La justicia italiana investiga a Fazio por uso de informaci¨®n privilegiada
El gobernador del Banco de Italia habr¨ªa favorecido a su amigo Fiorani, que sigue en prisi¨®n
La Fiscal¨ªa de Mil¨¢n investiga al gobernador del Banco de Italia, Antonio Fazio, por un supuesto delito de uso de informaci¨®n privilegiada. Fazio fue inscrito en el registro de investigados ya en agosto pasado, pero la noticia se hizo p¨²blica ayer y coloc¨® en una situaci¨®n desesperada al m¨¢ximo responsable del sistema financiero italiano. En medios pol¨ªticos y bancarios se consideraba que la dimisi¨®n del gobernador era cuesti¨®n de pocos d¨ªas. El ministro de Econom¨ªa, Giulio Tremonti, exigi¨® ayer que Fazio deje el cargo. El presidente del Gobierno, Silvio Berlusconi, neg¨® que la oleada de corrupci¨®n aflorada esta semana supusiera una reedici¨®n de las convulsiones de 1992 y 1993.
Fazio ya fue interrogado meses atr¨¢s por un juez romano por un supuesto abuso de cargo p¨²blico, a ra¨ªz de su autorizaci¨®n de la oferta p¨²blica de adquisici¨®n (OPA) de Banca Popolare Italiana sobre Antonveneta, concedida pese a la opini¨®n contraria de los principales consejeros de la entidad. Pero aquello era una cuesti¨®n menor. La hip¨®tesis de delito manejada por los fiscales milaneses comportaba, en cambio, una definitiva quiebra de la credibilidad del gobernador, muy disminuida desde que en verano se difundieron grabaciones de sus cordial¨ªsimas charlas telef¨®nicas con el entonces consejero delegado de Banca Popolare, Gianpiero Fiorani.
A partir de las declaraciones efectuadas por Fiorani, detenido el martes, la Guardia de Finanzas estableci¨® que en 2002 Fazio mantuvo informados al propio Fiorani y a otros amigos sobre los t¨¦rminos de una OPA que Barilla, la mayor sociedad alimentaria italiana, preparaba para hacerse con el control de la sociedad alemana Kamps. Gracias a esas informaciones, desconocidas por el mercado, Fiorani y los dem¨¢s se enriquecieron especulando en Bolsa.
El gobernador emiti¨® un comunicado a trav¨¦s del servicio de prensa del Banco de Italia para insistir en su inocencia. Fazio afirm¨® "con absoluta seguridad haber siempre actuado con respeto a la ley y tener la conciencia absolutamente tranquila".
Posible dimisi¨®n
Fazio, segu¨ªa el comunicado, "ha sabido por los peri¨®dicos de su inscripci¨®n en el registro de investigados por parte de la Fiscal¨ªa de Mil¨¢n. No disponiendo de otras fuentes de informaci¨®n y no habiendo recibido comunicaci¨®n oficial, no puede ni confirmar ni desmentir la noticia".
El presidente del Gobierno, Silvio Berlusconi, anunci¨® que el martes se celebrar¨ªa un Consejo de Ministros extraordinario para estudiar la crisis del Banco de Italia y para reformar la instituci¨®n, estableciendo un mandato de cinco a?os para el gobernador y unos criterios m¨¢s transparentes para la elecci¨®n del mismo. En la actualidad, el cargo es vitalicio y su ocupante no puede ser destituido ni por el Gobierno ni por el Parlamento. En medios cercanos al Gobierno se cre¨ªa plausible que Fazio presentara su renuncia inmediatamente despu¨¦s de la reuni¨®n ministerial del martes.
Berlusconi, que participaba en una cumbre de la Uni¨®n Europea, coment¨® que el temporal desatado en el sistema financiero no era comparable con el de Tangent¨®polis y Manos Limpias, que entre 1992 y 1993 devast¨® el paisaje pol¨ªtico italiano, acab¨® con la Democracia Cristiana y con el Partido Socialista y hundi¨® la Primera Rep¨²blica. Berlusconi, sin embargo, no fue del todo rotundo: "Creo que las dos situaciones no son comparables, absolutamente no", dijo. Pero agreg¨® acto seguido: "Al menos por lo que s¨¦. Si luego se descubren cosas que ignoro...".
Fracaso de la pol¨ªtica
El ministro de Econom¨ªa, Giulio Tremonti, que en verano de 2004 se vio obligado a dimitir por sus enfrentamientos con Fazio y que en abril recuper¨® el cargo, fue muy duro con su viejo enemigo: "O Fazio da un paso atr¨¢s, o el Gobierno da un paso adelante. Ya basta con esta situaci¨®n". La oposici¨®n reiter¨®, en bloque, la exigencia de que el gobernador renunciara por fin y pusiera t¨¦rmino a "una situaci¨®n terriblemente perjudicial para la credibilidad de Italia en el extranjero", en palabras de Romano Prodi.
El descubrimiento de un fraude masivo en Banca Popolare, una entidad protegida por Fazio, que esperaba convertirla en la pieza central de una profunda reorganizaci¨®n del sistema bancario, y la cotidiana aparici¨®n de nuevos v¨ªnculos entre Popolare, su ex consejero delegado Fiorani, el propio Fazio y un amplio grupo de nuevos magnates surgidos de las privatizaciones y la especulaci¨®n inmobiliaria, hac¨ªa temer nuevos coletazos en los pr¨®ximos d¨ªas. La OPA de Unipol sobre Banca Nazionale del Lavoro, una entidad codiciada tambi¨¦n por el espa?ol BBVA, se daba en cualquier caso por encallada.
Giuliano Amato, ex presidente del Gobierno de perfil tecnocr¨¢tico, declar¨® que los acontecimientos demostraban sobre todo "un fracaso de la pol¨ªtica y de los mecanismos de control".
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