Charlie no hace surf

La recientemente estrenada Los amos de Dogtown dio a los cin¨¦filos ne¨®fitos del surf la oportunidad de comprobar, adem¨¢s de la innegable belleza de sus im¨¢genes, c¨®mo sus practicantes se consideran integrantes de una familia com¨²n y part¨ªcipes, m¨¢s que de una modalidad deportiva, de un estilo de vida. El documental El club de las olas insiste en esa teor¨ªa a trav¨¦s de numerosas declaraciones de diversos mitos, campeones de la especialidad, periodistas deportivos y aficionados de base.

El director Dana Brown ha viajado por todo el mundo en busca de los para¨ªsos del surf, de la gran ola, de la mejor declaraci¨®n y de la historia real m¨¢s impactante, aunque luego ha montado su material de una forma un tanto monocorde: declaraci¨®n a c¨¢mara, imagen espectacular, off del narrador y vuelta a empezar, con algunos encadenados musicales.

Eso s¨ª, la bell¨ªsima fotograf¨ªa y la incontestable plasticidad de la mayor¨ªa de las im¨¢genes otorgan a su pel¨ªcula un valor que los fan¨¢ticos del surf sabr¨¢n apreciar a la perfecci¨®n.

Los inexpertos, los que s¨®lo est¨¦n familiarizados con la tabla de planchar y con la m¨ªtica frase de Apocalypse now "Charlie no hace surf", se quedar¨¢n fuera pasada la fase de sorpresa, cuando las primeras e impactantes tomas, que dejan al espectador boquiabierto, se hagan m¨¢s reiterativas que novedosas.