Un rompecabezas de tecnolog¨ªa punta

El desmantelamiento de la central nuclear de Zorita (llamada oficialmente Jos¨¦ Cabrera en honor del ingeniero que la dise?¨®) tiene dos fases. La primera, que durar¨¢ hasta 2009, es la extracci¨®n del combustible gastado. Actualmente, las 292 barras de combustible se encuentran en la piscina del reactor enfri¨¢ndose. Son residuos de alta actividad que seguir¨¢n emitiendo radiaci¨®n durante decenas de miles de a?os.

El dise?o del desmantelamiento que la empresa p¨²blica de residuos radiactivos, Enresa, ha presentado al Ministerio de Industria prev¨¦ el uso de contenedores de la empresa estadounidense Holtec, una especie de mu?eca rusa con tres contenedores, uno dentro de otro, que empezar¨¢n a fabricarse en Espa?a en abril de 2006.

El contenedor definitivo es el mayor y se encuentra fuera de la central, al aire libre. El menor de los tres (conocido como la c¨¢psula) se introduce en la piscina. All¨ª, un robot lo rellena con las barras de combustible (32 en cada c¨¢psula). Esta operaci¨®n comenzar¨¢ en septiembre de 2006 y durar¨¢ m¨¢s de un a?o y medio. Cuando la c¨¢psula est¨¢ llena, un robot la introduce en el contenedor de transferencia, el segundo de los tres contenedores. Un operario realiza una soldadura en la tapa y una especie de oruga lo saca al exterior de la central. Ya al aire libre, los t¨¦cnicos han colocado el contenedor grande bajo tierra, con la tapa hacia arriba. Se coloca el contenedor intermedio encima y se abre la tapa. As¨ª, en un rompecabezas de tecnolog¨ªa punta, la c¨¢psula con el combustible gastado queda dentro del contenedor definitivo.

Como explica el jefe de desmantelamiento del Consejo de Seguridad Nuclear, Jos¨¦ Mar¨ªa Balmisa, una vez llenos y cerrados, los combustibles se situar¨¢n sobre una losa de hormig¨®n de un metro de alto, 11 metros de ancho y 45 de largo, construida a prueba de terremotos. La losa y las vallas que la rodean se construir¨¢n entre marzo y julio de 2006.

En total, habr¨¢ 12 contenedores con combustible gastado y seis con otro tipo de residuos de la central. Estar¨¢n rodeados por una valla y al aire libre formando un almac¨¦n temporal independiente de residuos radiactivos. La central de Trillo tiene uno con otra tecnolog¨ªa, desde que en 2001 se satur¨® su piscina de combustible.

Enresa busca un ¨²nico lugar para almacenar los residuos de las siete centrales espa?olas, aunque el Ayuntamiento de Almonacid de Zorita no quiere que all¨ª vayan todos los residuos. El Consistorio que finalmente acoja todos los desechos radiactivos, tras un proceso de selecci¨®n con las comunidades aut¨®nomas y los municipios, obtendr¨¢ 18 millones de euros al a?o y un centro de investigaci¨®n sobre la desintegraci¨®n de residuos, seg¨²n el presidente de Enresa, Alejandro Pina.

Una vez construido el almac¨¦n, comenzar¨¢ la descontaminaci¨®n y demolici¨®n de la central. Enresa presentar¨¢ el proyecto de esta segunda fase a principios de 2006 al CSN, para comenzar en 2009 el trabajo de limpieza. En 2015, el terreno volver¨¢ a Uni¨®n Fenosa.