"El lenguaje a¨¦reo es un elemento dram¨¢tico"
El encargo por Disney de preparar las escenas a¨¦reas del musical de Tarz¨¢n no le cay¨® del cielo. Pich¨®n Baldinu (Buenos Aires, 1965) comenz¨® su andadura en la b¨²squeda de nuevas formas de expresi¨®n teatral hacia el a?o 1984 cuando fund¨® la compa?¨ªa La Organizaci¨®n Negra. Pero es con la creaci¨®n del espect¨¢culo Villa-villa con la compa?¨ªa De la Guarda como logra reconocimiento dentro y fuera de su pa¨ªs, Argentina.
El director ha hecho una parada en Madrid para promover el estreno de su espect¨¢culo, que arranc¨® en Valencia y terminar¨¢ en Sevilla (del 24 de enero al 5 de febrero). Villa-villa, un espect¨¢culo a¨¦reo y con m¨²sica y percusi¨®n en directo, que rompe con los esquemas del panorama esc¨¦nico espa?ol y que ha viajado por m¨¢s de 20 pa¨ªses. Llega ahora a Madrid, donde permanecer¨¢ hasta el 8 de enero. El escenario est¨¢ en una carpa con capacidad para 900 personas, ubicada en La Muralla ?rabe de la Cuesta de la Vega. (Entradas, 29 euros, en www.ticktackticket.com 902 15 00 25, www.elcorteingles.es, 902 40 02 22).
Pregunta. Teatro sin texto, circo sin leones, danza sin cisnes... ?Qu¨¦ hace exactamente De la Guarda?
Respuesta. Hace un espect¨¢culo en el que el objetivo es llegar al p¨²blico de una forma visceral, que busca que el espectador participe a trav¨¦s de las emociones m¨¢s que del intelecto.
P. En 1904 los espectadores londinenses del Duque of York quedaron fascinados con una obra donde gracias a un aparato volador una actriz vestida de ni?o volaba por la escena del teatro. Casi 100 a?os despu¨¦s su espect¨¢culo se estrena con gran ¨¦xito en Londres ?Los ingleses pensaron que Peter Pan hab¨ªa vuelto?
R. En Londres la obra fue tomada muy en serio. Era un p¨²blico joven, pero muy maduro desde el punto de vista teatral, y ven¨ªa con ganas de jugar, m¨¢s bien pensando que eran ellos Peter Pan. El ¨¦xito est¨¢ en que es un espect¨¢culo que impacta desde un componente muy festivo.
P. Cuando la compa?¨ªa lleg¨® a Nueva York las cr¨ªticas destacaban la asistencia de un p¨²blico plural, desde adolescentes hasta cincuentones.
R. Lo de Nueva York fue una rareza. No es el espectador de teatro de un pa¨ªs europeo sino un p¨²blico de mercado, y nosotros rompimos con las reglas de ese mercado que decid¨ªa y marcaba las tendencias. Hubo cr¨ªticas encontradas y sin embargo nos mantuvimos seis a?os y medio con gran ¨¦xito.
P. ?Y qu¨¦ responde ante cr¨ªticas como la del peri¨®dico The London Guardian: "Tan bueno como tener sexo"?
R. En Londres la gente interpret¨® el mensaje desde una visi¨®n er¨®tica, que tampoco es eso.
P. ?La obra habla de amor?
R. Hablamos de muchos temas. En el montaje encuentras ecos de romanticismo, tambi¨¦n ficci¨®n, poes¨ªa, caos... La intenci¨®n es llevar al p¨²blico de la mano por distintos estados de ¨¢nimos. No es que sea un espect¨¢culo sin argumento, como se ha dicho. Nos propusimos desde el principio no determinar el gui¨®n, no definir una historia lineal sino mantener el concepto abstracto de la obra.
P. ?C¨®mo ha reaccionado el p¨²blico espa?ol?
R. Muy parecido al argentino: gente euf¨®rica, que aprovecha cada gui?o de los actores. Cuando un montaje dialoga con el espectador se rompe cualquier barrera cultural, se establece un lenguaje universal.
P. Entonces, ?usted rompe con el refr¨¢n de que nadie es profeta en su tierra?
R. Al principio en Argentina no fuimos considerados como una compa?¨ªa seria. Fue a partir de Londres cuando empezaron a respetarnos.
P. ?Qu¨¦ supone estar ahora dentro de Broadway con el encargo por Disney para el musical de Tarz¨¢n?
R. Es una gran oportunidad poder trabajar con artistas como Phil Collins y Tom Schumacher. Es un desaf¨ªo encajar dentro de un proyecto tan grande.
P. ?C¨®mo se digieren las comparaciones con otras compa?¨ªas que trabajan tambi¨¦n desde un lenguaje experimental?
R. Al principio mal. En Argentina nos comparaban con la Fura dels Baus, que era el referente en el ¨¢mbito internacional. Aunque en la esencia tenemos el mismo objetivo, tocar el alma del espectador, nosotros lo que m¨¢s hemos desarrollado es el lenguaje a¨¦reo.
P. ?Pero este lenguaje tendr¨¢ sus limitaciones?
R. La limitaci¨®n no es el lenguaje a¨¦reo, es el teatral. El lenguaje a¨¦reo es un elemento dram¨¢tico.
P. Villa-villa encandila o no gusta nada. ?Son buenos los extremos?
R. Para la vida los extremos nunca son buenos. Ahora bien, no creo que Villa-villa sea una obra que se ame o se odie. Pienso m¨¢s bien que es un espect¨¢culo que no deja indiferente a nadie.
P. ?Y usted, se parece m¨¢s al personaje de Tarz¨¢n o a Peter Pan?
R. Desde peque?o me identifiqu¨¦ siempre con Tarz¨¢n porque tiene una historia muy humana. Es un h¨¦roe con poderes naturales y que tiene que ver mucho con la actualidad, con la raza. Es un tipo salvado por otra especie, un ejemplo que sirve frente a los conflictos de hoy: la inmigraci¨®n, las diferentes religiones, las distintas razas, que nos separan como si fu¨¦ramos animales.
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