Esperando a la nueva televisi¨®n
El Taller de Audiovisuales de la Universitat de Val¨¨ncia se prepara para el nuevo espacio digital
El Taller de Audiovisuales de la Universitat de Val¨¨ncia lleva funcionando algo m¨¢s de una d¨¦cada, pero fue el a?o pasado cuando adquiri¨® cierta notoriedad social. El motivo se llama Del roig al blau. Un documental -el ¨²nico documental- que se sumerge en las agitadas aguas de la Transici¨®n democr¨¢tica valenciana y del conflicto ling¨¹¨ªstico, que naci¨® entonces y permanece abierto 30 a?os despu¨¦s. La idea era mantener Del roig al blau dentro de los l¨ªmites de la universidad. Llegado un momento, sin embargo, la obra dirigida por Lloren? Soler tom¨® su propio camino, alcanz¨® las salas comerciales y all¨ª se mantiene.
El documental tuvo una repercusi¨®n importante pero a Miquel Franc¨¦s, director del Taller de Audiovisuales, le sigue pareciendo que deber¨ªan haberlo hecho otros. Si existieran. "Llenamos un agujero que ninguna productora llena", entre otras cosas, opina Soler, "porque se arruinar¨ªa".
Del roig al blau es el m¨¢s conocido, pero no es el ¨²nico documental que el Taller ha realizado. Est¨¢ a punto de presentarse, por ejemplo, Piezas o una parte de mi ser. Una obra dirigida por presos de la c¨¢rcel de Picassent en la que los reclusos "reflexionan acerca de sus sentimientos, experiencias y necesidades dentro de un centro penitenciario".
?Qu¨¦ es exactamente el Taller de Audiovisuales? Un ¨®rgano complejo que tiene varias caras. La primera es la docente. El Taller se encarga de la parte pr¨¢ctica de las licenciaturas de Periodismo y Comunicaci¨®n Audiovisual, e imparte formaci¨®n no reglada (m¨¢ster, diplomas y cursos del Servicio Valenciano de Formaci¨®n y Empleo). "Lo que hace que los cuatro estudios que tenemos est¨¦n ocupados durante todo el a?o", dice su director.
Los estudios se encuentran en la planta baja del Aulario V, campus de Blasco Ib¨¢?ez. Un edificio muy socorrido donde se imparten tambi¨¦n clases de Filosof¨ªa y Educaci¨®n Especial. A la parte de administrativa, en el primer piso, se accede por un pasillo en el que se amontonan las cajas. Un problema de espacio que afecta a otras ¨¢reas de la Universitat de Val¨¨ncia, y que Soler espera ver solucionado en dos a?os. Para entonces deber¨ªa estar terminada la nueva sede, que se ubicar¨¢, como el Instituto de Tr¨¢fico y Seguridad Vial, en la calle Serpis de Valencia, cerca del campus de Tarongers.
El Taller se encarga de cubrir los actos institucionales de la universidad. Emite en directo -a trav¨¦s de Internet- y graba cada apertura del curso, cada honoris causa y cualquier otro acontecimiento destacado. Luego los edita y los pone en su web, a la que se accede a trav¨¦s de la de la universidad (www.uv.es). Se dedica tambi¨¦n a crear productos para publicitar a la Universitat de Val¨¨ncia en el exterior. En diciembre, present¨® los v¨ªdeos institucionales de los institutos de F¨ªsica Corpuscular; Ciencia de los Materiales; Rob¨®tica y del de Biodiversidad y Biolog¨ªa Evolutiva.
Los alumnos aprenden en el Taller a montar un cortometraje y a hacer fotograf¨ªas. En sus instalaciones se ofrece formaci¨®n permanente a los profesores de otras ¨¢reas, se dise?an productos web y, como buen servicio universitario, se desarrollan proyectos de investigaci¨®n. Junto a varios departamentos, el Taller ha presentado una propuesta de posgrado oficial orientado al "desarrollo de contenidos y formatos para las nuevas rejillas de informaci¨®n".
Soler considera que en poco tiempo la televisi¨®n cambiar¨¢ por completo. Se ver¨¢ cada vez m¨¢s a trav¨¦s del m¨®vil y del ordenador, se extender¨¢ la Televisi¨®n Digital Terrestre, la elecci¨®n de la programaci¨®n a la carta. Habr¨¢ una multiplicaci¨®n de la oferta y los productos que alcancen un 12% de audiencia ser¨¢n considerados un ¨¦xito. "Todo ese nuevo espacio digital necesita contenidos", dice Soler, "la cuesti¨®n es averiguar cu¨¢les".
Contestar a esa pregunta, opina Soler, ser¨¢ una de los objetivos de los servicios audiovisuales universitarios. "No se trata de caf¨¦ para todos, sino de invertir en talento, crear ideas, experimentar productos y canales y estudiar el flujo del mercado: qui¨¦n consume la televisi¨®n; y qu¨¦ opina de ella; qui¨¦n la paga; y c¨®mo se articula en ese contexto la vocaci¨®n p¨²blica...". Y a?ade: "El objetivo es acabar haciendo I+D+i; Si producimos una sit com (serie de televisi¨®n) despu¨¦s se vender¨¢, como se hace con la patente de un invento en la Polit¨¦cnica. Las Ciencias Sociales tambi¨¦n hacen I+D+i".
Las Ciencias Sociales, y en especial un ¨¢rea tan relacionada con las nuevas tecnolog¨ªas, no son ajenas al creciente inter¨¦s acad¨¦mico por potenciar la cooperaci¨®n universidad empresa. Conociendo cu¨¢l es el papel de cada una -evitando, por ejemplo convertirse en un puro taller de fabricaci¨®n-, Soler cree que la universidad y los estudiantes tienen mucho que ganar, entre otras cosas porque vivir del presupuesto ordinario, en seg¨²n qu¨¦ campos de investigaci¨®n, equivale a "morirse de hambre".
El mismo esquema funciona para la relaci¨®n con la Administraci¨®n. Soler pone el ejemplo de Men¨² de genes, un documental realizado por el Taller de Audiovisuales en 2002 que analiza, en tono divulgativo, los alimentos transg¨¦nicos, y que fue distribuido en los centros escolares.
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