Cinco d¨ªas de reuniones con 6.000 delegados

La cumbre de la Organizaci¨®n Mundial de Comercio (OMC), que arranca hoy hasta el domingo, re¨²ne a m¨¢s de 300 ministros y 6.000 delegados de sus 149 pa¨ªses miembros. Tambi¨¦n unos 2.000 militantes de ONG fueron acreditados por primera vez. Durante los cinco d¨ªas se suceden las reuniones tanto formales como informales, las primeras se celebran en el centro de convenciones de Hong Kong y, las segundas, en los hoteles cercanos durante la noche. A medida que se acerca el ¨²ltimo d¨ªa de la cumbre, las reuniones nocturnas se multiplican y se alargan.

El texto sobre el que se negocia es un borrador de la declaraci¨®n final que fue preparado por la secretar¨ªa general de la OMC el pasado 7 de diciembre. Muchos de los t¨¦rminos pueden llegar a discutirse horas y m¨¢s si el alcance de su significado var¨ªa, aunque sea un ¨¢pice, al traducirlo a alguno de los tres idiomas oficiales de la organizaci¨®n (ingl¨¦s, franc¨¦s y espa?ol). Los acuerdos se adoptan por unanimidad, lo que complica la negociaci¨®n, aunque garantiza el valor del voto de cada miembro.

Durante los debates se dan situaciones ins¨®litas, como la insistencia de la delegaci¨®n b¨²lgara de que se reconozca a su yogur, puesto que tiene unas caracter¨ªsticas ¨²nicas. Bulgaria quiere que cada vez que una gran empresa l¨¢ctea ponga en sus envases la frase "estilo b¨²lgaro", pague por ello. En temas como ¨¦sos se pueden negociar durante d¨ªas.

Cada peque?o detalle es significativo en la OMC. Un acuerdo mal negociado puede suponer para un pa¨ªs la destrucci¨®n de todo un sector, con la consiguiente p¨¦rdida de empleos, recursos econ¨®micos y, sobre todo, votos. El ingrediente pol¨ªtico est¨¢ siempre presente en las negociaciones comerciales, porque para un gobernante el resultado puede suponer su reelecci¨®n o su ca¨ªda.