Un ladr¨®n erecto
En el programa Gran V¨ªa de la Cadena SER Toni Garrido -tambi¨¦n brillante reportero en el programa televisivo Caiga Quien Caiga- comenta la noticia de que un presunto ladr¨®n, de unos 40 a?os, ha sido detenido por la Guardia Civil. Seg¨²n la Benem¨¦rita, este ciudadano asaltaba chal¨¦s de El Escorial, Galapagar y Villalba que sus propietarios habitaban en vacaciones o en los fines de semana. En consecuencia, de lunes a viernes estos chal¨¦s asaltados del noroeste de la Comunidad estaban deshabitados y el presunto ladr¨®n se instalaba en ellos con varios fines. Ateni¨¦ndose a las leyes sagradas del robo, el fin primordial de su visita era el desvalijamiento de la vivienda. En consecuencia, este ciudadano sustra¨ªa en primer lugar las joyas y otros objetos de valor. Tras cumplir su jornada laboral, cuyo horario, seg¨²n la Guardia Civil, comenzaba al rayar el alba, este trabajador por cuenta propia cumpl¨ªa con el deber tambi¨¦n sagrado de alimentarse. En consecuencia, se dirig¨ªa a la nevera de la casa, de la que ¨¦l ya era hu¨¦sped, y se cepillaba la comida que hab¨ªan dejado los propietarios. Y como es verdad cient¨ªfica, ya constatada por Petronio en el cuento de la matrona de ?feso de su Satiric¨®n, que la comida y la bebida despiertan otros apetitos, este ciudadano, tras comer y beber, se animaba mucho. Cuando la animaci¨®n se desborda, no es dif¨ªcil acordarse de esa sentencia b¨ªblica que dice que no es bueno que el hombre est¨¦ solo y que, por tanto, necesita a su lado o, al menos, al otro lado del hilo telef¨®nico, a alguien que le alegre la vida. Pero, como el presunto ladr¨®n iba a trabajar solo, para paliar la tristeza de que aquella noche la iba a pasar en el chal¨¦ solo -el ladr¨®n se quedaba una noche a dormir en la vivienda asaltada-, recurr¨ªa al tel¨¦fono -pero no al m¨®vil propio, claro, sino al tel¨¦fono fijo del chal¨¦- y hablaba con las animadas voces de las telefonistas de las l¨ªneas er¨®ticas. Este detalle revela hasta qu¨¦ punto, en ocasiones, es falso el verso "el tel¨¦fono es muy fr¨ªo..." de una canci¨®n de Miguel R¨ªos. Es cierto que el tel¨¦fono puede ser muy fr¨ªo -en realidad, para hablar con exactitud, el verso deber¨ªa haber dicho "el tel¨¦fono es muy caro..." y, por tanto, glacial, salvo, claro, para el usuario que utiliza un tel¨¦fono asaltado- pero la culpa es siempre de quien hace la llamada: las l¨ªneas er¨®ticas garantizan a cualquier usuario una conversaci¨®n telef¨®nica caliente. El ladr¨®n lig¨® mucho por tel¨¦fono: hizo 300 llamadas, dej¨® en total un pufo de 13.000 euros y, a un propietario especialmente desafortunado, le dej¨® un recuerdito de 4.000 euros en llamadas pidiendo socorro a Afrodita, la diosa de los incendios. Este ladr¨®n es un experto en tenazas y cortafr¨ªos, los instrumentos con los que forzaba las contraventanas de las viviendas. Sin duda, su gran experiencia en cortafr¨ªos le otorgaba un plus de profesionalidad a la hora de llamar a las l¨ªneas er¨®ticas, tan adecuadas para entrar en calor, cuando uno, por ejemplo, acaba de ser rescatado en la sierra de Guadarrama tras haber sido devorado por un alud de nieve.
A las dos horas de o¨ªr esta noticia en el programa Gran V¨ªa, leo en un taxi unas p¨¢ginas de la novela Tokio Blues, del japon¨¦s Haruki Murakami. En la p¨¢gina 209 Reika, una profesora de piano, relata un coito con una alumna suya de 13 a?os que, tras fingir que se ha indispuesto, la arrastra a un alud serrano de caricias y besos. Reika se ve arrastrada hacia un orgasmo inesperado en su propia casa y, en el pico Mulhac¨¦n de su excitaci¨®n, piensa en su hija que puede volver a casa y tiene unos pensamientos que es probable que en alguna ocasi¨®n tambi¨¦n tuviera este original ladr¨®n. Reika pensaba: ?Y si mi hija me encuentra en esta situaci¨®n? Su hija se quedaba los s¨¢bados hasta las tres en casa de sus abuelos maternos. Pero ?si por casualidad la ni?a volv¨ªa antes? ?Pensaba el ladr¨®n en que el propietario del chal¨¦ pod¨ªa aparecer de repente? El taxi me llev¨® al Centro Cultural Puerta de Toledo, que tiene su sede en Gran V¨ªa de San Francisco, donde Ramiro Marrod¨¢n, un excelente pintor que expone con frecuencia en Berl¨ªn, hab¨ªa inaugurado una exposici¨®n con el t¨ªtulo de Dedicado a Chema. Chema era -por desgracia, ha fallecido recientemente- el pintor Jos¨¦ Mar¨ªa ?lvarez. La exposici¨®n est¨¢ abierta hasta el 25 de enero. Como dir¨ªa un autor de novela negra as¨ª es la vida: robo, comida, sexo, muerte y memoria amorosa para con los seres queridos.
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