatro devoluciones: "Una por los socialistas y tres por el Gobierno de Aznar", explican desde UGT. En total se compensan 531 edificios, valorados en 25,7 millones de euros.
Pero la ley aprobada en 1986 presentaba muchas deficiencias. "Es como si te dan un coche que s¨®lo lo puedes conducir con el freno de mano", comparan en UGT. S¨®lo pod¨ªan ser devueltos bienes que figuraran en un registro de incautaci¨®n. Adem¨¢s, no contemplaba una fecha l¨ªmite para reclamar expedientes.
Entre las demandas de UGT figura un edificio de la calle de Eloy Gonzalo, n¨²mero 24, en Madrid. Hoy es el ambulatorio de Chamber¨ª, que fue sede de la mutualidad m¨¦dica y farmac¨¦utica de UGT. "Era uno de los hospitales m¨¢s avanzados de Europa, ten¨ªa los aparatos y el instrumental m¨¢s modernos", recuerdan. Adem¨¢s, "coordinaba unas quince farmacias repartidas por toda la ciudad de Madrid, donde los trabajadores compraban los medicamentos con descuentos".
Otro de los inmuebles estaba situado en la calle de Carranza, 20, un hist¨®rico edificio de cinco plantas, hoy de propiedad privada, cuyas viviendas estaban alquiladas a trabajadores afiliados al sindicato, seg¨²n explican desde UGT. El responsable de UGT recuerda que hace unos diez a?os ese inmueble se valor¨® en 1.000 millones de pesetas (cerca de seis millones de euros).
Una de las reclamaciones de UGT afecta a los bienes que hab¨ªa en el interior de la casa del Pueblo de Madrid, en la calle de Piamonte. El edificio, un antiguo palacio ducal, era la sede donde se domiciliaban casi todas las sociedades y organizaciones obreras. A partir de 1986 se compens¨® al sindicato por el valor del edificio. "Con aquella ley nos devolvieron los ladrillos, pero en su interior hab¨ªa centenares de obras de arte", denuncia Druet. Calculan que albergaba m¨¢s de 30.000 libros. "Era la segunda biblioteca de Madrid, hab¨ªa incunables e incluso una primera edici¨®n del Capital de Karl Marx firmada por ¨¦l", aseguran desde la oficina de Patrimonio.
Dos hect¨¢reas en Azca
Algunos hijos de trabajadores de la ¨¦poca sal¨ªan cada ma?ana en unos autocares, propiedad de UGT, a una escuela que estaba situada en la calle de Orense, hoy centro de la actividad financiera y comercial de la madrile?a zona de Azca.
La Fundaci¨®n Ces¨¢reo del Cerro leg¨® tras su muerte unos solares de 22.000 metros cuadrados en la intersecci¨®n de las calles de Orense y General Per¨®n, en Madrid. En total, cerca de un mill¨®n de pesetas de la ¨¦poca. En aquellos solares, parcelas agr¨ªcolas, estaban las escuelas de formaci¨®n del sindicato. Entre ellas, la escuela de formaci¨®n agraria y la escuela de primera ense?anza, donde j¨®venes de la ¨¦poca acud¨ªan a recibir su educaci¨®n.
Esos solares ocupan actualmente dos manzanas de la zona de Azca. "Ahora hay unos 100.000 metros cuadrados construidos", explica Javier Druet, entre viviendas, oficinas y locales comerciales. Seg¨²n una tasaci¨®n de hace dos a?os, "s¨®lo los solares valdr¨ªan cerca de 41.000 millones de pesetas" (242 millones de euros).
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