Los servicios de salud de Barcelona han asistido a 13.600 cocain¨®manos, 900 en el ¨²ltimo a?o
El consumo de hero¨ªna sigue bajando y la mayor¨ªa de los adictos est¨¢n en tratamiento
Los servicios de salud de Barcelona han asistido a 13.600 cocain¨®manos, de los que siguen tratamiento 1.800, y en los ¨²ltimos 12 meses, se han apuntado a los citados programas 900 adictos m¨¢s. Las cifras las facilitaron ayer la consejera de Salud, Marina Geli, y el alcalde de Barcelona, Joan Clos, para poner de manifiesto el constante aumento del consumo de esa droga, de la que los servicios de salud suelen tener conocimiento cuando se produce una urgencia o el enfermo tiene voluntad de seguir tratamiento. La tendencia es contraria en el consumo de hero¨ªna.
Tanto Clos como Geli insistieron en que esas cifras son s¨®lo un indicador del consumo de coca¨ªna, fiel reflejo de la realidad de que Espa?a es el pa¨ªs con mayor consumo de esta sustancia del mundo, seg¨²n los informes realizados por la ONU.
"Los 900 que han acudido en el ¨²ltimo a?o a los servicios de salud para seguir un tratamiento lo han hecho porque ya tienen problemas graves", subray¨® el alcalde. Y los m¨¢s frecuentes son alteraciones mentales de importancia, como esquizofrenia y trastornos bipolares, que suelen manifestarse producirse al cabo de tres o cuatro a?os de adicci¨®n. No son los ¨²nicos, puesto que las urgencias de los hopitales suelen registrar entradas de personas que han sufrido infartos, brotes psic¨®ticos y accidentes vasocerebrales que son consecuencia directa de la adicci¨®n a la coca¨ªna. "Eso ocurre despu¨¦s de un tiempo en el que el cocain¨®mano se considera indemne", apunt¨® la consejera Geli. A?adi¨® que el tipo de consumidor de coca¨ªna es cada vez m¨¢s diverso, de todas las edades, de todos los niveles socioecon¨®micos y frecuentemente politoxic¨®manos. A los responsables de Salud les preocupa, especialmente, que la coca¨ªna siga teniendo aceptaci¨®n social, que la gran mayor¨ªa de los adictos no recurran a programas de rehabilitaci¨®n y el incremento de patolog¨ªas mentales que desencadena. Adem¨¢s, se est¨¢ produciendo un cambio de h¨¢bito en el consumo de la coca¨ªna, que pasan de ser esnifada a inyectada. En un panorama tan desalentador, la consejera quiso dar un mensaje de esperanza: "Tenemos que decir que, pese a que no hay una sustancia sustitutiva, el tratamiento psiqui¨¢trico y psicol¨®gico se demuestra eficaz".
Esos datos fueron expuestos ayer en una comparecencia conjunta de Clos, Geli y la regidora de Salud del Ayuntamiento, Imma Mayol, que explicaron el Plan de Acci¨®n de Drogodependencias 2006-2008 y los equipamientos que lleva asociados. Este plan tiene el respaldo de los tres grupos del tripartito municipal y tambi¨¦n fue apoyado por Converg¨¨ncia i Uni¨®, mientras que el PP present¨® enmiendas.
En contra de lo que ocurre con la coca¨ªna, el consumo de la hero¨ªna va a la baja, y los heroin¨®manos siguen m¨¢s los tratamientos. De los 7.500 adictos a esta sustancia registrados en Barcelona, m¨¢s de la mitad (4.168) siguen tratamiento continuado, 2.000 de ellos con metadona y el resto con programas libres de drogas.
Can Tunis ya no tiene 'narcosala'
"Los centros de atenci¨®n a los drogodependientes son la soluci¨®n, no el problema". Esa afirmaci¨®n fue repetida en m¨¢s de una ocasi¨®n por la consejera de Salud, Marina Geli. No fue la ¨²nica. La concejal Imma Mayol dio datos: 200 heroin¨®manos que han pasado por la narcosala de Baluard est¨¢n ya en un programa sustitutivo de metadona, lo mismo que uno de cada cinco de los que han acudido a la sala del Vall d'Hebron, algo que todav¨ªa tiene m¨¢s m¨¦rito teniendo en cuenta la presi¨®n vecinal que soportan. Esa unidad de venopunci¨®n y el resto de la atenci¨®n se trasladar¨¢n a la unidad psiqui¨¢trica del hospital. Adem¨¢s del autob¨²s provisional que se instalar¨¢ en Via Fav¨¨ncia, la ciudad tendr¨¢ otra unidad m¨®vil en los puntos en que sea necesario. La que fue anulada hace tres meses fue la de Can Tunis. Sant Mart¨ª-Exiample ser¨¢ el emplazamiento de una nueva narcosala en un futuro y la de Baluard, que ocupa 60 metros cuadrados, se ampliar¨¢ hasta 200 para evitar que sus usuarios tomen el espacio de la plaza de Blanquerna. Adem¨¢s, habr¨¢ otras tres farmacias de intercambio de jeringuillas y se crear¨¢n plazas de albergue para drogodependientes.
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