Sam Mendes se adentra en el cine b¨¦lico

Sam Mendes (Reading, Reino Unido, 1965) nunca ha estado en una guerra. "Pero puedo garantizar que ninguna es como la gente se la imagina". Jarhead, su tercer filme, basado en el libro hom¨®nimo escrito por el marine Anthony Swofford, se estrena en Espa?a tras haber provocado una amplia pol¨¦mica en EE UU por lo que algunos han definido como una pel¨ªcula "demasiado as¨¦ptica".

Protagonizada por Jake Gyllenhaal, Peter Sarsgaard, Chris Cooper y Jamie Foxx, entre otros, aborda la primera guerra del Golfo (1991) desde la experiencia personal de Swofford, quien relata su vida en el frente con una mezcla de surrealismo e iron¨ªa. Aquella guerra fue muy particular ya que, despu¨¦s de meses de entrenamiento y esperas interminables para las tropas, se resolvi¨® primordialmente desde el aire, y el m¨¢s de medio mill¨®n de soldados como Swofford que Estados Unidos concentr¨® en la zona para liberar Kuwait de la invasi¨®n iraqu¨ª no tuvieron siquiera que disparar sus rifles. Por mucho que pueda sorprender, la imposibilidad de liberar apretando el gatillo la testosterona acumulada durante meses les transform¨® en seres frustrados y pat¨¦ticos completamente alejados de la imagen de h¨¦roes que se suele ofrecer de ellos en los filmes b¨¦licos. "Lo que el resto del mundo vio de la primera guerra del Golfo fueron esas im¨¢genes limpias de bombas que atravesaban el aire en nuestros televisores. Pero la otra perspectiva, la de los soldados en el desierto, nunca la conocimos, y mucho menos de la forma en que la presenta Swofford", explica Mendes en un encuentro con la prensa en Nueva York.

Ante la insistencia de los periodistas por saber por qu¨¦ no hab¨ªa aprovechado Jarhead, con un presupuesto de 70 millones de d¨®lares, para reflexionar o incluso criticar la actual guerra de Irak, Mendes se defiende: "He querido evitar el mensaje pol¨ªtico expl¨ªcito, porque si no, esta pel¨ªcula caducar¨ªa a los seis meses. Hay que entender que se trata de dos guerras diferentes y que mi intenci¨®n era ser fiel a lo ocurrido hace 15 a?os, pero sobre todo a la experiencia relatada por Swofford, porque esta pel¨ªcula de lo que habla es de los soldados que van a las guerras".

A sus 40 a?os, con una larga carrera teatral a sus espaldas, casado con la actriz Kate Winslet y padre de un hijo, Mendes nunca se hab¨ªa planteado hacer una pel¨ªcula b¨¦lica. Fue la productora Lucy Fisher quien pens¨® en ¨¦l. "Sus t¨ªtulos anteriores, American Beauty (ganadora de cinco oscars) y Camino a la perdici¨®n (ganadora de un Oscar), ten¨ªan una est¨¦tica y un planteamiento muy especial, y para dirigir esta pel¨ªcula hab¨ªa que buscar a alguien poco com¨²n. Adem¨¢s, que Mendes no fuera estadounidense lo hac¨ªa a¨²n m¨¢s interesante para hablar de aquel conflicto", declar¨® Fisher a este diario.

El director acept¨® el reto en cuanto se ley¨® el best seller de Swofford. "Lo que me gust¨® es que era una guerra vista desde el prisma de una persona muy concreta: alguien que est¨¢ intentando descubrir qui¨¦n es. Era un libro ¨²nico, sobre una guerra ¨²nica, y eso abr¨ªa la posibilidad de hacer una pel¨ªcula ¨²nica", asegura Mendes.

A juzgar por la cantidad de veces que cita los cl¨¢sicos Apocalipsis Now y La chaqueta met¨¢lica, se dir¨ªa que el cineasta aspiraba con Jarhead a entrar en ese restringido club de cineastas que han hecho de la guerra un arte ¨²nico dentro del g¨¦nero. "No me quiero comparar con ellos, en absoluto. Simplemente me han servido de inspiraci¨®n, y adem¨¢s, al enfrentarme a Jarhead, me percat¨¦ de que hasta para los propios marines, las ¨²nicas referencias que se tienen respecto a guerras anteriores vienen del cine. Si entendemos y recordamos Vietnam es gracias a aquellos t¨ªtulos, as¨ª que los cineastas tenemos una gran responsabilidad hist¨®rica. Por eso he intentado ser muy cuidadoso con c¨®mo contaba esta historia", afirma.

Si hay algo en lo que todos los cr¨ªticos estadounidenses han coincidido es en alabar a los actores de Jarhead, en especial a su protagonista, Jake Gyllenhaal, que interpreta a Swofford y que funciona como hilo conductor de la pel¨ªcula. La banda sonora tampoco tiene desperdicio: Mendes ha querido dejar su huella en el cine b¨¦lico llevando por fin las guerras de los noventa a los sonidos de los noventa, y para ello ha contado con el apoyo de la mism¨ªsima Courtney Love, que por primera vez ha permitido que un tema de Nirvana, Something in the way, aparezca en una pel¨ªcula. "Supongo que tuve suerte: ella necesitaba dinero y yo la canci¨®n", afirma Mendes.